Tokyo Godfathers

Película irregular, con buenas escenas y momentos emocionantes mezclados con otros mas aburridos.

Como siempre el dibujo impecable. La música bastante floja, sobre todo en comparación con otras del director que es fantástica.

Los personajes no están mal, y sus historias interesantes aunque sin demasiada originalidad.

Lo peor es la trama, A parte de ser un "remake" libre o como se quiera llamar, la historia es muy clásica.
Lo peor es que choca el tono amable que en lineas generales tiene la película con las escenas dramáticas de este grupo de marginados sociales que no terminan de convencer.

No está bien conseguido en mi opinión, y entonces no termino de coger ritmo, y a ratos se me ha hecho larga.

Aún así tiene un buen montón de escenas buenas y merece la pena al menos una vez.

En esta historia tres personajes sin hogar quieren darle uno a un pequeñito bebé al que llaman Tokyo. Las aventuras y desventuras de este trío de miserables resonarán en todos los espectadores porque, de una grata manera, se irá conociendo cómo surgió su amistad y de qué manera llegó cada uno a ser un habitante de la calle.
Es un relato candoroso y especial. Una animación que sin sofisticaciones, como suele ocurrir bajo los trazos japoneses, nos cuenta la humanidad oculta en las calles.

La película ambientada en el contexto navideño y de fin de año se centra en tres vagabundos, o mejor dicho, personas sin hogar o en estado de indigencia. Ellos son Gin (voz de Tôru Emori) un alcohólico de mediana edad, Hana (voz de Yoshiaki Umegaki) un travesti deseoso de convertirse en madre y Miyuki (voz de Aya Okamoto) una adolescente que escapó de la casa de sus padres.

Un día hurgando entre la basura encuentran a una bebé de pocos días de nacida, la curiosidad se hace en ellos, la decisión lógica sería hablar con las autoridades, sin embargo, Hana se niega a esto y desea quedarse con ella, por esto comienzan los problemas entre el trío. Para ponerle más emoción a la trama, entre la basura encuentran un bolso con algunas pertenencias de la madre, por este motivo deciden salir a buscarla, a pesar de las obvias dificultades que eso conlleva.

Tokyo Goddofazazu fue el tercer y penúltimo largometraje del tristemente malogrado Satoshi Kon, quien falleciera en 2010 apenas a los 46 años de edad por un cáncer, codirige junto a Shôgo Furuya quien hasta el momento es su único trabajo como director, aunque cuenta con una amplia experiencia como animador. A su vez, Kon escribe el guion basado en una historia propia en conjunto con Keiko Nobumoto, quien cuenta con un amplio bagaje como escritor.

El film presenta una visión un tanto desalineada de lo que uno espera de una sociedad tan recta como es la japonesa, un país de “primer mundo”, punta de lanza de la tecnología y un pueblo que muchos aquí en occidente lo visualizan como perfecto. Aquí se presenta el estrato social de los “otros”, de quienes se salen de lo “bueno” de esta sociedad, aumentado por tratarse de una época de fiesta como la que representa el fin de año.

Se muestran indigentes, personas sin hogar, con vicios, que tienen que hacer fila por un plato de comida, se muestra el abandono, robos, violencia, alcoholismo, personas con una sexualidad diversa, inmigrantes, etc. Pero todo representado en gran forma, porque además se muestra el detrás de “escena”, lo que estas personas vivieron para llegar a tal situación, mediante el flashback lo cual aclara muchas cosas.

Tokyo Goddofazazu es una obra de muchas coincidencias, pero vaya que vale la pena apreciarlas, aparte que no se muestran como inverosímiles, ya que toda la magia que se va creando alrededor de la película hace que su disfrute sea total y que creamos todas estas coincidencias. Kon logra perfectamente que nos sintamos atraídos por los personajes y por la situación en la que se encuentran, que los acompañemos, disfrutemos y suframos con ellos.

A su vez, el guion es excelente porque utiliza el factor sorpresa una y otra vez para desarrollar su trama, con giros argumentales sobresalientes que van desencadenando situaciones inesperadas una y otra vez. Esto enriquece sin duda alguna la propuesta y el manejo de la historia. El film dura poco menos de 90 minutos muy bien manejados, hay una fluidez de principio a fin, saltamos de escenarios constantemente, hay acción, mucha comedia, pero el drama no se pierde en ningún momento.

La animación está realmente muy bien, se encuentra situada en la actualidad (bueno, hace 12 años), no se escatiman momentos para mostrar la grandilocuencia de una megaciudad como lo es Tokio, pero, con ese contraste ya citado recurrentemente del contexto en el que se desenvuelven los protagonistas. Es un trabajo que se acerca al realismo, en especial al ambiente, mientras que los personajes como es costumbre se exageran sus facciones de forma genial.

Tokyo Goddofazazu es una gran animación y una mejor película, con un buen mensaje, apenas para la época decembrina que se avecina.

*Introducción

Tokyo Godfather es ante todo un cuento de Navidad. Puede resultar extraño que en un país como Japón, una fiesta de marcado carácter occidental se celebre. Pero el sincretismo religioso y la confluencia de culturas llega a todos lados. En Tokyo Godfather se nos cuenta la historia de tres mendigos. Tres fracasados, perdedores irreversibles y alejados totalmente del conjunto de la sociedad.

Como podemos apreciar este planteamiento es puramente fordiano. El gran director tuerto tenía especial cariño por las personas marginales y desfavorecidas y su cine siempre ofrecía una mirada amable y digna a los perdedores de la sociedad. De hecho el título del presente filme es una referencia directa al western navideño Tres Padrinos, dirigido por el propio John Ford.

Como ocurren en el western y en esta película, este trío de perdedores encontrarán un bebé abandonado y deberán ser héroes a la fuerza protegiendo a un niño desamparado a través de un viaje de autodescubrimiento.

*Personajes

Uno de los aspectos más interesantes de Tokyo Godfather es cómo se definen y detallan los tres personajes protagonistas. El trío es un grupo de perdedores absolutos. Gente incapaz de confrontar su propio pasado y que encuentra más sencillo huir de este. El trío lo conforman Gin, un hombre que por el juego y la bebida lo perdió todo. Hanah, una mujer transexual que es quien más se vuelca en el cuidado del bebé y por último Miyuki, una estudiante de secundaria huyendo de su familia.

A lo largo de la cinta estos tres personajes evolucionarán y confrontarán con su pasado. Demostrarán que a pesar de todo, de ser la gente que se cuela por las rendijas de la sociedad, pueden ser héroes y que existe la redención para ellos.

*Desarrollo

Quizás en el desarrollo de la película el guion de Satoshi Kon y Keiko Nobumoto (peca de ser un poco rocambolesco y estrambótico. Muchas situaciones disparatadas y extremas se suceden y en la resolución de algunos conflictos optan por solventarlo con Deus Ex Machina o intervienen casualidades demasiado descaradas.

Pero quizás este conjunto de casualidades y de Deus Ex Machina, suponga una suerte de milagro navideño y encaja perfectamente con el espíritu de bondad humana y de perfectas imperfecciones que desprende el conjunto de la película.

*Animación

Uno de los aspectos más cuidados de Tokyo Godfather es la impecable animación que tiene el producto. Aun siendo una cinta de anime, la película huye de los dibujos de ojos grandes, pelos de colores imposibles y manierismos exagerados propios del anime.

Es más trata a los personajes con un dibujo de corte más realista y profundizando en los detalles de cada elemento que aparece retratado. Tokio está recreado con una profunda minuciosidad y la bulliciosa metrópolis es un marco inigualable para plantear esta odisea contemporánea.

*Conclusión

Tokyo Godfather es una película bastante notable. Tiene un buen espíritu navideño y un buen humor constante. Los dramas que relatan los protagonistas son profundamente veraces y ciertos. Lo que impulsa que el milagro navideño que supone la cinta cobre todo el sentido.

A mi gusto, la resolución de muchas subtramas mediante coincidencias improbables demasiado obvias le resta un poco de fuerza sin embargo, esta película es ante todo un retrato digno y amable de los perdedores de la sociedad. Y es también una apelación a que cualquier persona en el momento adecuado puede ser un héroe. La mirada compasiva, que no patética, sobre los protagonistas es deliciosa y hace que sea una película totalmente recomendable.

Escrito por Juan Carandell Rojo

Los matices en la construcción de personajes y la personalidad que adquiere la urbe son abrumadores. La dualidad típica en la filmografía de Satoshi Kon hace de su película mas convencional, un ejercicio por exponer las miserias propias y conseguir segundas oportunidades con deseos de redención.

La exclusión social y el perdón. El pasado toxico secuestrando futuros llenos de esperanza. Casualidades de destinos que odian a la vez que aman, como amaron y odiaron a Chiyoko Fujiwara en Millennium Actress.

Excelente.