No matarás... al vecino

Como comedia ochentera es excelente, si quieres eso, lo tienes. Costumbrista representación de la clase media americana del interior del país. Clichés que te mondas de risa y una BSO nada mala si te gustan los 80, sale Corey Feldman y todo!!; bien podría ser el pueblo suburbano de Poltergueist I.
Impagable la caída del militrar retirado, el vecino mariquita a lo Truman Capote o un Tom Hanks en su punto álgido como comediante sin más pretensiones, hombre modelo medio de la burguesía acomodada de los 80 en EEUU.
Desternillante, tendrás un poquito de Historias de la Cripta, humor chusco, humor inteligente entre lineas... humor pueril jajaja es que me parto de acordarme de ella.

Es una comedia que, aunque anclada en los ´80, tiene un punto de suspense que mantiene alerta al espectador durante toda la película. A los adultos nos puede resultar una tontería, pero creo que al público más pequeño puede entretenerles bastante.

Vaya por delante que Joe Dante me parece un cineasta interesante, pues sus películas siempre me resultan atractivas. Véase, por ejemplo, 'Piraña' (1978), 'Aullidos' (1980), 'Gremlins' (1984) o 'Pequeños guerreros' (1998). Escapa de la seriedad, metiéndonos en un nuevo mundo de aventuras, fantasía, terror o comedia, muy bien pulido y que consigue su cometido principal, entretener, de un modo bastante digno.

Parte de eso contiene 'No matarás... al vecino' (1989). Una comedia, combinada con toques de intriga y terror edulcorado, que ahonda en el mito del vecino extraño, enclavando su atención en el típico y residencial barrio de clase media estadounidense. Ayuda a su buen hacer el hecho de contar en los títulos de crédito con la figura de Tom Hanks, encorsetado durante los años ochenta como actor de comedias tan ligeras como simpáticas, quien también ha dejado, en ese tramo de su carrera, un buen legado cinematográfico: '1,2,3... splash' (1984), 'Despedida de soltero' (1984), 'Esta casa es una ruina' (1986) o 'Socios y sabuesos' (1989).

En fin, 'The burbs' contiene elementos suficientes como para ser una película de visión recomendada. No encontrarán una obra maestra ni gran cine entre sus imágenes, pero en ella se aúna el talento de Joe Dante con el carisma cómico de Tom Hanks, todo desarrollado bajo el incomparable marco que proporcionan los años ochenta.

Recuerdo con cierta añoranza aquellos domingos de pelicula de la semana. Este tipo de títulos se llevaba mucho en mi juventud, y pese alguna chapuza, de vez en cuando caía algo entretenido. Sin duda es una película que recuerdo con agrado. Te hace sonreir lo debido y te deja un toque optimista que te dura lo suficiente antes de olvidarla.

Como dato importante resaltar una de las mejores escenas cómicas de mi vida como espectador, el amigo Tom con unas sardinillas.

La etapa cómica de Tom Hanks tiene interesantes hallazgos que perviven en la mente de todos como "esta casa es una ruina", "big", "dos sabuesos despitados" o ésta "no matarás al vecino" que desde un planteamiento simple se gana la confianza del espectador y casí le convierte en un vecino más del barrio residencial del film. No puede decirse que me ría a carcajadas cada vez que la veo pero tiene una cercanía y un hilo narrativo tan bien llevado que la hace agradable de ver (especialmente si aún no has cumplido los 20).