El cosmonauta

La película en si es cutre, mala, hasta desagradable.
La producción es lamentable. Técnicamente es pobre y el reparto esta muy mal seleccionado, las localizaciones son muy malas, con unos decorados de risa, por no hablar de que cometen varios patinazos históricos que no son dignos a estas alturas de la película.
El realismo brilla por su ausencia, como si se hubiese hecho deprisa y corriendo, sin prestar atención en absoluto a ninguno de los detalles.
En definitiva, si ya tenia pocas esperanzas depositadas en la película, se me confirmaron todas después de verla

Devolvedme estos 79 minutos de mi vida, primer aviso.

La verdad es que no suelo ser muy negativo con las críticas. Si no tengo nada bueno que decir me callo. Pero es que esto es...

Los primeros 20 minutos, o así, son leeentos, con planos largos, pero prometen algo interesante, una idea, un planteamiento. ¿El resto? abandonan la idea inicial y pasan a... nada. Nulo, Vacío. A una historieta de amor insulsa, deshilachada, mal contada, sin fuerza, planos largos, seguidos de planos largos, pero esta vez esperando a que termine, y sin final. No es que haya el consabido "final abierto", para que haya de eso tiene que haber habido algo antes, un planteamiento y nudo previos. No es el caso.

Alguien debería explicarles que meter planos largos detrás de planos largos, recrearse en detalles, para volver otro plano largo, no hace necesariamente a la película más poética, más culta, o de culto.

No sé donde leí que parece una película Redux a la inversa. Es como si con todos los trozos de metraje que sobraron de montaje final hubieran intentado montar una película. Me parece una descripción acertada.

Hay gente que quiere contar algo y le sale un bodrio, porque lo que tiene que contar le interesa a él y a sus amigos, o porque no ha sabido contarlo. A "El cosmonauta" lo que le ha pasado es que no tenían nada que contar, querían hacer una película con crowdfunding y así lo hicieron. Se preocuparon de la parte técnica, que es la parte difícil cuando uno tiene una idea pero pero no dinero, y se recrearon en ella. Hicieron una magnífica promoción, muy profesional, y que supongo que, a pesar de no usar publicidad directa, les habrá costado dinero, y salieron airosos. Pero se olvidaron de lo más barato (en dinero): Tener un guión. Y les ha salido lo que les ha salido.

Me gusta pensar que a los autores les ha sobrado entusiasmo y les ha faltado oficio. Pero a la vista de las ridículas declaraciones de "Sabíamos que no era para todos los públicos", me cuesta disculparlos. No hay nada más patético que, cuando se tiene un fracaso de público y crítica, presumir de ser muy exclusivos.

Me encantaría decir algo positivo de este video musical (porque es lo más a lo que puede aspirar) pero me temo que se resume a la fotografía del film, que sin ser sobresaliente, tiene ideas bastante interesantes. Por desgracia, las alabanzas se acaban aquí.

Querer hacer un drama existencial en un entorno tan lejano y absurdo, sin meter un contexto socio-económico de peso para darle un eje a la trama como ya pudimos ver en la maravillosa "La vida de los otros", nos situa ya en un horizonte muy lejano a la lógica que, además de brillar por su ausencia nos deja un regusto a mofeta radioactiva cuando intentamos ahondar en ese yermo infinito, sin rastro de vida, al que han intentado llamar guion.

Y es mucho más grave que alguien como Nicolás Alcalá, que se permitió en cierta conferencia, darle lecciones de cine al guionista de Tiburón, no sea capaz de estructurar ni tres líneas de dialogo, sin que parezca una idea surgida de un retrete.

La proeza de crear una casi película con dinero recaudado por crowdfunding, tampoco le aporta valor de ningún tipo, más que nada porque mucha de la gente que trabajó para el proyecto, aun espera la retribución económica prometida por el director, que nunca ha llegado y que parece haberse quedado gastada en las visitas a otros países en hoteles de alto standing, para dar a conocer el proyecto.

La lista de goteras en este pseudo-film es demasiado grande para no salir naufragando, da la sensación de que el director se ha tropezado con sus propios pies, queriendo hacer una parábola imposible en cada aspecto con el fin de destacar en todos los ámbitos y claro, quedándose demasiado lejos -ya ni de la mediocridad- por falta de experiencia o talento.

Seguro que una presentación mucho más pequeña e intimista como pudimos ver en "Blue valentine" le hubiese dado más peso y sencillez, dado vida a los robots que son los personajes, sentido a tanta fotografía inútil y es que se puede hablar del existencialismo con sencillez, incluso con imágenes como ya nos han demostrado películas como "primavera, verano, otoño..." Siento decir que son fríos hasta los títulos de crédito.

Hay diálogos que chirrían de una forma escandalosa, parecen escritos por adolescentes con aspiraciones poéticas lo que le da aún menos credibilidad a todo lo que ocurre durante la insufrible hora y pico que dura esta pesadilla.

¿Detalles buenos? si, que ha habido mucha gente con talento trabajando por la cara y que podrían haber cambiado la historia del cine, de haber topado con una persona de ideas maduras y lógicas. Por desgracia, hay gente que con mil euros y una cámara de aficionado, que ha grabado cosas mucho más interesantes que "El cosmonauta" que, como todo el mundo se temía, ha sido mucho ruido y pocas nueces. Bastante mala, lamentable y además por muchos motivos, una cinta inmoral, alzada con el sudor de otros para la gloria de uno.

Hacía tiempo que quería ver esta película por dos motivos. Uno, que era de ciencia ficción (un astronauta dado por perdido vuelve a la Tierra, pero la encuentra vacía) y segundo, por toda la historia generada alrededor de su rodaje. No sé exactamente si fue creada íntegramente o en parte por crowdfunding, pero tenía interés en saber qué habían hecho con el dinero de la gente. Pensaba que en ese sentido habrían ido con mucho más cuidado que con una producción más comercial y les saldría algo notable, pero no ha sido así. Me ha decepcionado. Lo que han rodado es un compendio de escenas más o menos inconexas muy rutinarias y que apenas generan tensión o misterio alguno. Y de ciencia ficción muy poca. Me quedé dormido a los 45 minutos (craso error para cualquier película. No me duermo fácilmente), pero sólo vi el típico drama amoroso que gira alrededor de un trío de amigos. Como uno de ellos desapareció en el espacio, el amigo y la amiga se liaron. Ahora, con la vuelta de una cápsula vacía (el protagonista representa que ha llegado a una dimensión paralela y en la realidad sólo la cápsula) vuelven a aflorar los antiguos fantasmas del trío. Tópico y aburrido. Podrían haber ofrecido una película de ciencia ficción interesante, pero las ansias de crear algo en plan Malick resulta artificial y la condena. Le pongo la nota que le pondré por el monólogo del inicio, que está bastante bien.

‘El cosmonauta’, el primer largo de Nicolás Alcalá financiado íntegramente gracias al crowfunding (o eso dicen por ahí) se presenta bajo los estandartes del drama romántico intimista superpuesto sobre la excusa de la aventura espacial.

La producción, cuyo gasto ronda el millón de euros, resulta cuanto menos insólita por ambiciosa para tan escueto presupuesto; Alcalá se revela como un realizador de buena conciencia visual capaz de crear pulcros planos y encuadres que recubren de sensibilidad los escasos 79 minutos de película, a los que se añade un uso elegante de los efectos visuales. Desgraciadamente, aquí se termina lo destacable; la poesía solo se vislumbra como mera neblina en un desarrollo que no hace justicia al original concepto sugerido en un principio. El guión, escrito por el propio Alcalá, naufraga en su intento por emular el estilo acuñado por Terrence Malick en ‘Tree of Life’, a porrazo de un montaje extremo y situaciones melodramáticas envueltas en tristeza musical y romance hasta lo empalagoso.

Las sensaciones generales son de obra confusa y desestructurada en su desarrollo y montaje. Una película más preocupada por lograr la trascendencia que por tener los pies en el suelo.

@DavidCarideS

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