El fútbol o yo

La fui a ver porque soy hincha de Argentinos Jrs., y en la película, Suar es hincha de Argentinos. Me pareció motivo suficiente para ver algunas escenas de mi estadio en la pantalla grande y reírme un poco, pero casi que ni para eso sirvió "El fútbol o yo"...

La película es básica desde el minuto 0. Y tiene algunos errores conceptuales también desde ese momento, porque el protagonista, Pedro (Adrián Suar), aparece en escena mirando un partido de Boca, de ahí se va para la cancha de Argentinos, y llega con el partido empezado. Esto da la pauta de que quienes hicieron la película conocen poco y nada de la "cultura del aguante" de los hinchas argentinos: nadie llegaría tarde a ver a su equipo por ver un partido de otro. Es más: es raro que un hincha fanático de uno vaya a la cancha de otro así como así, y más el día que ya tiene un partido, así como nunca usaría la camiseta de otro club (en un pasaje extenso de la película Suar luce una camiseta de Ferro).

En un burdo paralelo, mientras Pedro está en la cancha, el personaje de Julieta Díaz (ya olvidé su nombre de tan insulso que es) va al cine con su abuela, que cae fulminada en la sala. Lo llama entonces a su marido y éste no atiende, porque está en la cancha. Y así con todo: en el velorio él intenta ver San Lorenzo-Huracán; en la casa (un departamento lujoso que no se condice con el tipo de personalidad que muestra este tal Pedro) se quedan sin luz y se cuelga de un balcón para ver el partido con el vecino, lo echan del trabajo por ver fútbol ahí también... En fin, una serie de pretendidos gags humorísticos que pueden largar alguna mínima sonrisa lleva a la pareja a esa charla fundamental, que Julieta Díaz remata sin ninguna gracia: "Pedro, decidite: es el fútbol o yo".

Nada sorprende en este film, excepto los errores, como que un fanático de Argentinos le haga rezar a su familia un salmo en honor al equipo antes de comer, y que éste diga "gracias por los 3 campeonatos" cuando cualquiera puede ver que la camiseta del equipo tiene 5 estrellas en el escudo o que se inventen todo el tiempo "finales", "semifinales" y otras instancias de campeonato, cuando cualquier futbolero sabe que se juegan campeonatos largos en Argentina, y que sólo hay eliminación en copas internacionales o en la poco relevante Copa Argentina.

La otra gran decepción es el desaprovechamiento de los personajes secundarios: Spregelburd no está mal, pero D'Elía y Menahem -dos grandes actores- no aportan absolutamente nada, con personajes que no son ni interesantes ni cómicos ni nada. Casero actúa una vez más de él mismo, y sólo hay lugar para una graciosa imitación de una mujer correntina hecha por una actriz que yo no conocía.

La película se puede ver como entretenimiento pasajero, pero es lamentable que haciendo un producto tan popular sobre una temática tan popular se pueda mear tanto fuera del tarro... Se nota que el guión no está hecho por futboleros que podrían describir mejor la pasión y la "adicción" que puede generar este deporte, como podrían ser Fontarrosa (el mejor), Saccheri o tantos otros.

Divertida. Todos aquellos que amamos esta pasión nos vamos a sentir un poquito identificados con la locura del protagonista. Un tipo que por amor a este deporte descuida el trabajo y la familia hasta que un hecho puntual le hace replantear su adicción. Te entretiene desde el comienzo y las actuaciones son muy buenas. Cumple su cometido. La recomiendo.

Todos sabemos que el fútbol es un gran enemigo del cine, los días de partidos importantes se reduce el número de espectadores a cotas bajísimas, pero es buena idea aplicar el fanatismo de este deporte y convertirlo en una comedia costumbrista, aunque en algunos  momentos las situaciones se vuelven algo más dramáticas. El guión es de Marcos Carnevale y Adrián Suar (Director y actor principal de la cinta) Carnevale es conocido en España por la simpática "corazón de Leon" y por el remake de la francesa "Intocable" titulada "Inseparables" que se estrenó el año pasado.
La pareja protagonista Adrián Suar (Me case con un boludo) y Julieta Díaz son un matrimonio que está pasando un mal momento debido al "fanatismo" de Pedro, un gran problema por el que decide que acudir a Alcohólicos anónimos (en esta reunión aparece el personaje de Alfredo Casero lo mas gracioso del film) ya que ha perdido su trabajo y su vida se está desmoronando. La historia es simplista y predecible con una narrativa básica de clichés típicos pero que no ha evitado romper la taquilla en Argentina, un país bien conocido por esta pasión de multitudes a este deporte.

La propuesta maneja situaciones comprometidas y algunas divertidas mostrándonos claramente los dos puntos de vista , también se ve como la relación de pareja se ve alterada, pero a mi gusto el personaje es muy superficial, no profundiza demasiado y no es demasiado crítico con sus actos. Pero supongo que el tono de comedia de la película así lo requería.


Destino Arrakis.com

Película trivial que sin embargo logra el cometido de entretener sin mas, usando como base el argumento de un fanático del fútbol que vive mirando partidos todo el día por tv lo que, por supuesto, lo hace desconectar del mundo, su familia, su trabajo y el resto de su vida. Hay situaciones graciosas con un Adrian Suar que ese papel lo sabe de memoria y lo ha compuesto con histrionismo cada vez que lo han llamado a realizarlo. El film gira alrededor de Suar y por supuesto nadie puede negar la capacidad que tiene para hacernos sonreír ante cualquier situación, aquí apoyado por una Julieta Diaz medida y por algunos secundarios que se destacan como Alfredo Casero y Rafael Spregelburg. Sin ser una gran comedia, sinceramente creo que no lo pretende, cumple con hacernos pasar un rato divertido sin pretender otra cosa.

El veterano director Marcos Carnevale nos presenta su nuevo trabajo, es uno de los más conocidos en Argentina, entre sus trabajos anteriores tiene grandes películas como “El espejo de los otros”, “Corazón de León” y “Anita” con Norma Aleandro como protagonista.

Coincidencias o no el mismo mes que empieza el mundial de fútbol, nos llega esta comedia argentina que bromea con la más desmedida afición al deporte rey. La historia que nos cuenta es muy simple, Pedro el protagonista es un adicto al fútbol, tanto que todos los días tiene que ver un montón de partidos. Esa pasión le trae graves consecuencias como el despido de su trabajo y la separación de su mujer.

En el país argentino el fútbol se vive de una manera muy particular, conecta desde la infancia, trasciende en la madurez y va con la persona toda la vida. Todo eso la película consigue transmitirlo de manera bastante eficaz.
La pareja protagonista transmite un feeling fundamental para el desarrollo de la historia, han trabajado muchas veces junto y eso se nota, los dos llevan toda la acción en sus espaldas, respaldado por un elenco de actores secundarios bien elegidos.

Es una película que aunque en todo momento está el fútbol como protagonista, también toca otros temas como son las parejas y los matrimonios que están en crisis. Y sobre todo las pasiones que cada personaje siente y desea. Para el protagonista el fútbol es como su amante.

En definitiva una agradable comedia argentina, para pasar un buen rato en el cine, es de ese tipo de películas que te ríes y lo pasas bien, pero que se olvidan muy rápido

Lo mejor: Los dos actores protagonistas
Lo peor: El guion podría estar algo más elaborado.