Comandante

Bonito reportaje, sobre la figura del comandante, reportaje de esa parte que no vemos de un fidel que siendo uno de los personajes más odiados y controvertidos, nos muestra su cara; la humana, por momentos te olvidas que lleva un traje verde oliva.

Excelente realización en un documental un tanto atípico por el lirismo que entraña..

Una película que ya me sorprendió la primera vez que la vi por esa cercanía y sencillez en el trato que mostraba el líder cubano, al que hay que agradecerle que no cortara en ningún momento ni el rodaje ni el montaje, a lo que tenía derecho según lo pactado. Polémica en su estreno, ofrece lógicamente la visión de parte y no entra en las cuestiones más conflictivas. En cualquier caso, hoy adquiere un valor incuestionable como documento político y de lo que no se puede dudar es de la dedicación inquebrantable que Fidel Castro ha entregado al gobierno de su país, independientemente de que se esté de acuerdo o no con su revolución comunista, en lo que no entro.

Me lo habían contado pero no me lo creía, y yo que pensaba que el director de documentales más demagogo y manipulador era el señor Moore, pues me equivoqué, el multimillonario Oliverio le hace una comida de sable en toda regla al sátrapa cubano para que nos creamos las bondades de la revolución cubana, no se que tienen los millonetis que les gusta tanto el comunismo (tal vez que no viven en los países donde se practica tal doctrina). Efectivamente como dicen por ahí en otra crítica, Fidel no se come a los niños, pues no, no se los come espera a que sean mayores para fusilarlos.

Pensaba que "Franco, ese hombre" iba a ser la última de las películas de propaganda sobre un dictador. "Comandante" demuestra que me equivoqué.

Como entrevista es muy mala. No es una hagiografía, es pornografía como han dicho en otra crítica. Ni siquiera Urdaci llego a esos niveles.

Como documental tampoco es bueno, ni siquiera en el sentido propagandistico. Stone debería haber visto antes a Moore, a Eisenstein o a Leni Riefenstahl. Incluso el bodrio de Saez de Heredia está mejor realizado.

Como documento histórico y psicológico no está mal. Uno consigue entender porque un anciano patético con labia puede encandilar a una persona considerada "culta e inteligente".

Todo izquierdista europeo y latinoamericano, igual que todo liberal radical estadounidense, debe cumplir con el voto de visitar Cuba, la Meca del rojerío. Si encima logra ver y entrevistar a Fidel Alejandro Castro Ruz, es algo así como tocar la piedra de la Kaaba. Bien montado y profesionalmente hecho, el documental resulta insoportable por su babosería ante el dictador.
Fidel Alejandro Castro Ruz: hijo bastardo de un cacique rural, estudió con curas, pistolero en la Universidad de la Habana, cercano al Partido ortodoxo. Agente del bloque soviético desde finales de los 40. Megalómano, psicópata. Engañó a Cuba con una falsa revolución democrática que trajo el comunismo. Despreció a Jruschov por no arrasar USA con armas nucleares. Su legado es de pobreza y represión, y su única verdadera ideología, la adoración que siente por Fidel Alejandro Castro Ruz.