La señora Fletcher (Miniserie de TV)

Serie basada en una novela de Tom Perrota (creador de The Leftovers). Me ha gustado bastante. Una mujer cuarentona y divorciada se queda sola cuando su hijo se va a la universidad. Entonces comienza a replantearse algunos aspectos de su vida, con muchas dosis de humor, ironía. También un nuevo despertar sexual. La protagonista se sale, las escenas mirando porno son para troncharse. En general está muy bien y es muy rápida de ver. Recomendable.

La serie me pareció despareja. Luego del visionado de la primera temporada (no sé si habrá segunda) me queda en la memoria un registro de unos capítulos seductores, y otros más flojos y olvidables. Quizá uno de los motivos sea que tira varios temas (sobre la sexualidad y las relaciones interpersonales) pero no los trabaja en profundidad, sino que los deja al entero trabajo del espectador. La buena noticia es que entonces no define todo como le encanta hacer a Hollywood. La mala noticia es que si tienes ganas de ver una simple comedia antes de ir a dormir, esta no será.

Con respecto a las historias en paralelo sobre Mrs. Fletcher y su hijo, también se me antojan desparejas. Recién sobre el final de la temporada, la participación del hijo tiene valor dramático, mientras tanto parecía una historia de relleno.

Se basa en la novela corta del creador de la propia serie que tampoco era ni pretenciosa ni profunda, solo intentaba plantear por separado los desafíos de una madre de 45 años ante el síndrome del nido vacío por la marcha de su hijo veinteañero a la universidad y también lo que para este supone pasar de un entorno adolescente a otro en el que debe configurar de alguna manera su futuro, pero todo ello de manera superficial.

La actriz norteamericana Kathryn Hahn, de conocida trayectoria en teatro y TV, a la que vimos recientemente en «I Love Dick» realizando un excelente trabajo y que en esta ocasión se encuentra también especialmente inspirada, da vida a una mujer de 45 años que se ha pasado los últimos 15 dedicada a atender a su hijo y afrontar la dirección de una residencia de ancianos y que, ante la marcha de este a la universidad, ha de rellenar espacios sola, por llevar separada mucho tiempo y sin apenas vida social.

Pero se encuentra en buenas condiciones físicas y obviamente con deseos sexuales y afectivos que no duda en intentar satisfacer explorando opciones al tiempo que procura deshacerse del rol milf en el que sus amigas intentan incluirla y lo hace con cierto éxito, lo que no sucede con su hijo que se ve abocado a abandonar la universidad donde el primer semestre ha pasado de todo excepto del sexo.

En definitiva una serie solo para entretener que entretiene, pero también pone el foco en algunos aspectos de como preparamos y educamos a nuestros hijos, de la sobre protección y excesiva dedicación que les profesamos, al tiempo que descuidamos nuestro propio bienestar con consecuencias inciertas en ambos extremos.

Se arriesga, define bien sus personajes, aceptando las contradicciones en las que se hallan. Es entretenida porque se basa en la autenticidad. Cuando terminas de ver cada capítulo, sientes que eres distinto porque en el fondo te pareces a ellos, aunque no tengas nada en común.

Es sincera, con acertadas interpretaciones que se basan en un guion brillante y perfectamente elaborado. La trama no tiene agujeros y es algo de agradecer...

Las series son tan... insustanciales. Me he alegrado al darle una oportunidad. Si has llegado hasta aquí en mi comentario y buscas algo diferente, creo que agradecerás que te la recomiende.

Real, muy real, y muy divertida. A quien le parezca que la serie entra a veces en la fantasía les digo que, aunque no se crea, la ficción abunda menos de lo que puedan suponer. Kathryn Hahn convence en "Transparent", pero seduce, conquista y vence por k.o. como la Sra. Fletcher.