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Fanny "Pelopaja"

Intriga A Fanny siempre le han ofrecido la violencia como la única posibilidad de supervivencia. "El Gallego", ex policía, fue expulsado del cuerpo por sus métodos irregulares y, concretamente, por llevar a cabo una cruel agresión contra Fanny. Ahora, ambos se buscan para matarse pero, en realidad, un sentimiento muy distinto al odio les acompaña. Cuando se encuentren, no sabrán cómo reaccionar. (FILMAFFINITY)
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Críticas 16
Críticas ordenadas por utilidad
18 de septiembre de 2013
18 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
No, no me refiero a la novela de George Orwell, sino a esta notable película, que retrata como pocas aquel año, en concreto la Barcelona de aquella época...

Aunque contiene esas escenas y temáticas tan presentes en el cine de Aranda (en una especie de mezcla de transgresión y provocación), el paso del tiempo provoca que el impacto de dichas imágenes “escandalice” menos que en la época de su estreno: los diálogos subidos de tono, alguna insinuación homosexual o (por no revelar cosas del argumento) la crudeza de las palizas que se arrean algunos personajes ya resultan, para bien o para mal (yo creo que para mal), habituales en teleseries y películas de esta segunda década del siglo XXI, y de ahí su menor repercusión.

La protagonista lo hace francamente bien (y por cierto, ¡oh, qué cosas! está muy bien doblada), el poli también da el pego como ser totalmente pasado de rosca, y el desaprovechado en el mundillo del cine español Paco Algora realiza un papel muy ajustado. Permítasenos aquí una mención al actor Ian Sera, protagonista de una insólita carrera, que oscila desde intérprete principal de películas infantiles (“Misterio en la isla de los monstruos” de JPSimon —Juan Piquer Simón, ya se sabe—) a quinqui (esta película), para luego desaparecer en combate.

El mérito de Aranda a la hora de retratar la Barcelona marginal no se debe solo a sacar la cámara a la calle, y reflejar lo que acontece: la secuencia de “El Molino” con sus canciones pasadísimas y un espectáculo más bien tirando a rancio (pero muy valorado en la época); la ambientación de las habitaciones de hoteluchos de mala muerte y la descripción de qué ocurría en las comisarías son otros aspectos contenidos en un guión rebosante de brío en que se nota la mano de don Vicente, quien, no siendo ya un jovencito, demostraba su oficio.

En fin, que alguno de los nuevos realizadores que empieza ahora podría aprender de “Fanny pelopaja”. Nos iría mejor a los sufridos espectadores...
esteve
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11 de enero de 2009
21 de 26 usuarios han encontrado esta crítica útil
Excelente película de venganzas, protagonizada por una desgarradora y sensual Fanny Cottençon, en el papel de una violenta delincuente que al salir de la cárcel va tras el corrupto policía que mato a su novio, el cual ha sido despedido del cuerpo por sus turbios manejos. Ambientada en la Barcelona de los 80, aparte de ser un buen thriller, es una historia de amor loco, en la que se nos muestra, una relación con acusados tintes sado masoquistas. Buena película rodada con nervio y oficio, por el Vicente Aranda de El Lute y Amantes.
tiznao
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12 de febrero de 2016
11 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Película atrevida para la época, perteneciente a la primera etapa de Vicente Aranda, un thriller extraño, descarnado y brutal, la historia de una venganza personal, de una cruel relación destructiva y sádica entre un policía corrupto y despiadado, Andrés Gallego y Fanny Pelopaja, delincuente de fuerte carácter, inteligente y calculadora, una autentica mujer fatal, encarnados por dos actores franceses poco conocidos aquí, que produce una verosímil atracción repulsiva, inspirada muy libremente en la novela “Prótesis” de Andreu Martín, que sirve de apoyatura para llevar el relato hacia territorios placenteros al cineasta según su universo personal.

Narrada en un gran "flash-back" por una socióloga encarnada por Paca Gabaldón, actriz desaprovechada por el cine español, que trata a Fanny. La película va describiendo a los personajes en toda su dimensión, potenciando esa oscura relación entre Gallego y Fanny, en detrimento de la tópica convencionalidad de un relato de policías y ladrones. Pero todo el film es atípico, desde el asalto al furgón blindado hasta la elusiva, elíptica violencia pasando, ¡cómo no!, por las relaciones entre los dos principales protagonistas: relaciones crispadas y morbosas, donde existe el ingrediente de la pasión que no está ausente. Pasión y brutalidad, pues el sexo también es violencia.

Gallego necesita a Fanny, la ama y la desprecia a la vez, es un tipo violento que nada lo ata y menos su desdichada vida familiar. No le importa el dinero, su obsesión malsana es Fanny y por tanto asume su destino, algo usual en la eterna lucha de sexos que se plantea y dilucida siempre en su obra. Aranda retrata estupendamente el paisaje urbano de una Barcelona sexualmente liberada, como la cita de Fanny y su amigo Julian (Paco Algora), uno de los pocos amigos en el que confía, en "El Molino" famosa sala de revista en la Ciudad Condal. Pero no es determinante, es sólo el telón de fondo que enmarca las situaciones y los personajes. La ciudad sólo es un simple escenario.

Este policíaco no es cine negro estrictamente, sino que utiliza unas determinadas formas narrativas y arquetipos codificados como tales para plantear una relación tormentosa, turbia e imposible. Aranda lima las aristas e invierte los componentes tópicos del género. Sus frutos están ahí, en esa denodada lucha contra la convención que se observa en su rechazo a la búsqueda de culpables, en su rechazo de todo moralismo, en su diferenciación entre crimen y criminales, en exponer más violentamente sentimientos que las acciones, algo que no siempre se consigue en el thriller. El cineasta no condena a nadie, ni siquiera a Gallego, ese ser brutal y sanguinario, Aranda describe, narra, indica, pero no reparte bendiciones y culpas, todos deben acarrear con sus actos, se saben perdedores. Un thriller con gran nervio narrativo, original y nada desdeñable.
Antonio Morales
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19 de octubre de 2012
10 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tratándose de una co-producción entre España y Francia, Vicente Aranda gestó una de sus mejores películas por no ser tan conocida al lado de films posteriores como “El Lute: Camina o Revienta” (1987), “El Lute II: Mañana seré Libre” (1988), “Si te dicen que Caí” (1989), “Amantes” (1991) o “Juana la Loca” (2001). Pero en esos años de post-transición y con el cine “quinqui” como referente policíaco, Aranda contó con la presencia femenina de Fanny Cottençon que le otorga su nombre al personaje. La actriz toma su propio nombre para interpretar a una despampanante rubia que después de participar en un atraco y esconderse del policía Andrés Gallego (Bruno Cremer), que la odia y desea a la vez, regresa a Barcelona para reencontrarse con su novio Manuel “El Gato” (Ian Sera), apresado por las drogas y con la ayuda de Julián (Francisco Algora) que a su vez le da oportunidad a Fanny para participar en el asalto a un furgón blindado, en que está empleado Gallego, después de ser expulsado de la policía por sus brutales métodos.

Después de adaptar a otro autor de novelas policíacos como Manuel Vázquez Montalbán con “Asesinato en el Comité Central” (1981), Vicente Aranda contó con la colaboración del autor catalán y especialista también en el género, Andreu Martín, para adaptar su novela “Prótesis” añadiéndole un alto voltaje erótico en la pareja rival (los franceses Cottençon y Cremer) perdidos en esa Barcelona sucia y canalla que había albergado a los Perros Callejeros de José Antonio de la Loma y todavía estaba muy lejos de la ciudad que tenía que ser, en perspectivas de su futura candidatura a los Juegos Olímpicos.
Natxo Borràs
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30 de junio de 2016
7 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Descarnado thriller de tintes eróticos, sobre una delincuente habitual (Fanny Cottençon) y un policía corrupto (Bruno Cremer) unidos/enfrentados por una relación de amor/odio que no dejará lugar para ambos.

Vicente Aranda rueda una historia de venganza a dos bandas, cuya acción se desarrolla en los bajos fondos de Barcelona, a través de unos personajes brutales en busca de redención. Una simbólica mezcla de pistolas y sexo ocupa algunas de las escenas más morbosas. Libre adaptación de la novela 'Prótesis', de Andreu Martín, y coproducción entre España y Francia.



"¡Si me llamas otra vez eso te corto los huevos!"
CINECLUB
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