Trampa mortal

A la actriz Katia Loritz siempre se la recuerda nada más que por "Las chicas de la Cruz Roja" y "El dia de los enamorados" sin contar con que tiene otras películas que son menos conocidas y que también presentan un cierto interés y en las que cambiaba de registro. Una de ellas es "Trampa mortal" donde su personaje está trazado de una manera bastante convencional. Es una película de intriga en la que hay demasiadas explicaciones verbales como para que el desarrollo pueda seguirse con comodidad y en la que no se logra mantener el interés de la intriga ya que los elementos disponibles están manejados sin demasiado acierto y existe además una continua indecisión con respecto al tono a adoptar. Antonio Santillán era uno de los cineastas más representativos del cine policíaco barcelonés y su mayor virtud era sacar un cierto partido artístico de unos presupuestos modestos. Víctor Valverde y Marta Padován volvieron a ser la pareja protagonista de otra película de Santillán que estaba mejor narrada que esta y que fue "Senda torcida". No obstante "Trampa mortal" cae simpática aunque tenga el defecto fundamental de no provocar demasiada emoción como podia esperarse de ella. Las creaciones de Ismael Merlo y Enrique A. Diosdado ayudan mucho a imprimir un cierto carácter al film. Los actores en general y una estética grata para los seguidores de determinado cine español hacen que el film pueda salvarse sobradamente. Sólo se necesita un poco de paciencia para encontrarle sabor.

Por momentos parece Sed de mal y eso no es una gran noticia ya que Sed de mal hasta que no demuestro lo contrario tiene excelente principio y excelente final. Parece Sed de mal en la trama para matar al nota de turno. Luego con variopintos personajes nos hacen creer que nadie es el asesino. Resulta gratificante que el dinero no aparezca y al asesino no se sepa hasta altas horas de la noche. Lo que podría haber sido una buena por los buenos momentos iniciales se queda en interesante ya que buena no sería lo más interesante.

Una película policiaca, otra, de Antonio Santillán, cuando ya estaba pasando el boom del thriller en España.
Esta vez está animada desde el principio, porque hay muertos. Pero pasa algo extraño: Ismael Merlo, que hace de inspector y, con Víctor Valverde es el principal protagonista (no Mario Cabré, como aparece aquí, que además lo hace fatal) está a veces como de coña. Da la impresión de que no se toman la película en serio.
Hay una trama algo inverosímil, pero la película (corta, unos 75’) avanza más o menos fluidamente. Hay algunos giros de guión que contribuyen a eso. Para más claridad en el espectador hay una escena que se repite en un flashback. Todo muy mascado.
Hay buenos actores (Merlo, Diosdado, Valverde), pero esta vez no recitan bien. No convencen. Y, como se ha observado ya aquí, hay más palabras que acción.
A pesar de mi admiración por Santillán, no puedo darle más de un cinco.
Quienes no conozcan el cine de Santillán que vean El ojo de cristal.

Pasable película española de género policíaco, con buenos intérpretes pero un guión no demasiado bueno.
Además, la realización de Antonio Santillán es algo cansina, con algunos tiempos muertos, diálogos que pretenden unir comedia e intriga y resultan monótonos, amén de un tempo cinematográfico que deja que desear.
La verdad es que es mediocre y olvidable pese a los buenos intérpretes (muchos de ellos doblados para la ocasión).

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