Chinatown

Si 'Chinatown' tiene alguna razón para perdurar esa es Faye Dunaway, tanto su actuación como la forma que tiene Polanski de grabarla en cierta escena. Su cara es durante toda la película la cara del horror y de la parálisis. En una película llena de elementos que recuerdan a otras películas y al género noir y por tanto a una estructura encorsetada, Dunaway parece querer fugarse de todo ese mundo ya no solo ficticio, sino de esa forma de estar y representarse en el mundo. Polanski capta esto de forma maravillosa en...

Revuelvo a ver esta grandiosa obra de cine negro y me parece más mayúscula que en mi último visionado de hace unos meses, creo que tiene todo para ser considerada una obra maestra del séptimo arte.

Una excelsa trama, densa, que te atrapa y no te suelta hasta el último plano.
(Cómo se te ocurra ir al baño, o a otro sitio, puedes perder el hilo narrativo)
El argumento va in crescendo, no da tregua y contiene unos cuántos clímax enormes e intensos.

La fotografía es preciosa en interiores, como deslumbrante en exteriores.
La puesta en escena, sencillamente sobresaliente.
Ambientación de época, vestuario, maquillaje, coches, otro sobresaliente.
Las escenas de acción violentas, filmadas con un realismo portentoso.
El montaje es perfecto, el guión y como está representado en imágenes, digno de estudio.
No en vano, está considerado un guión magistral y lo es, se estudia en algunas escuelas de cine.

Los actores y actrices bien elegidos con un tridente excepcional:
Jack Nicholson, Faye Dunaway, John Huston. (El propio Nicholson, no está sobreactuado, cómo muchas veces)
El cameo del propio Polanski, como enano matón. (De notable humor negro, digno del propio director, nacido en Francia)
De hecho, es bajito de estatura, 1'65. Creo, sabe reírse de sí mismo.
El toque simbólico burlón, de cortarle un cacho de nariz, de un grotesco precioso.

Nada de spoiler:
La esencia maligna, que rezuma las más de dos horas, con ese final antológico.
El mal triunfa sobre el bien, el azar puede ser malicioso.
Otro director hubiera filmado un final mucho más complaciente y comercial.
Polanski es fiel a sus principios y demuestra por qué es grande.


Fue la última película que rodó en EEUU, después tuvo que huir por violar analmente a una menor, habiéndola drogado primero, hay un documental bastante interesante y documentado sobre el tema:
"Roman Polanski: Se busca" 2008'. Marina Zenovich.
Muestra entre otras cosas, el circo mediático en que se convirtió su juicio, y el juez estrella, como manipuló, lo que a la larga, le costaría el puesto.

Mi opinión es que hay que separar vida y obra.
Por muy repulsivo, es lo que hizó, creo que hay que ser capaz de separar y lograr disfrutar su obra, que tiene unas señas de identidad propias e intransferibles.
Por cierto, ya tiene película para 2023. "The Palace". Con Mickey Rourke y John Cleese, entre otros.

Tiene un rito pausado que me exaspera un poco. Siempre que la he visto he sacado la misma conclusión. No es propiamente una cinta de autor, pero tiene algo de ello. Es un marco de cine negro, pero tiene algo que la aleja de una cinta típica de ese género.
Me ha gustado mucho la música, una pequeña obra de arte.
El agua y sus problemas, la corrupción política, las mismas artes de siempre en un formato nuevo.
Jack Nicholson, Faye Dunaway, y John Huston sostienen la carga actoral. Me ha encantado Dunaway, me parece una actriz espléndida con películas inolvidables. He buscado en cuantas películas interviniendo Huston y me he quedado de piedra, Filmaffinity dice que ha intervenid o en 101 películas. Es cierto que los datos pueden incluir también documentales, y que él intervino en dos decenas largas de documentales, pero aun así puede ser, más o menos 70 películas. Una barbaridad.

Roman Polanski, Un director que maneja perfectamente la "sordidez", las películas de contenido escandaloso, algunas veces denigrantes, con mácula que llegan a manchar la pureza del equipo de filmación y de vez en cuando a los cinéfilos y casi siempre a los ocasionales, escandalizados por ese matiz pastoso y opaco en las líneas grises entre el gusto y el disgusto; no por azar una de las primeros largometrajes del dueto Polanski-Gérard Brach se llama "Repulsión". A veces los hechos repulsivos son de tal magnitud que nos dejan paralizados, la corrupción de la policía, la de los políticos, la de toda una ciudad, la del país entero robándole a otros mediante el engaño y mediante la intervención en las sombras o forzada y evidente. Pero nada es tan revelador de lo que es sórdido como un secreto inconfesable, el espacio y el silencio entre lo que debe ser revelado pero no puede serlo por propia defensa contra la locura, por lo tanto se termina aceptando casi todo, lo robado, lo contaminado lo podrido y lo indecible.

El leitmotiv del detective privado ¿duele? "Solamente cuando respiro", se va haciendo tan grande y mayúsculo a lo largo del film, el intertexto es tan pesado que si sabemos leerlo íntegramente nos termina afectando más el pasado de cada uno de los personajes que las madeja que se está desmarañando en el presente. De una u otra forma todos tenemos un Chinatown un espacio sin supervisión y sin ley donde hay que saber e investigar "lo menos posible", un lugar que se extiende por dentro de nosotros hasta que limpiemos nuestros pecados sin ahogarnos en el camino.

Roman Polanski nos presenta todo un clásico ¨Chinatown¨, film imprescindible para todo amante del genero policial negro.
La película es buena, eso nadie lo va a poner en duda, pero cuando te pones delante de un director como Polanski, no esperas que te sorprenda con algo bueno, te esperas que te maraville porque es un genio del cine. Y reitero, la película es buena pero no me quedo con nada en especial. El misterio no me llego a enganchar del todo y la única escena que me impacta es en la que los mafiosos le hieren la nariz a Gittes (Nicholson). Además, el ritmo es bastante lento y tarda en arrancar el misterio, que tampoco es que sea la panacea universal. Creo que la cinta hubiera estado mejor si hubiese sido en blanco y negro para homenajear aún más al género.
Si hay algo que he de mencionar sobre todas las cosas es a Jack Nicholson. Él es la luz de la película, totalmente, con su sola presencia llena la pantalla dando vida al atrevido detective Gittes que le gusta meter las narices (literalmente) donde no le corresponde, lo que le suele ocasionarle problemas. Esta vez su curiosidad lo lleva a involucrarse con un caso en donde una joven viuda, interpretada de gran forma por Faye Dunaway, esconde mucho más de lo que en un primer momento aparenta.