Once (Una vez)

Un joven músico callejero ejecuta su guitarra y canta por las calles de Dublín.Una joven inmigrante checoslovasca, amante de la música, se detiene a escucharlo,una noche.Esta vez, el guitarrista canta un tema de su autoría.
Así comienza, este film irlandés, que nos invita a recorrer este tramo en la vida de sus protagonistas. Poco a poco, los jóvenes se van conociendo.La música los une en el deseo de expresar sus sentimientos mediante versos y melodías.
El joven guitarrista ha terminado una relación amorosa que ha dejado el dolor de la traición.La chica tiene una niña pequeña que cría con el apoyo de su madre.Su esposo ha quedado en Checoslovaquia a raíz de una crisis en su relación de pareja.
Componer y cantar es el modo que ambos encuentran para dar salida tanto a la tristeza y el desengaño,como a la esperanza y la necesidad de amar y ser amado.Entre los jóvenes, todo fluye naturalmente. Las posibilidades de dar un paso más en este camino, los lleva a conformar una banda musical y grabar sus propios temas.
Sin embargo, no es el éxito artístico lo que persiguen.La música, como arte dotado de una belleza singular, facilita la manifestación de aquello que atraviesa nuestra humanidad más íntima. En esto reside, el encanto del film.
Hay escenas que dejan un sutil y delicado gusto, como aquélla en que la joven,mientras toca su nuevo piano, observa desde la ventana de su pequeño apartamento.¿Qué recuerdo ha quedado en su memoria ?...
Si desean conocer mis opiniones sobre otros films, los invito a visitar mi blog: unespectadorunamirada.

El antagonismo perfecto a la superproducción. Simple, austera y cautivadora película que abandona todo tipo de tecnicismos en la imagen o el guión para centrarse exclusivamente en la música. Y aunque parece que 'Once' es el producto nacido de la cámara de un Instagramer, no deja de tener su trasfondo y su moraleja: basta con que dos caminos se junten una vez para que permanezcan unidos de por vida. Me gusta.

He visto esta cinta con mi hermana porque ella se la descargó a raíz del consejo de un "amigo" que tiene. Ese tal amigo le dijo que no se trataba de una película empalagosa, cosa que ha resultado ser cierta. El film transcurre en Dublín, donde un joven guitarrista y cantante trata de ganarse la vida callejeando por todos los lugares de la capital irlandesa. Por pura casualidad conoce a una guapa inmigrante checa que desde un primer momento se interesa por sus canciones. A partir de ahí vamos conociendo cada vez mejor a ambos personajes, ya que nos enteramos de sus respectivos dramas personales y motivaciones. Lo mejor empieza cuando ambos descubren que les emociona lo mismo, que es la música. La joven tiene un talento enorme para tocar el piano, lo que les anima para componer una serie de canciones juntos. Cabe destacar la bella naturalidad que la historia refleja en todo momento. Los diálogos son muy escasos a lo largo de los 85 minutos que dura la proyección. Sin embargo, esos breves momentos generan los suficientes sentimientos como para hacernos empatizar con aquellos que hablan. La química entre los 2 músicos es muy buena y se percibe durante prácticamente todo el filme. Esa conexión que despertó en la escena en la que tocaron juntos por primera vez en la tienda de música. Las secuencias románticas no desmerecen la pena, al contrario, llenan con las notas musicales las escenas más íntimas y tiernas. El desenlace me ha chocado bastante de lo inesperado que me ha parecido. Aun así opino que se trata de un final sumamente realista y bonito en cierto sentido. Merece bastante la pena verla pese a su simpleza. Una producción natural como pocas.

La película que dio a conocer a John Carney al gran público resulta de una delicadeza y un aire indie de lo más original. De una simple historia de dos personajes unidos por el desamor, nace un dueto que interpreta una preciosa banda sonora (When your mind´s made up ganó el Oscar a la mejor canción) y que protagonizan este film sencillo, sensible y disfrutable

Para que nos situemos, ¿Cómo una película Irlandesa, con bajo presupuesto y dos cantantes como actores puede tener un 7,2 de nota media en una de las mayores plataformas de cine y haber ganado el Óscar a mejor canción? Quizás porque es todo sentimiento, porque la música y la personalidad de ambos personajes te contamina, en el mejor sentido de la palabra, y porque muchas veces menos es más y esta película es uno de los mayores ejemplos.

Un musical "indie" creado por el director de Begin Again y Sing street. Una película nada común que consiguió triunfar y dejarnos una de las mejores canciones que se han escrito (cada vez que hablo de esta película me dan ganas de ponerla) y catapultó al ya mencionado director y a ambos artistas internacionalmente.

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