The Acid House

La película consta de tres historias escritas por Irvin Welsh, de las cuales la primera es un despropósito total que esta llevada por un pésimo actor y es una muy mala manera de comenzar una película, por eso el sabor inicial de "Viaje Ácido" es un poco decepcionante, pero las otras dos historias son superiores claramente. Sobre todo la historia del auténtico Viaje Ácido llevado por uno de los actores de trainspotting y de una manera bestialmente estética.
La película carece del presupuesto de otras como: Spun, Trainspotting... por lo cual el resultado final es únicamente una propuesta interesante para los amantes del cine anfetamínico y demencial, mezclado con elementos kitch, macoquismo y una banda sonora muy buena.

Efectivamente va muy con el estilo de Trainspotting y definitivo de Irving Welsh, trasgresor de lo correcto, que pone en tela de juicio las buenas costumbres y enseña la tan basta hipocresía que nos rodea, no importando si son los padres de familia, la esposa, la novia, los amigos, el jefe y todos aquéllos a nuestro alrededor.

¿Qué resulta estúpida? Es cierto, pero a través de la estupidez los personajes encuentran el porque de su situación.

Al analizar “El viaje ácido” reiteras que hay imbéciles al por mayor, de diferentes tipos, como los insatisfechos por la vida que les ha tocado, así como los sometidos a esa putrefacta circunstancia y denegados a salir de ella para vivir sin ataduras, como viene. Pero no solo existen imbéciles así, hay tantos que cuestionas ¿Qué tan imbécil seré y en que categoría me ubicaré? Tal vez suene agresivo, pero son realidades de las que ni yo, ni nadie está exento.

Tremenda película. Tres historias increíbles con la única conexión entre ellas de que los protagonistas son unos fracasados, alcohólicos, hooligans, etc. Los bajos fondos de la Escocia más profunda mostrados desde el punto de vista del Realismo Sucio. Las locuras de un escritor a ritmo de brit-pop y música de los 90.
Una película parecida a Trainspotting, con los “mismos” personajes. Divertida, pero seguramente si no tiene una mente abierta te dejará la boca abierta.
Una película para disfrutar. Aunque en realidad, si no tuviese ese tono cómico sería bastante deprimente.

Me divierten mucho los relatos de Irvine Welsh y más cuando son traspasados al celuloide sin pelos en la lengua, "The Acid House" es tosca y desagradable pero te puede hacer pasar una hora y media de lo más divertida. El Film cuenta tres relatos ambientados en un barrio de Edimburgo y es por eso que recuerda tanto a Trainspotting... parece que en cualquier instante van a aparecer "Sick Boy" o "Rents" haciendo de las suyas.

La primera historia ofrece una delirante metamorfosis kafkiana cargada de surrealismo, mala leche e ironía. En la segunda podemos disfrutar de una relación dificil entre dos personas muy distintas "él" es un cobarde, que acata órdenes y ella una "fresca" esquizoide y dominanta de cuidado. La tercera y última, interpretada por el siempre genial Ewen Bremner trata sobre un viaje de LSD demasiado largo, en fin, una delicia.Quien quiera volver a disfrutar del Edimburgo barriobajero de Trainspotting, olvidarse de la crisis y deleitarse con una banda sonora genial, ésta es su película.

La película no engaña, utiliza tres historias de la novela Acid House y las plasma en la pantalla.

La primera, jugando con la metamorfosis de Kafka. Es interesante, aunque debido a la duración apenas hay un progreso en la decadencia del protagonista (literalmente hay cuatro o cinco escenas para resaltar lo siguiente que va a fallar en su vida). La parte final de este tramo es bastante más graciosa. Eso sí, las actuaciones son bastante flojas en comparación con el resto.

La segunda, sobre la toxicidad del amor. Cuenta con un Kevin McKidd en estado de gracia y aunque uno no llega a conocer mucho a los personajes por la aceleración del segmento, es interesante. De nuevo el final es bueno.

La tercera, con Ewen Bremner, la más psicodélica con ese cambio entre un yonki y un bebé. Me parece entretenida y con bastante mala baba, aunque se me hizo algo larga.

En fin, pocos medios, historias de un gran escritor, cinismo y nihilismo a raudales, realismo sucio y actuaciones competentes dependiendo del segmento.

Para gente con ganas de reírse y a las que le gustase Trainspotting, le funcionará. Gente que espere un drama a lo Ken Loach, probablemente se vaya a casa con menos tiempo libre con el que vino.

Se deja ver, pero no hace falta repetir.