Todo incluido

El tándem comedia y Vince Vaughn da como resultado pingües beneficios en taquilla, incluso cuando el producto final es tan flojo como Todo incluido. La película nos presenta a cuatro parejas en apariencia muy distintas, Dave (Vince Vaughn) y Ronnie (Malin Akerman) son el matrimonio modelo, Jason (Jason Bateman) y Cynthia (Kristen Bell) están a un paso de la separación, Joey (Jon Favreau) y Lucy (Kristin Davis) no tienen vida marital desde hace años y Shane (Faizon Love) y Trudy (Kali Hawk) llevan saliendo tan poco tiempo que apenas se conocen. Los segundos convencerán al resto para pasar juntos las vacaciones (lo que sale más barato) en una isla tropical, lo que desconocen es que tendrán que acudir obligatoriamente a terapia de pareja si quieren disfrutar de su estancia allí.

La historia es tan simple como cualquier otra comedia romántica, pero en esta ocasión los personajes no son especialmente simpáticos y sí terriblemente planos. Para colmo, el guión además de no saber sacar partido del reparto tampoco consigue gags destacables, y la película se pierde por situaciones de lo más tontas. Tan sólo se salvan algunas situaciones cómicas (por ejemplo la clase de yoga o el masaje de Joey), a pesar de que no sean nada especial. Además sólo me preguntaba una y otra vez el por qué ellas son guapas y con buena figura mientras que ellos (por norma general) son feuchos u obesos… y ni siquiera especialmente divertidos.

Las interpretaciones en general no son gran cosa, a pesar de contar con intérpretes tan reconocidos por el público como Vaughn, Bateman, Bell o Davis, el primero gracias a sus otras taquilleras comedias, el resto por sus conocidos trabajos televisivos. Los actores parecen más entusiasmados por el lugar en el que están rodando que por dar vida a sus personajes, y eso se nota en el acabado final, aunque también en la poca entidad de los mismos, lo que provoca que identificarse con ellos sea tarea harto complicada. Eso sí, los paisajes son bellísimos, lástima que los espectadores no podamos disfrutarlos como hacen ellos, al menos eso sumaría puntos a esta insustancial película.

Este producto, concebido como vehículo de lucimiento de sus guionistas y productores, es tan ficticio como las situaciones que relata, llegando a ser muchísimo menos de lo que sobre el papel podría haber sido.

Es casualidad que los guionistas / productores son Vaughn y Favreau, que al escribir la historia se quedaron solamente con la parte más ñoña de las relaciones de pareja. El caso es que se quedan a medio camino entre la comedia y la acidez, y al final se quedan en nada.

Podrían haber decidido exprimir las relaciones hasta el punto de la crítica o podrían haber utilizado a algún secundario (el profesor de yoga apenas hace gracia) para hacernos reír, lástima que no lo hayan hecho.

Finalmente son autocomplacientes con la historia, y dejan a los espectadores esperando que no haya una segunda parte en la nieve o algo así.

Dos horas de mi vida tiradas por el retrete falso en el que caga y mea el nene al principio y al final de la película.

Realmente penosa. Hacía muchísimo tiempo que no veía algo tan sumamente desastroso, mi vida habría sido algo más feliz, si no hubiera visto esta película. No entiendo como Kristen Bell acepto hacer algo tan sumamente cutre, malo y aburrido.

En fin, un cúmulo de aburridos y soporíferos despropósitos, destinado a ser visto en la papelera de reciclaje de vuestro PC.

Otra típica película americana supuestamente romántica y con humor. En ella se recurren a todos los clichés y situaciones ya vistas infinidad de veces: los maridos son unos brutos, las mujeres son guapas y delgadas, los negros haciendo papeles de negros... las interpretaciones correctas, sin nada que resaltar.

El humor no aparece por ningún lado, y por momentos estuve al borde del enfado. A lo largo de la historia se descubren infidelidades y actitudes machistas, pero al final ambas cosas se aceptan sin problemas para que el final sea el esperado. Por la contra, algunas escenas son tiernas y positivas.

Lo mejor de la película, el entorno paradisíaco. Lo peor, los tiburones recreados digitalmente. En resumen, una película totalmente prescindible.

Tengo que reconocer que los primeros 20 minutos me encantaron. Esa visión particular de 4 parejas de amigos, que planean un viaje paradisíaco para solucionar el problema de uno de ellos, me atrapó. Mucho más cuando llegan a la isla. Ese colorido del agua, esas vistas, la naturaleza, los bungalows... era el paraíso. Hasta aquí. Todo lo demás es evitable para la salud.

Es más, si no llegan a rodar la película en esta isla, mi nota sería un 1. Las vivencias que nos encontraremos en ese lugar de paz y diversión, son ridículas. De vez en cuando solté alguna risita de nada, pero no más. Personajes absurdos, rallando lo gay ( a ver cuando se cansan de explotar la tendencia sexual como arma para la comedia ). Un Jean Reno, el cual entiendo que ya no lo llaman ni por teléfono y el pobre está dispuesto hasta vender helados en el polo norte. Vince Vaughn es de lo poco que se salva y en particular por ese pique genial al Guitarr Heroe.

Lo dicho, película floja acerca de los problemas de pareja y como resolverlos. A mi se me ocurre una forma mejor, más barata y menos aburrida.