Thumbsucker (Haciendo dedo)

"Thumbsucker" atraviesa la carretera sin dejar surcos. Se deja ver sin ningún tipo de prejuicio y entretiene el desarrollo de la vida en plena adolescencia del protagonista.
Relata con retazos la historia sin llegar a profundizar en ningún protagonista, por lo que tenemos la sensación de ver lo que se nos permite ver, pero no vemos lo que no se nos permite, que es lo que nos gustaría ver. Muchas miradas al vacío y un interrogante en el espectador.

La película gana con los minutos, eso sí, pero nos deja una sensación de fraude que no se puede evitar, a pesar de que se contonean por la pantalla actores como los populares Keanu Reeves, Benjamin Bratt, Tilda Swinton o Vince Vaughn (me ha sorprendido gratamente, casi el mejor del reparto coral) y nos sorprende con la conseguida caracterización del protagonista, Lou Taylor Pucci.

Todos ellos forman una película neutra, de las que rellenan los huecos en las agendas, pero no perduran en la memoria. Eso por querer exponer tantas cosas y no llegar a enfatizar nada.

Mike Mills tiene poquitas películas pero en cada una de ellas apela a momentos de reflexión, volcándoles sentimiento (el mejor ejemplo está en la bellísima 'Beginners').
En 'Thumbsucker', un muchacho de 17 años todavía se chupa el dedo, sin saber cómo solucionarlo ante la mirada acusadora de sus padres (Tilda Swinton y Vincent D'Onofrio).
Cine indie que explora mambos de la adolescencia, a veces perdiéndose un poco en el camino, y en ocasiones dejando interesantes frases existenciales.
Mención especial para la simpática participación de Keanu Reeves.
6,4 Alancitos Adolescentes sobre 10

Una mezcla entre American Beauty y Dony Darko, estupenda, como estas dos, desmoronando las entrañas de una familia aparentemente "normal", y que no deja de serlo, simplemente, nos adentra en sus miserias, temores y delirios, como cualquier familia de cualquier raza, cultura o nacionialidad. Un encanto el actor protagonista Lou Taylor y todos en general, desde el primero al último. Lo único que me deja un poco confusa es ese final tan esperanzador que no siempre se corresponde con la realidad y que parece un poco "Made in Usa".
En su conjunto es una película inolvidable sobre el amor, las relaciones, la adolescencia, la madurez, los sueños, los deseos... Sobre el ser humano.

El cine “indie” de los noventa se caracterizaba por un ritmo trepidante, más rápido del acostumbrado. La nueva ola indie que nos llega de Estados Unidos se basa en todo lo contrario. Suelen tener un ritmo lento, véase “Brick” (Rian Jonson, 2005), “Una historia de Brooklyn” (Noah Baumbach, 2005) o “Junebug” (Phil Morrison, 2005), con el objetivo de centrarnos en su guión, fotografía, música,… El problema es que hay que contar con un gran guión para que el ritmo no agonice la cinta. A algunas cintas les cuesta arrancar y después arrastran su pereza inicial por todo el metraje.
“Thumbsucker” no es una excepción. Adolece de ritmo demasiado lento y es una pena porque hubiera ganado mucho más con algo de vitalidad. Idea original que no ha sido plasmada acertadamente en un guión algo cojo que funciona a medias. Me sorprende una gran banda sonora, muy acertada. En definitiva, película interesante que pudo ser mejor.