Haz click aquí para copiar la URL

Lars y una chica de verdad

Comedia. Drama. Romance Lars (Gosling), un joven muy dulce y muy tímido que vive con su hermano (Schneider) y su cuñada (Mortimer), lleva, por fin, a casa a Bianca, la chica de sus sueños. Lo malo es que se trata de una muñeca que compró en Internet, aunque él la trata como si fuera una mujer real. Aconsejada por una doctora (Clarkson) y con la intención de ayudarlo, su familia decide seguirle la corriente. (FILMAFFINITY)
<< 1 2 3 4 10 20 >>
Críticas 99
Críticas ordenadas por utilidad
6 de noviembre de 2008
21 de 31 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lars es un chico introvertido que vive en el garaje de la casa de su hermano mayor, que tiene como única meta en la vida, que llegue el siguiente día para volver a hacer lo mismo que el anterior.

Ni siquiera los esfuerzos de su cuñada por que haga una vida familiar consiguen sacar a Lars de su mundo, hasta que un paquete llega a su vida, una muñeca hinchable a la que convertirá en su novia.

Para evitar hacerle daño o potenciar una posible enfermedad, todo el mundo le sigue el juego y trata a Bianca (la muñeca) como a un ser humano.

Con un argumento así, se podían hacer dos películas, una película cómica o una dramática y Gillespie ha optado por el camino de en medio... ni una cosa ni otra.

En algunos momentos roza el absurdo, las escenas son tan dantescas que no consiguens empatizar con el protagonista ni con la situación porque no tiene sentido.

Tiene una parte que te da un pequeño pellizquito en el estómago, que se desvanece cuando ves las escenas del pueblo volcado con el tema...

Creo que se ha desaprovechado un buen guión con una película bastante mediocre...
Gelen
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
31 de marzo de 2008
22 de 34 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hacía tiempo que no veía un estreno de cine americano que me gustase tanto como "Lars y una chica de verdad". No sólo porque su comunidad de entrañables y disfuncionales personajes me recordasen tanto a los de "Doctor en Alaska" sino también por esa capacidad, tan rara hoy en día, de convertir lo complicado en sencillo, lo ampuloso en leve, sin perder un ápice de sinceridad ni de inteligencia. Te cuenta con desparpajo la historia de Lars, un tipo inadaptado y solitario que adopta como novia a una muñeca "anatómicamente exacta" que encarga a medida por Internet. Tras el pasmo inicial de colegas, parientes y vecinos que dan lugar a escenas tan hilarantes como la "presentación" de la muñeca Bianca a la familia o su posterior emancipación, hay un intenso y tristísimo ensayo sobre la soledad, las relaciones en una comunidad pequeña, lo relativo de los conceptos verdadero y falso, el amor, el alienamiento y el egoísmo. Un guión impecable al que sólo le fallan unos vuelos demasiado altos para una historia que no los necesita, pero aún así, una gran película que resplandece entre la mediocre cosecha del año pasado.
Imprescindible V.O (sobre todo para apreciar las asombrosas interpretaciones de Ryan Gosling y Patricia Clarkson) y no tener ideas preconcebidas antes de verla.
Neathara
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10 de septiembre de 2008
13 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Uno siempre se pregunta ¿Cuál es el umbral que separa un problema emocional de una enfermedad mental?... Actualmente, no son pocas las personas que acuden al psicólogo y al psiquiatra para que "los ponga en su sitio" en caso de descontrol emocional o mental. Pero, la realidad es que esta última disyuntiva se convierte en problemática por culpa de lo extraño que pueda suponer una conducta determinada por parte de un sujeto (x).
El film "Lars y una hica de verdad" nos demuestra que si en las grandes urbes sustituyéramos el egoismo por la solidaridad habría menos enfermos en los manicomios y en las consultas médicas. El personaje de Lars encarna a la perfección el típico sujeto que por un trauma cualquiera no ha conseguido asimilar el rito de paso necesario capaz de dejar atrás lo nocivo de ese trauma. La razón de ello es que Lars sufre un bloqueo emocional al que muchos pondrían el nombre de enfermedad o enajenación mental. Pero, ¿Cómo puede un hombre estar enfermo mentalmente si realiza sus tareas cotidianas con normalidad, tiene sentimientos hacia los demás y razona correctamente? La razón, aunque díficil de ver, se halla en la "normalidad" del problema visible de Lars, a quien el exceso de soledad le ha provocado una confusión emocional que repercute en su manera de peribir la figura del ser amado dándole vida a lo que no tiene.
El director Gillespie, combina de un modo excepcional el dualismo Lars-pueblo, perfectamente intercambiable por el de problema emocional-normalidad. En este sentido, lo que el director intenta transmitirnos es que muchas de las conductas extravagantes de hoy en día son juzgadas despectivamente por su anormalidad lo que lleva a estigmatizarlas con la etiqueta "problema mental". En esta línea, Gillespie intenta decirnos que esas conductas extrañas encontrarían el camino de la emoción-y por tanto de la normalidad- si se tratase al enfermo en potencia como un no enfermo. Lars no necesita pastillas, ni un loquero, sino el respeto y el reconocimiento de un pueblo que, en lugar de darle la espalda, se inmiscuye al cien por cien en su pequeño trance de confusión. Es el reconocimiento de ese bloqueo emocional como algo normal por parte de los demás lo que a la postre impide que el protagonista se convierta en un adicto a los fármacos. Claro que, en toda esta terapia puesta en liza por el director, Lars no podría nunca alcanzar ese estatus de normalidad y por tanto ese tránsito hacia la autocuración si la acción no transcurriese en un pueblo. La pequeña comunidad en la que el protagonista vive, come, respira, trabaja, se emociona o se enamora, es crucial a la hora de ayudarle. Pues en una gran ciudad la escala de valores vela por la individualidad, con lo que la autocuración se vuelve más compleja.
En mi opinión, Gillespie, a través de Ryan Gosling, pone de manifiesto el eterno debate de la medicina mental, a saber: en muchos casos ¿ Qué hay enfermos o enfermedades?.
MILINKO
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8 de mayo de 2008
13 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando me presente en el cine para ver "Lars and the Real Girl" reía que iba a ver una comedia divertidilla y entretenida, y no una de las películas más tiernas y bonitas que he visto últimamente. Esta película es eso, bonita, agradable, divertida... Se ve a gusto, sin salidas de tono ni situaciones demasiado exageradas, teniendo en cuenta el argumento. Yo personalmente me pasé la película sin saber si reír, por lo surrealista de la situación, o llorar, precisamente por todo el fondo que ha llevado a esa misma situación al personaje de Lars, magistralmente interpretado por ese actorazo que es Ryan Gosling. Ahora entiendo su nominación al Oscar al mejor guión original, debemos dar gracias porque todavía se hagan películas así. Un consejo: merece la pena verla en versión original. Muy buena.
La película del día
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de diciembre de 2009
11 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Lars and the real girl" es una película con sabor a las de antes. Sencilla, bien dirigida, muy bien interpretada y respirando buen cine por los cuatro costados.

La historia es muy original y describe de forma magnífica la evolución de la enfermedad mental que padece Lars. Los diálogos, las situaciones y sobre todo, lo magnífico del personaje protagonista, hacen de esta película una de mis favoritas.

Además, el metraje mide lo que necesita la diégesis y la intrahistoria entre Margon y Lars es bellísima.

En definitiva una película extraña, atemporal, anacrónica, bellísima, conmovedora e inmensamente humana, tanto como la locura.
antonio_corleone
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 10 20 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow