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Hijos del Tercer Reich (Miniserie de TV)

Serie de TV. Bélico. Drama Miniserie de TV (2013). 3 episodios. Calificada como la "Hermanos de sangre" alemana. Berlín, verano de 1941. En plena guerra, cinco jóvenes amigos alemanes se reúnen para despedirse antes de marcharse a sus respectivos destinos: dos hermanos, Wilhelm (Volker Bruch) y Friedhelm (Tom Schilling), partirán al frente del este. Charlotte 'Charly' (Miriam Stein), enamorada de Wilhelm, desea también servir a su patria como enfermera en el ... [+]
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Críticas 58
Críticas ordenadas por utilidad
9 de septiembre de 2013
36 de 50 usuarios han encontrado esta crítica útil
155/03(05/09/13) La televisión alemana nos ofrece una buena propuesta de cine bélico con didáctico mensaje sobre como la guerra transforma a las personas, un fresco sobre el despertar de la inocencia, los cinco personajes protagonistas nos ofrecen un mosaico sobre la situación alemana en diferentes lugares, testigos del auge y hecatombe de Alemania, de cómo no todos los soldados eran bestias inhumanas, muchos eran simples muchachos obligados a defender su Nación de un enemigo creado por Hitler, ‘Mesias’ que les guió a la autodestrucción. Es una miniserie de 3 episodios de hora y media con una atractiva puesta en escena, unas buenas actuaciones, pero con un guión que va de más a menos, un gran episodio primero pero que al desarrollarse las subrtramas cae en la irregularidad, tocado en muchos casos en lugares comunes del género. El título en alemán es mejor que el puesto aquí, traducido es ‘Nuestras Madres, Nuestros Padres’.

La serie arranca en junio de 1941 en Berlín y acaba en el mismo punto 5 años despues, en vísperas de comenzar la Operación Barbarroja que supondría la invasión nazi de la URSS, cinco amigos celebran una pequeña fiesta para despedirse, Wilhem, Friedhelm, Viktor, Charlotte y Greta, los cinco comparten alegrías y anhelos, esperan poder verse de nuevo allí en Navidad, ya que les han prometido que para entonces la guerra estará ganada, tres de ellos se van al frente, dos hermanos soldados que servirán en el mismo pelotón de la Wehrmacht, el mayor es Wilhem Winter (Volker Bruch) de 21 años, Teniente que ha estado en la invasión a Francia, y Friedhelm (Tom Schilling) de 19, novato receloso de las motivaciones de la Guerra y que piensa que esta sacará lo peor de ellos, lo cual le causa muchos problemas con su padre (Peter Kremer) y entre sus compañeros de batallón, además Charlotte (Miriam Stein), se enrola de enfermera en un hospital de campaña en la retaguardia del frente oriental, al principio está angustiada por el horror de la sangre, pero poco apoco se irá curtiendo, asimismo está enamorada en secreto de William, Viktor Goldstein (Ludwig Trepte), se queda en la ciudad, es un judío hijo de un sastre, es amante de Greta Muller (Katharina Schuettler), aspirante a cantante, ella le intentará ayudar a huir a USA camelándose a un Oficial nazi de las SS, Dorn (Mark Waschke), además este la enchufará para que lanzar su carrera de cantante, Viktor terminará abocado en una odisea a través del Este de Europa. Con los hermanos avanzaremos en tierras soviéticas triunfalmente al principio, pero poco a poco irán viendo que les acompañan Comandos de limpieza étnica de las SS, serán testigos de la crueldad sin límites, impresionante la escena en que William pretende salvar a una niña judía y el Comandante de las SS le descerraja un tiro en la cabeza.

Con guión de Stefan Kolditz y dirección de Philipp Kadelbach ofrecen una miniserie que cuando fue vista a mediados de marzo en Alemania fue vista por 7 millones de espectadores, provocando un gran debate en la nación, los críticos germanos en general la alabaron, pero en Polonia fue vilipendiada por lo racistas que exponen a sus ciudadanos, tomando como ejemplo a los partisanos, con frases como <Los judíos son tan malos como los nazis>, derivando en quejas del Embajador de Polonia en Berlín. Los ucranianos igualmente se quejaron pues se los pinta como acompañantes de los nazis, tampoco los rusos quedan bien parados, son dibujados como sádicos asesinaenfermos y violadores, con estas quejas se le tildó al realizador y guionista de extender las culpas para relativizar la de los alemanes.

Es un relato en tres actos, el narrador en off es Wilhem, con su desencantado voz se abren los episodios, así como de vez en cuando relata cómo va la Guerra rellenando las elipsis temporales. En el primer capítulo se sucede el auge del Imperio Nazi, todo son alegrías en el Este, en el segundo llegan los primeros reveses, aunque apenas se hace referencia se ha perdido la Batalla de Stalingrado y los hermanos se encuentran en el mayor enfrentamiento de tanques de la Historia, la Batalla de Kursk, son derrotados, el desaliento y el pesimismo hace mella, ya no luchan por una causa luchan por sobrevivir. En el tercero es el colapso de lo que queda del Tercer Reich ya pelean por inercia, una huida hacia ninguna parte, y al finalizar hay que intentar unir los pedazos destrozados de lo que queda. Es la parte bélica la que tiene más fuerza, la del judío aporta poco, quieren mostrar el sufrimiento judío y esto queda desdibujado, más allá de la polémica de que los partisanos polacos sean también unos antisemitas, de hecho el exterminio de judíos es visto apenas de soslayo en una aldea y por los vagones de ganado convertidos en de deportación, nada nuevo, huele a deja vú. Hay que decir que el productor de la serie, Hofmann, dijo que el presupuesto fue reducido a última hora, en el guión original Viktor llega a USA y allí sucede parte de la acción, pero con menos dinero se cambio a la Polonia y los partisanos, tramo muy endeble. También resulta algo irregular el tramo de Greta la cantante, su relación con el SS Dorm, resulta superficial, con una composición del SS bastante caricaturesca, malo malo, sin aristas, nada nuevo. Lo que hace atractiva la serie es el frente de Guerra, el retrato que se hace de los soldados alemanes, se nos cuenta que no todos eran fanáticos, se les dota de humanidad, de sentimientos, de remordimientos morales. También se nos muestran brillantes secuencias bélicas, el enfrentamiento con los rusos de los alemanes desde las trincheras con que finaliza el primer episodio, la recreación de la Batalla de Kursk,… (continua en spoiler por falta de espacio)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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14 de enero de 2014
31 de 44 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me veo en la obligación de escribir ante la ingente (y tal vez ingenua) avalancha de grandilocuentes comentarios sobre las bondades de la serie. Tiene un comienzo prometedor mostrandonos un grupo de cinco amigos que tendrán diversas experiences en la Segunda Guerra Mundial y que les cambiarán el carácter. Y todo desde una perspectiva alemana-nazi, lo que sería algo singular.

El problema es que bien podrían haber dicho que eran aliados y apenás notarías la diferencia. Hitler llevaba ya unos años dando la vara con muy diversos temas pero nada aparece más allá de la constante alusión a sus ordenes en el frente, una máquina propagandística enorme que parece incapaz de afectar a los personajes que actúan como si no supieran de que va el tema. ¿Dónde está la superioridad racial alemana que veía al resto como semi humanos? Solo se muestra el sufrimiento judio pero no se adentra en la mentalidad de la sociedad. Lo de siempre se muestra lo que paso pero nadie parece plantearse el por qué. Se plantea siempre en los mismos términos que "perdonan" al pueblo germano. Hay unos malos, llamados SS, que se encargan del tema, y más o menos, el resto son ajenos al tema. Creo que para que pasara lo que paso, se necesitaba más que la simple indiferencia de la mayoria al respecto.

Al final la serie recurre a coincidencias innecesarias, redención de sus personajes en el tramo final y castigo a los que fueron malos porque todos sabemos que eso es lo que le pasa al que se porta mal.

Tendremos que seguir esperando a una serie o película que sea capaz de acercarnos a los nazis y mostranos con realismo esa pespectiva en la que se llego a justificar éticamente y moralmente barbaridades. La transformación de una sociedad herida y en la pobreza después de la 1GM en una bomba de relojería que cambió el mundo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Capagris
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26 de enero de 2016
15 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tibia, así es como podría definirse Unsere Mütter, unsere Väter (Hijos del III Reich, 2013) Un la miniserie de 3 episodios que sacudió hace tres años ya, a Alemania, seguramente por ser uno de los pocos productos provenientes del país que trataba el tema de la Segunda guerra mundial (polémico siempre), pero que sin embargo lleva la corrección política por bandera. Más que una serie, podría calificarse la obra como una película de larga duración a pesar de que es cierto que el filme tiene ecos de la serie bélica de la HBO, Band of Brothers (Hermanos de Sangre, 2001).

El Argumento del filme se centra en cinco personajes (Dos chicas y tres chicos) que se verán envueltos de manera trágica en la guerra. Cada uno de ellos tendrá un destino peculiar, dos de los protagonistas son hermanos e irán juntos a la guerra, mientras que el tercer protagonista es un judío que sufrirá en sus carnes la política racial del III Reich. Por su parte, las mujeres simbolizan el papel femenino en el III Reich, con la protagonista pasiva que espera una recompensa del régimen y la protagonista activa y decidida que se convierte en una enfermera para poder ir al frente de guerra. A lo largo del metraje los personajes se entrecruzarán en varias ocasiones, algunas con mayor acierto que otras.

Algunos protagonistas resultan interesante, mientras que otros no acaban de cuajar. El personaje que interpreta Tom Schilling es el menor de los hermanos que partirán a la guerra. A diferencia de su hermano mayor, interpretado por Volker Bruch, él es la oveja negra de la familia y tiene una postura reticente ante la guerra, lo que le propicia numerosas acusaciones de traidor. Sin duda es uno de los personajes que mejor pinta al principio, porque se podría haber explotado la faceta del intelectual que no se suma a la hecatombe mental de la masa, y sin embargo el desarrollo del personaje acaba transcurriendo por unos caminos más prototípicos y aburridos. Es evidente que la película trata de vender el mensaje de que la guerra saca lo peor del ser humano (literalmente se dice una frase parecida a esta y se repetirá a lo largo de la obra), pero la manera en cómo se plasma es decepcionante.

Básicamente, el filme trata de enseñarnos que en su mayoría el pueblo alemán desconocía totalmente las actitudes de los grandes dirigentes nazis, tratando de exculpar así gran parte de la población. De tal manera, que la miniserie no se inicia con la invasión a Polonia o incluso antes con la anexión de los sudetes o la de Austria, sino que directamente nos encontramos con la campaña de la Unión Soviética. Pero nuestros 5 protagonistas, parece que simplemente obvian lo que su gobierno ha realizado hasta el momento, convirtiéndose en simples “Ingenuos” que pasaban por allá. Y esto no es sólo algo aplicable a nuestros protagonistas, sino también a la mayoría de protagonistas del bando alemán. Las teorías raciales, que la mayoría de población acabó aceptando, convirtiendo a la raza aria en la principal y dejando a grupos como los eslavos en “Subhumanos” son totalmente ignoradas por el filme (a excepción de los grandes cargos del ejército y las SS). Incluso, el filme nos presenta a las poblaciones eslavas como las verdaderas responsables de los genocidios en la parte oeste, en varios momentos del filme: Los ucranianos que persiguen a judíos, los polacos como racistas ultra nacionalistas (con más odio a los judíos que los personajes alemanes) y los rusos como salvajes. La política de la película es en realidad la de sólo aceptar la responsabilidad judía, dejando las otras en suspensión.

Hay también algunos Tics de lo políticamente correcto que incluso se filtran en la forma y manera de hacer de la miniserie. Chirría continuamente que nuestros protagonistas parezcan salvarse de la muerte en los momentos más difíciles. Cuando sucede una vez no hay ningún problema, pero cuando esto se vuelve reiterativo acaba siendo realmente vergonzante. Da igual lo que hagan nuestros protagonistas, porque conseguirán siempre escaparse una y otra vez de la muerte.

Donde es un acierto Hijos del III Reich es en su apartado estético y visual. La película recrea con acierto el ambiente bélico de la 2nda guerra mundial y dejará extasiados a los amantes de estos fetichismos particulares. Aunque también es cierto que en los conflictos bélicos se le ven las costuras a la película, utilizando una puesta en escena nerviosa y abusando en demasiadas ocasiones de la cámara en mano, que fingiendo nerviosismo acaba por desesperar al espectador.

En definitiva, la obra es un proyecto fallido que a pesar del revuelo provocado se queda sin conseguir un empaque aceptable. Y todo se debe a la corrección política y a las pocas ganas de tomar decisiones comprometidas, que lastran a la serie.

https://neokunst.wordpress.com/2016/01/26/hijos-del-tercer-reich-2013/
Kyrios
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9 de noviembre de 2013
12 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo primero y más importante es decir a despistados/as, que esto no es un documental. Poner pegas a vestuario, armas (ambos en sentido cronológico) o detalles militares (como poner dos hermanos en el mismo pelotón) me parece absurdo. Ni los nazis van con faldas escocesas ni los rusos con espadas láser.

Dicho esto tenemos una serie que nos sitúa en el otro lado. En el lado alemán. Donde a mi forma de ver, es más un retrato de la época que una obra bélica.
Tiene el argumento que tiene cualquier obra de la segunda guerra mundial, pero centrado en la versión alemana. Todo esto lo cuentan en tres capítulos de hora y media con un gran sentido del ritmo y una fotografía/efectos especiales/recreación de muy alto nivel.

Las actuaciones son más que correctas tanto en los personajes principales como secundarios y pese a tener momentos algo cogidos con pinzas, se mantiene en un relato coherente.

Lo más sorprendente siendo un tema tan visto:

-El tema de los judíos se toca pero de refilón.
-La evolución de los personajes, pese a que son los hermanos el centro de la historia.
-Los polacos antisemitas.
-No se pide perdón. Ni todo alemán era nazi, ni todo nazi era alemán. En según que detalles se entiende la actual mentalidad alemana. Repito: alemana, no nazi.

En conjunto una buena tele serie con una calidad altísima que resulta entretenida y merece la pena ver y disfrutar.
FOR8NER
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27 de septiembre de 2013
43 de 78 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nunca había hecho una crítica hasta hoy aquí en Filmaffinity. Pero me he visto forzado al ver las buenas críticas a esta serie. Quería, al menos, que hubiese un contrapunto para que alguien que, como yo, decida ver esta serie pensando que es incontestablemente buena a tenor de todas las críticas.

Al igual que nosotros con la guerra civil española, los alemanes tienen problemas a la hora de narrar su propia historia reciente. No voy a entrar en detalles históricos o ejemplos farragosos, baste decir que históricamente está muy mal documentada a nivel de historia de la vida privada, pensamientos, conductas y razonamientos del pueblo alemán. Es inexplicablemente maniquea, presentando estereotipos típicos del cine americano. Si un alemán la viese en 1945 pensaría que es un universo parelelo.

Es MUY mala. Eso sí, el que busque entretenimiento o ver una historia sobre la guerra mundial sin tener en cuenta documentación histórica, a quien le hayan gustado historias como "el niño del pijama a rayas" u obras de entretenimiento donde la gente viste de época pero no se comportan como lo hacían las gentes de entonces... pasarás un buen rato.

La serie no tiene más. Tampoco lo intenta. Le ha dado un 3 en lugar de un uno porque se han esforzado mucho en hacer un buen producto para todos los públicos y hay cosas buenas. Eso sí, ensombrecidas por un planteamiento de base de telefilme.

No la veas si te gusta la historia. Si quieres pasar un rato entretenido con gente vestida de época, no está mal la cosa.

Un poco harto de lo mal que describe el cine e incluso los libros la segunda guerra. Una pena porque es un tema fascinante.
javi navarro
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