La cara del terror

A la hora de traducir muchas películas al español ocurren en algunas ocasiones engaños como el que se presenta con esta película. Si la hubieran dejado más literal a su título en inglés (The astronaut's wife) tal vez la expectativa no se hubiera visto tan empañada.
Es una película sosa, aunque con buenas interpretaciones; donde en todo momento uno puede pensar que algo extraño está pasando y que aún se puede aplicar un poco de sensatez a la realidad. Pero a medida que el filme avanza decae la intriga y sólo va quedando el rastro de un rato insípido con una película que no logra descomponernos ni mucho menos aterrarnos a los que nos gustan esta clase de títulos y, aún más, este par de actores.

Me resultó una película bien lograda desde el suspenso, con interesantes variantes que combinan mucho de ficción dado el tema alien , el cual se desarrolla de manera sobria y contundente.
El gran mérito de este interesante filme que tuvo una pésima crítica en su temporada de estreno, es que va generando una atmósfera oscura e intrigante a medida que se desarrollan las circunstancias. Si bien no es una obra cumbre desde la ficción, sí es una cinta que motiva desde el suspense mismo. Así, la película mantiene atento, logrando tener expectante al observador con una propuesta donde la paranoia y lo sobrenatural aparece lo justo y preciso para generar climas opresivos e inquietantes desde lo psicológico. Por momentos se parece bastante a "Rosemary´s baby", salvando las distancias por supuesto.
Desde las interpretaciones, puedo decir que me ha gustado lo de Charlize Theron, como la esposa del astronauta, que poco a poco ingresará en un estado de locura al ir descubriendo qué es lo que ocurre en su vida. Algunos registros dramáticos para destacar de esta actriz tan interesante como bella. Si bien Johnny Depp logra un personaje creíble, en realidad no lo veo tan deslumbrante como siempre. Creo que un papel de tipo malo no le cae muy bien, no obstante cumple. Y si bien Joe Morton aparece poco, logra un interesante secundario.
En fin, una película donde domina el suspenso pero con temática ficticia, no es muy pretenciosa y a mi criterio cumple con hacernos pasar un rato entretenidos con un desarrollo aplomado y sin caer en los desajustes de efectos especiales en que incurren la mayoría de películas sobre tópicos alienígenas.

No merece mucho la pena verla, a pesar de que le doy un 5, se lo doy por que el argumento central de la historia me parece bastante original y por que tiene una escena de unos 12 segundos memorable, (en la que se plantea el problema claramente).

Salvo por esas dos cosas, es un completo pastel al que se le podía haber sacado un jugo enorme, pero se quedo en pastel.

Creo que se ha cometido un sensible error con este filme. Se ha preparado al público para ver una película de terror… y si a esto asistes, decepción te llevas. Con razón llovieron palos y detracciones de todo tipo. Sí, el filme tiene algunas semejanzas con “La semilla del diablo” y de hecho, la presencia de Nick Cassavetes -hijo del protagonista del filme de Polanski-, en el rol de Alex, es un claro guiño que evidencia la fuente de la que se ha bebido. Hasta el cabello corto de la venerable Charlize Theron, nos remite al de la feucha Mia Farrow.

Ignoro por completo las pretenciones que haya tenido el debutante director Rand Ravich pero, es muy probable pensar, que buscaba servirse del éxito de aquel viejo filme de 1968, para hacer algo que diera dinero crispándole los nervios a los espectadores. Sin embargo, yo siento que resultó algo más interesante que esto.

Para mí, este filme es un efectivo estudio sobre la locura. Jillian Armacost, la esposa del astronauta, tiene antecedentes de depresión y neurosis, luego de la pérdida de sus padres cuando era niña. Sólo tiene dos amigas: su hermana Nan y Nathalie, la esposa del compañero de viajes de su esposo. Tras el suicidio de esta, al no soportar la penosa muerte de su esposo, Jill entra en una etapa paranoica cuando se hace preguntas sobre lo que pudo pasar en aquellos dos minutos en que, su esposo y Alex, salieron de la nave en que se hallaban y perdieron todo contacto con la NASA.

Ya hay aquí buenas razones para imaginar cosas y para que comience el proceso de pérdida de la confianza de Jill con respecto a Spencer su esposo. Y Ravich se las ingenia para ir creando un pausado, pero efectivo crescendo, apoyado en una cuidada fotografía, una precisa adecuación de escenarios y una impecable edición, que se compaginan muy efectivamente con los estados emocionales de la protagonista. El punto más alto lo pondrá luego el degradado investigador Sherman Reese, quien rebosa la taza y lleva a Jillian a tomar sus fatales determinaciones.

Paranoia, pesadillas, miedos, imágenes asociativas, se conjugan para crear un cuadro clínico de demencia, que se entremezcla con la idea de que se está gestando una réplica de un terrible demonio del espacio. Pero no hay ningún desdoblamiento real de Spencer, no tenemos certeza de que haya matado a alguien… ¿qué es entonces, realidad o pesadilla?, ¿Qué nos lleva a pensar en la figura monstruosa del espacio, lo que aquí vemos o lo que imaginamos con la “cultura” cinematográfica que padecemos? La Jill-Susan que vemos luego, nos da una buena idea de algunas cosas.

Este filme hay que trascenderlo de su superficie y quizás pueda hayarse más en él de lo que en apariencia refleja.

Título para Latinoamérica: “LA ESPOSA DEL ASTRONAUTA”

Partiendo de la base de que la traducción del titulo original "The Astronaut's wife" deriva en "La cara del terror", cosa que puede hacernos pensar que el film es la típica película de terror...nada más lejos de la realidad.

La película en ningún momento acaba de despegar, mantiene la intriga a lo largo de la película pero se acaba haciendo aburrida.
Tiene un buen reparto y una buena interpretación, por lo que la película se deja ver, pero el guión deja bastante que desear.