Scanners 4: Scanner Cop

Cuarta parte de la saga "Scanners", una saga continuada por el productor de la primera, que no por David Cronemberg, su creador. Más que una cuarta parte, corresponde a un spin-off que tendrá una segunda entrega con el mismo protagonista.

De lenguaje televisivo, aunque con cierta imaginación en planos y secuencias, y apoyada en unos buenos efectos especiales de maquillaje y animatrónicos, la película relata, como si fuese un comic de superhéroes, el enfrentamiento entre un policía-scanner y un supervillano, un magnífico y siempre inquietante Richard Lynch, que ejerce de "Mad Doctor", apoyado en una secuaz tipo Harley Quinn de boca inusitadamente descomunal. Poco más hay que destacar en cuanto a secundarios, simples muletillas del protagonista.

Cuando veo al protagonista empleando sus poderes, no puedo evitar pensar en que debería tomar un buen laxante, puesto que su rostro esforzado recuerda más a un estreñido severo que a un telépata disfuncional.

La historia, aunque sencilla y previsible, es eficaz, por lo que no se hace aburrida. Y por supuesto tiene esa escena que hizo tan popular la primera entrega: estalla alguna cabeza.

En conjunto, es un honesto film de serie B, destinado al video-club, sin demasiadas expectativas pero aceptable en su resultado.

Una vuelta de tuerca a la saga que quedó bastante, bastante bien.
En este caso el protagonista es un scanner policía, que usará sus poderes para resolver un caso que tiene de cabeza a todo el departamento.

Tiene unos efectos especiales al más puro estilo ochentero que hará las delicias de los amantes de la saga original, están realmente currados y con menos gore de lo que deberían, pero muy decentes.

La peli mantiene un ambiente de serie b que no se va en ningún momento (lo cual tampoco es malo, a mí me parece necesario en cierto tipo de pelis) y el protagonista no es el mejor actor del mundo, pero en general lo he pasado bien viéndola.