El mago de Oz

Sin lugar a dudas se trata de uno de los musicales míticos que todo el mundo ha visto alguna vez, o al menos debe hacerlo. Ya que se trata de una joya del cine que se mantiene con paso firme a lo largo de los años, mientras avanza por ese mágico camino de baldosas amarillas hacia la mítica ciudad Esmeralda donde se encuentra el famoso mago de Oz.
He visto varias veces esta película desde que era un niño, y hoy en día me sigue gustando después de tantos años y tantos visionados. Es increíble la magia que derrocha su historia y la calidad de la misma.
Sin lugar a dudas Victor Fleming tuvo su año ese 1939 cuando dirigió dos joyas del cine. Por un lado la primera película en color que se ha considerado una de las 10 mejores de la historia del cine, y que se encuentra entre mis favoritas. Es "Lo que el viento se llevó".
Pero en esta ocasión, se centra en el género musical y nos regala un efecto óptico que se realiza por primera vez en el mundo del cine. Y es el cambio en un mismo film del blanco y negro al color. Y es que muy inteligentemente sitúa la acción en Kansas bajo el formato tradicional del blanco y negro, y cuando toda la trama se ubica en el fantástico mundo de Oz, todo toma color porque como dice la mítica canción; esta ciudad se encuentra en algún lugar más allá del arco iris.
Tierna y fascinante, la película engancha desde el minuto uno hasta el final. Aunque tengo que decir que siempre hay una cosa que me chirría y que nunca me ha gustado. Y es esa parte en la que aparecen todos esos enanos, los cuales me resultan un poco chirriantes.
Pero salvo por este detalle, el resto es fantástico. Judy Garland se hizo un hueco de honor en el mundo del cine dando vida a la entrañable Dorothy que siempre cuida del tierno Toto. Un personaje que dio vida cuando tenía 17 años, y que hizo que todo el mundo se emocionara con su interpretación y con su increíble canción "Somewhere over the rainbow".
En fin, "El mago de Oz" es sin lugar a dudas una entrañable película que soporta muy bien el paso de los años, y que hace disfrutar a grandes y pequeños. Un film con una calidad en efectos especiales impresionante para la época que fue realizada, y un proceso de maquillaje muy bueno también. Es una experiencia gratificante siempre el verla, y que pueda ser uno un viajante más en ese camino junto a Dorothy, Toto, el Espantapájaros, el Hombre de Hojalata y el León cobarde; hacia esa mítica ciudad Esmeralda para conseguir sus deseos y, sobre todo poder descubrir quienes son realmente y que quieren llegar a ser en la vida.

Aunque en algunas cosas la película ha sufrido el lógico deterioro del paso del tiempo, "El mago de Oz" sigue siendo hoy un espectáculo deslumbrante, disfrutable a día de hoy para el público de cualquier edad. La banda sonora y las canciones han pasado a la Historia, pero lo que de verdad me atrapa es la fiesta de colores que me deja hipnotizado ante la pantalla. Visualmente, la película es una gozada, y en su momento tuvo que ser toda una revolución. Un clásico imperecedero, de sorprendente modernidad a pesar del candor de Judy Garland. Aunque pudiera parecer chocante, no es extraño que este film tenga el mismo director que "Lo que el viento se llevó", la gran apuesta cinematográfica de la época. Todo un clásico.

La vi por primera vez el 19 de julio de 2014. Seguramente antes la habría visto pero no la recordaba. 1 de 1 usuario encontró útil mi primera crítica, que comentaba que era algo decepcionante. Quizás promovida por el caché que tiene la película, me la imaginaba de otra forma. También la vi en 3D, intuyo que con la fiebre de la moda del 3D trabajaron en esta película para convertirla, ya que en su día no existía. Y no me gustó, porque ya de por sí, el 3D no me gusta. La vi como algo plana y poca aventura, pensaba que habría más fantasía (el camino de los ladrillos amarillos se me hizo muy corto). También vi el final como algo propagandístico, en el sentido de gente joven que marcha de casa muy pronto para buscarse la vida o aventuras o lo que sea, y ese final tan de "no hay ningún sitio mejor que en casa", pues me resultó como una imagen de propagando. Visto hoy, también me lo pareció. Lo que más me gustó fue la canción "Somewhere Over The Rainbow, decorados y maquillaje.

Vista de nuevo, le mantengo los 7 puntos, pero tengo que valorarla mejor. En primer lugar, viendo mucho cine desde sus inicios, valoro muchísimo el trabajo que hay detrás. El guión tuvo muchísimas modificaciones, querían en un primer lugar hacer una película infantil (después del éxito de Blancanieves, quisieron seguir con esa brecha). Pero tenían muchas dudas de ese guión, y creo que pasaron como 11 personas por ese guión, aunque sólo se acreditaron 2. Y durante el rodaje hubo cambios.

También la problemática del Technicolor, que aunque ya había otras películas que habían sido rodadas en color, esta era especialmente difícil. Entiendo yo porque querer transmitir colores muy vivos. Esto demuestra la secuencia larga cuando Dorothy aterriza en Oz. Se nota muchísimo los cuadros de fondo, que no son reales, y se ve claramente donde acaba el escenario y empieza el cuadro. El HD ha hecho mucho daño jajajajja.

Sigo pensando que lo mejor es la canción por la cual ganó un Oscar. Una canción que sigue muy viva, y gracias a Israel Kamakawiwoʻole que la versionó hace años, y que mucha gente piensa que la canción es original de él... en vez de esta película.

Realmente 1939 fue una gran cosecha en el cine, hay muchísimas películas muy buenas que luchaban en los Oscar y "Lo que el viento se llevó" pues fue la que acaparó todo, es raro, siendo un año muy bueno en cine. Victor Fleming también estuvo nominado por esta película, pero ganó por la otra película.

También cuenta con el accidente de Margaret Hamilton, que tuvo quemaduras graves al haber un accidente con los fuegos de cuando desparecía como bruja. La pintura en la caras de varios actores también fue un problema ya que no era bueno para la salud.

Todo esto, para luego ser fracaso en taquilla. Más bien, fue porque fue la producción más cara hasta la fecha y eso costó mucho recuperar la inversión. Hasta su reestreno en 1949 no recuperó toda la inversión. Con los años se convirtió en una película de culto y eso que quería ser una película infantil. También hubo problemas con eso, ya que el público quizás aún no estaba preparada para ver una película de estas características, ya que no se hacían películas así.

Dicho todo esto, la admiro mucho por lo que es y representa (también por lo que representa y representó a la gente homosexual). Pero aún así, es una película que no me entusiasma del todo. Me gusta, pero no tanto para catalogarla como obra maestra.

Agarrado como estoy a un programa que tiene José Luis Garcia en la cadena televisiva TRECE, en el que se analizan películas clásicas (su nombre lo dice todo: CLASSICS), se emite la cinta y posteriormente se abre nuevo debate, ya sabéis el método de toda la vida para hacer eso que los de mi generación llamaban Cine-Club y que aquí pusieron de moda y en lugar muy alto en cuanto a calidad programas como LA CLAVE o QUÉ GRANDE ES EL CINE, del propio Garci.

La fórmula funciona, en tanto en cuanto se seleccionen bien películas y personal que las comenta. Y eso lo hace fenomenal Garci. No se lo pierdan, yo me enteré de casualidad, llevan ya 8 ó 10 programas y han emitido cintas clásicas, algunas desconocidas para mí como LA ESCLAVA LIBRE.

En fin, veo esta magnífica muestra del Technicolor, de la alegría y la fantasía, que es EL MAGO DE OZ, donde una Judy Garland algo crecidita para ser una niña de 10-11 años, encarna magníficamente a Dorita, la protagonisa de una película asombrosa si la vemos y analizamos pensando que se rodó en 1939, dentro de nada hará un siglo.

La banda sonora y las coreografías son buenísimas, en especial la canción que Judy Garland interpreta de manera magistral, mítica ya en la historia del cine y de la música, quizás el tema más maravilloso de todos los tiempos, y no exagero: Over the Rainbow.

Los efectos especiales, las caracterizaciones de los actores son magníficas, siempre mirando a la época de la que vienen, y el guión también está perfectamente adaptado de la obra literaria original.

Interpretaciones sobre la película, el camino amarillo, lo que hay más allá del arco iris o los leones miedosos las habrá a cientos, ocurre lo mismo que con ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS, tanto la obra literaria como las diferentes películas que la versionaron, es lo que tienen las obras maestras. Y para tener un cierto fundamente sobre sus significados, anécdotas de la película y divagaciones varias, nada mejor que Garci y su tropa para ponernos al día.

Una película muy disfrutable, para adultos y para niños, mítica e inolvidable.

El Mago de Oz es como esa tía simpática que siempre trae el mejor pastel a la fiesta. Desde el primer vistazo, te deslumbra con sus colores vibrantes y te atrapa con su historia mágica. Dorothy y su tornado particular nos llevan a un mundo más allá del arco iris, literalmente. Con sus compinches, el espantapájaros con dilemas cerebrales, el hombre de hojalata oxidado, y el león con valentía en apuros, hacen equipo para encontrar al mago más misterioso.

La banda sonora es pegajosa como chicle en verano, con canciones como "Over the Rainbow" que te hacen tararear por días. Judy Garland es el corazón latente de la película, y el resto del reparto brilla como estrellas en un cielo de Oz.

Este clásico traspasa generaciones, como ese chisme familiar que nunca pasa de moda. Habla de amistad, valor y, por supuesto, zapatos rojos que son pura envidia. Te recuerda que los sueños están al alcance si tienes fe, esperanza y quizás un par de zapatos mágicos. ¿No te hace sentir como un niño otra vez? Pues sí, y eso nos hace muy, muy felices.