Zatch Bell (Serie de TV)

La nostalgia es algo maravilloso.

Al principio de la cuarentena navegando por Twitter recordé la existencia de esta serie. Recordé como, todos los días después del colegio, creo recordar, en la 2 de TVE, daban una serie de un chico rubio que lanzaba hechizos por la boca y tenía un compañero con un libro rojo que le permitía usar esos conjuros. Y la propia nostalgia me forzó a volver a ver este anime con el riesgo de ver como uno de mis gratos recuerdos de la infancia se echaba a perder.

Y afortunadamente no se echó a perder, y eso a pesar de las dificultades para obtener dichos capítulos en español, y el hecho de que el anime no finalizó debido a un percance del dibujante del manga.

Zatch Bell es una historia sencilla, con una estética infantil - juvenil pero que tiene un trasfondo bastante interesante. 100 niños demonio (del mundo mamodo) son enviados a la tierra para luchar entre ellos, en colaboración con sus compañeros humanos, hasta que solo quede uno, que será el rey del mundo mamodo.
En el recorrido de Zatch y Kiyomaro se encontrarán con otros mamodos e irán evolucionando y enfrentándose a otros enemigos en la lucha, dándose momentos de comedia, humor surrealista y absurdo, momentos épicos y también, no exento de momentos tristes, con carga sentimental.

En definitiva, a pesar de que soy consciente de que un 7 puede ser demasiado elevado, el poder de la nostalgia me ha podido, sobre todo teniendo en cuenta de que el anime no está completo. Es por ello que recomiendo encarecidamente acabar la útlima temporada en el manga ( se me hizo necesario, a pesar de que no había leído nunca manga, me negaba a dejar la historia en el punto en que acaba en el anime)

Junto a Naruto y Bobobo, uno de mis animes favoritos.

Zatch Bell goza de ser el típico anime que promueve valores como el heroísmo, el compañerismo y la amistad. Con una animación simple pero efectiva y un argumento medianamente original. Ante todo el concepto de luchar con libros de hechizos mola. Recuerdo que emitieron este anime en Jetix durante mi infancia, que recuerdos. UN 7.