Haz click aquí para copiar la URL

Man in the Chair

Comedia. Drama Un problemático adolescente (Michael Angarano), que sueña con ser director de cine, participa en un concurso escolar cuyo ganador podrá estudiar en una escuela de cine de Los Ángeles. Flash, un pintoresco anciano (Christopher Plummer), único superviviente del equipo de rodaje de “Ciudadano Kane”, será su mentor y ayudará al joven a rodar una película. (FILMAFFINITY)
Críticas 5
Críticas ordenadas por utilidad
2 de abril de 2009
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Durante la proyección de Sed de Mal, en un cine ocupado tan solo por un adolescente, un viejo harapiento (Christopher Plummer) y una pareja, ante los exabruptos del viejo dirigidos a la pantalla y al ser mandado callar, este grita “- He rodado más películas que las que vosotros habéis visto en vuestra vida”, llamando inmediatamente la atención del chaval, que resulta ser un inadaptado y cuasi delincuente, cinéfilo empedernido, que vive con su madre y su pareja, un tipo con el que continuamente discute.
Atraído por las palabras que escucho al anciano, el chaval que tiene pensado rodar un documental de 10 min. como trabajo escolar, le busca y al encontrarle y hablar con él, se entera, no solo de que estuvo como electricista en la filmación de Ciudadano Kane, sino de que existe toda una pléyade de ancianos técnicos (ni directores, ni actores) cuyos nombres formaban parte de míticas producciones, abandonados en olvidadas residencias, cual cementerio de elefantes (en el mejor de los casos) y que le son presentados a través de este (al principio a cambio de Cohíbas y bourbon y luego por sentirse vivo).
Sensibilizado por las penosas condiciones de vida de los otrora reputados técnicos y con ayuda del anciano del cine, los convence para que le ayuden a rodar un corto sobre las miserables condiciones de vida padecidas por estos olvidados de la mano de Dios.
A partir de aquí tenemos una buena y muy emotiva película, que a poco que ames el cine, te subyuga y te emociona, empatizando ipso facto con el chaval y experimentando en tus carnes las sensaciones que el cinéfilo muchacho siente al escuchar a los sabios y reputados cineastas y la ilusión de estos al sentirse útiles y queridos, a la que se la pueden perdonar las reiterativas aceleraciones de imagen y cambio de cromatismo (supongo que quería expresar la agresividad y frustración de los personajes) y la, a veces errática dirección, ya que la historia es realmente absorbente y conmovedora.
Christopher Plummer como el anciano electricista y M. Emmet Walsh, como el cuasi senil desahuciado y otrora mítico guionista que desempolva la máquina de escribir, están geniales, acompañando más que dignamente la función Robert Wagner como el acaudalado y reputado productor, el chaval y el resto de veteranos actores.
Recomendable.
tiznao
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
18 de julio de 2009
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más allá de las críticas al Director, algunas indefiniciones de la trama o el guión, es una sorprendete denuncia sobre la actitud de la sociedad hacia los viejos.
En Estados Unidos y en todo el mundo los que dejan de ser productivos son dejados olvidados en los geriátricos o instituciones mentales, reservorios donde sobreviven como perros, por puro instinto.
Pocas veces ví una denuncia tan clara y certera sobre que pasa, no solo con actores y técnicos retirados de la industria del cine, sino con muchísimos ancianos, que al mejor estilo del Macondo de Gabriel García Márquez juntan moho olvidados en un rincón.
DRFFEDERICO
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de abril de 2009
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Man in the chair nos muestra la sociedad americana desde ángulos muy diversos, que aunque ya son conocidos por todos, no llegan ha convertirse en un tópico en este film que explora de manera refrescante, dulce y honesta los intentos de un joven problemático de convertirse en director de cine con la ayuda de aquellos que hicieron posible la edad dorada de Hollywood.
luci
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de junio de 2012
Sé el primero en valorar esta crítica
Con un prodigioso Christopher Plummer, en el papel de un viejo borrachín y amargado, asistimos a un relato que nos da una dulce mirada a la elaboración de un filme. Aunque no me gusta referirme a aquello que me hubiera gustado ver en las películas, sobre todo porque cada una hace su propio camino, en esta lo que terminé desacreditando es que el paso de elaboración de la película que se proponen hacer los protagonistas se hubiera quedado solo en lo emotivo. Unos aplausos, unas sonrisas, unas lágrimas por poder un grupo de ancianos hacer lo que siempre hicieron desde que conocieron el cine. Pero no hay muestra alguna de la proyección profesional de sus campos y quehaceres. En fin.
Lo que interesa, entonces, es encontrarnos con un bello ejercicio en el que un joven busca ser director de cine de la mano de quienes le llevan años de experiencia, un equipo de trabajo de ancianos: ¡hasta un director de sonido sordo! El aprendizaje está garantizado, pese a orgullos y caprichos, de unos y de otros, no solo de los viejos.
Valetamayo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de febrero de 2010
1 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como podéis observar, mi grado de excitación es bastante elevado tras contemplar como un solo hombre puede hacer girar el mundo sin ayuda de nadie.

Man in the Chair se reivindica como una película hermosa y emotiva, sobretodo, por el apoteósico recital de Cristóbal Plumas, mas allá de denuncias sociales, de referencias cinematográficas, de imágenes en blanco y negro, sencillamente, Plumas.

Plumas me ha metido en su bolsillo a los 3 minutos de metraje, el tipo, acompañado exclusivamente de un sombrero, brama en un cine mientras proyectan Sed de mal, y lanza uno de los texas tornado verbales mas aplastantes que recuerdo.



-" Charlton Heston haciendo de mexicano, dios santo es es el colmo,actuando con los pantalones eras un queso, Charlton! "

O la incontestable:

-" Las mujeres se me pegan como moscas, menos mal que existe viagra ".

Estamos sin lugar a dudas ante una de las interpretaciones mas explosivas que he visto jamás, y que obviamente ha terminado por volatilizar mi gorra.

Plumas, ¿Cuando acaba tu vuelo?

Se despide pisando uvas

El vendimiador con pedruscos como testículos.
Killer_Wolf
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow