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El romance de Charlot

Comedia. Romance Charlot es un timador de ciudad que induce a Tillie a robar los ahorros de su padre y huya con él. Una vez ha llegado a la ciudad, Charlot se apropia del dinero y vuelve junto a Mabel, su primer amor y pareja del delito. Esta considerado como el primer largometraje del genero de comedia de la historia. (FILMAFFINITY)
Críticas 5
Críticas ordenadas por utilidad
9 de febrero de 2010
19 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
Película basada en la obra de teatro Tillie’s Nightmare que intepreta tanto en la version teatral como en la cinematografica Marie Dressel. Cabe destacar que es el primer largometraje que realiza Charles Chaplin.

En este largometraje de aproximadamente 85 minutos, vemos a un Charles Chaplin grosero, arrogante, violento, pueril e incluso maltratador. Estas caracterísiticas expuestas en esta comedia son transformadas en algo divertido y entretenido. Sinceramente uno disfruta viendo como le tiran un ladrillazo o como se resbala o recibe un empujón. Dudo que Chaplin quiera ver a alguien serio cuando le suceden esas cosas.

La historia empieza con Chaplin paseando por el campo y a raíz de una peculiar circunstancia conoce a Tillie (Marie Dressel). Charlot se hospeda en la casa de Tillie donde conoce al padre de ella y ve como se guarda un gran fajo de billetes. Charlot, al ver que puede adueñarse de dicho botín, convence a Tillie de escapar a la ciudad para librarse de los maltratos de su padre donde podran encontrar un futuro mejor. En la ciudad, Charlot se encontrará con su otro romance, una chica con la que quiere apoderarse del botín de Tillie sin saber que otras sorpresas les esperan una vez lo intenten conseguir.

Como curiosidad, mencionar que el rasgo del bigote de Chaplin no es el mismo que en otras películas ya que tiene un aspecto diferente. También hacer mención de que es la primera película rodada por los Estudios Kystone.

Un film interesante y agradable de ver donde Chaplin nos deleita con su torpeza de siempre y su peculiarforma de afrontar las situaciones que tanto gustan. Simplemente un genio que merece ser recordado tanto por sus grandes, medianas y pequeñas actuaciones.
SCuenca
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22 de septiembre de 2009
12 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
De los primerísimos films del genio en el que Charlot entra en escena, esta vez como un timador que se casa con una rica heredera por conveniencia. A partid de aquí, el personaje creado por Chaplin sufre una evolución concreta, pasa de ser un vividor y ladrón a ser por lo que siempre será recordado, un vagabundo.

Después de actuar en esta película, Charlie se tuvo que dar cuenta de que él debía coger la manija en la dirección y como resultado nos brindó más adelante muchas obras maestras incuestionables.

La cinta que nos ocupa se caracteriza por un humor simple pero efectivo, patadas en el culo, caídas, tortas, etc, posee una relización técnica aceptable y cuenta en el reparto con el genio, que da un baño de interpretación a todo el que se le acerca en las escenas. Allí está él, ante todo un elenco de actores que sobreactúan, sobre todo Marie Dressler. Entiendo que su papel no se base en encantar al espectador pero llega a resultar verdaderamente repugnante.

Sobre todo se trata de una buena oportunidad de palpar el cambio de registro que sufre Charlot de este mismo momento en adelante y resulta una interesante opción de visionado ya que, obviamente, ver trabajar a uno de los más grandes del séptimo arte siempre es gratificante.
h e r m a n ô n e g r ö
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27 de febrero de 2010
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película es considerada como el primer largo de comedia, un género que hasta el momento se movía en historietas de breve duración. Está dirigida por Mack Sennett, productor mítico de cine mudo, que como muchos se desvaneció en el sonoro, y descubridor para el cine de Charles Chaplin.

Se trata, podemos decir del primer largometraje de Chaplin, que aparece con la base de Charlot, aunque un tanto pendenciero y cruel, en cualquier caso ya están los mimbres de su personaje, y muchos de sus gestos, persecuciones, caídas y golpetazos.

Junto a Chaplin, Maria Dressler, de presencia descomunal, uno de los pocos ejemplos de superviviencia en el sonoro ya cuando era bastante mayor, y tras unos años de inactividad en el cine, otorgándosele el reconocimiento de los Oscars, y muriendo de forma inmediata. Y por otro lado Mabel Normand, una de las estrellas de la época, amante de Sennett, acaparadora de todo tipo de escándalos al ser la ultima en ver con vida al director William Desmond Taylor antes de ser asesinado (siendo investigada por esto, sin encontrarse relación alguna), ver como su chófer disparaba a un amante, y abusar de alcohol y drogas, todo esto, unido al caso Albuckle, no solo hizo que su carrera atravesara grandes altibajos, sino que sus excesos provocaron su muerte prematura a los 34 años.

Por cierto, respecto a la película, se deja ver, aunque sin entusiasmar, la historia tiene ritmo, pero el tiempo no ha pasado bien por ella, los gags hoy no provocan risa, y hay que verla más con una mirada de arqueólogo que de espectador, en cualquier caso es una obra referencial en la historia del cine, y un exponente a respetar de los primeros tiempos del séptimo arte.
zymu
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12 de marzo de 2011
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pese a que el título en español y el cartel llevan a engaño, El romance de Charlot ni es una película protagonizada por el entrañable vagabundo ni es un film de Chaplin propiamente dicho.
Tillie's Punctured Romance (prefiero el título original) fue concebida como la gran obra del famoso Mack Sennett. El astuto productor de comedias, en plena cresta de la ola, pensó que sería buena idea probar a rodar un largometraje cómico con todas las estrellas de la Keystone, es decir, Chaplin, Mabel Normand, Mack Swain, Chester Conklin, etc. Y por si eso fuera poco, para asegurarse el éxito contrató a la estrella de Broadway Marie Dressler devolviéndole de paso el favor que le debía (Dressler había enchufado muchos años atrás a un jovencísimo e inexperto Sennett en el mundo del espectáculo).

Chaplin por tanto, poco tuvo que ver con el resultado final, puesto que su papel aquí se limita a interpretar al cazafortunas que seduce a la Dressler para robarle su dinero. Sería la última vez que protagonizara un film no dirigido por él.

La película en sí vista hoy en día no parece gran cosa. Los gags no son demasiado ingeniosos, las actuaciones parecen algo excesivas (salvo Chaplin y Mabel que se nota cómo intentan imponer su estilo de interpretación en este caos de personajes alocados) y la dirección puede antojarse algo pobre. Pero hay que ser comprensivo, se trata de 1914 y lo que hoy puede parecer una exhibición de slapstick más bien pobre, en su momento era un film hilarante y lleno de ritmo.

El problema es también que el tipo de humor que practicaba Sennett funcionaba mucho mejor en cortos que en largometrajes (se dice que éste es el primer largo cómico de la historia, que no es poco). De hecho, ni siquiera el mismo Chaplin hacía películas largas por entonces, y eso que ya en aquella época hacía films mejor dirigidos que los de Sennett.

No pretendo tampoco excusar a Sennett, puesto que tiene cortometrajes mucho más interesantes que esta película, pero sí que creo que si uno se enfrenta a este film debe hacerlo siendo consciente de lo que va a ver: un experimento para tantear si funcionaba la comedia en largometrajes. Le salió rentable y luego otros como el propio Chaplin siguieron ese camino, pero desde luego es innegable que en este caso el alumno superó con creces al maestro.
Monsieur Hulot
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30 de diciembre de 2017
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Año que empieza la primera guerra mundial, y Charlott se estrena en el cine (lo comento, porque curiosamente una de sus películas más famosas es cuando se caracteriza a Hitler en la segunda guerra mundial).

Esta no es su primera película, en 1914 hizo como una treintena de películas y esta es una de sus primeras películas. Bueno, es el primer largometraje que protagoniza y también el primero hecho en los Estados Unidos.

Se podría decir (y creo que no me equivoco) que Charlott fue el primer personaje cómico del cine. Luego vinieron otros tantos también muy buenos, pero él fue el primero.

Y tengo que confesar que esta película, pues no pasa ni pena ni gloria. Apenas mantiene fresco el humor y las técnicas tampoco son novedosas. Eso sí, si es la primera que ves de él, pues te das cuenta la energía, eso sí que se ve. Cambios constantes de secuencias para dar alegría a la narración.

Aunque en esta película tiene el mismo bigote que en otras anteriores, el personaje que protagoniza Chaplin varía totalmente. Es grosero, arrogante, violento y deshonesto. Hay abundancia de golpes, caídas y corridas, así como una película A Thief's Fate cuya trama se corresponde con el despojo que hicieron Charlot y su novia, y que se ve dentro de la película. La acción languideciente y la dispersión de la trama son un recordatorio de que en esta película Chaplin se limitó a la actuación sin intervenir en la dirección.


Recalcar la gran actuación de una (para mí) desconocida hasta ahora: Marie Dressler, por el cual, desde ya, tiene mi admiración.
edugrn
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