Luna de miel mortal (TV)

Una peli muy diferente al prototipo de telefilms que nos suele llegar de antena 3, diferente en cuanto argumento porque, eso si, el film se asemeja en calidad a cualquier subproducto de escasas neuronas provenientes de sobremesa.
Una pareja se casa y lo que parecía un tranquilo crucero se convierte en una pesadilla para la protagonista ( y para el pobre espectador) puesto que el marido de ella no aparece por ninguna parte. A partir de aquí la especie de trama se convierte en una enrevesadilla historieta cuyo máximo nivel es alcanzado desde el lado de la intriga, ya que esta en diversos compases alcanza un nivel aceptable pero finalmente acaba haciendo aguas (como el crucero), puesto que termina enredándose de forma innecesaria y además el aspecto a telefilm cutre se palpa desde un comienzo.
Cabe mencionarse como aspecto más meritorio de la cinta el hecho de que se narren ciertos acontecimientos en el devenir de la historia desde puntos de vista personales ( como escenas en que los protagonistas se imaginan y siente la historia en su propia piel) y hace que la historia vaya hacia caminos que no nos imaginamos. Sin embargo el desenlace se podría considerar desde mi opinión tan nefasto, fallido y decepcionante qu aun que por su vueltas de turca en alguna ocasión es de agradecer hace mucho peso terminando el producto en ser uno más desechable y olvidable en su cómputo.
Desde el lado de las actuaciones, estas son malas por lo general con una leve sonrisa innecesaria en la protagonista principal poco acorde con el argumento de la historia. Ni siquiera la policia en general hace buenas actuaciones.
Y un último punto a comentar es el hecho de que aparezcan personajes que no guardan ninguna relación en la historia y otros que no pegan ni con cola para llegar a poder afimar que si, que se trata de otra basura televisiva.

Una vez más nos encontramos a Summer Glau (las crónicas de Sarah Connor o los 4400) haciendo un personaje un tanto spicópata. Típico film flojo hecho para la parrilla televisiva. Entretiene lo justito y del desenlace mejor ni hablar.