Furia ciega

Recuerdo haber visto este film en TV hace años, mucho antes de encontrarme con el "Zatoichi" de Kitano...

Y ahora lo he vuelto a ver.

Es cierto que el film peca de poco serio (es más una serie B con presupuesto A que otra cosa), pero resulta curioso ver que la esencia del personaje japonés sigue ahí: el ciego que vaga por el país a pie, los duelos a espada, la amistad del niño con el que viaja (muy a lo "Lone Wolf and Cub") y detalles parecidos.

Interesante cinta de acción protagonizada por Rutger Hauer y Terry O'Quinn (de ahí el significado del más que mediocre título que he escogido para la crítica, haciendo referencia a John Locke -Terry O'Quinn en "Perdidos"- y a Roy Batty -uno de los Nexus-6 de "Blade Runner" interpretado por Rutger Hauer-). Pero a lo que vamos, "Furia ciega" es una muy entretenida película que viene a ser una especie de adaptación americana de la historia de Zaoichi, el famosísimo samurái ciego de origen japonés sobre el que se hicieron tropecientas mil películas hace un par de décadas y, más recientemente, el gran Kitano realizó su particular y magistral versión.

La historia se centra en Nick Parker, un ex-combatiente de Vietnam que durante un enfrentamiento en plena guerra pierde la visión. Sin embargo, gracias a la acogida que una tribu de la zona le presta, Nick no sólo se adapta a su nueva condición, sino que es instruido en el exquisito arte de la lucha de espadas. Cuando han pasado varias décadas desde el final de la guerra, Nick decide regresar a EEUU y visitar a su amigo y compañero durante el guerra, Frank Devereaux. Sin embargo, pronto se verá envuelto en un turbio asunto cuando, en su presencia, un grupo de mafiosos intenten secuestrar al hijo de Frank. Desde ese momento se iniciará una carrera contrarreloj en la que Nick deberá proteger al pequeño hijo de Frank mientras intenta dar con el lugar en que tienen prisionero al padre.

Versión respetuosa de "Zatoichi challenged", ese samurái ciego japonés, personaje mítico de la filmografía asiática, que ha protagonizado más de treinta filmes. Sin embargo, su trasposición a los USA de los años 90 nos recuerda mucho más al supehéroe marveliano ciego por excelencia: "Daredevil" o "Dan Defensor", suponiendo el filme un afortunado cruce entre los filmes de samuráis y los de superhéroes americanos.

La película calca la historia y la mayoría de las situaciones y gags que tiene el film original. El guerrero ciego debe acompañar a un niño junto a su padre, un antiguo amigo, al ser testigo del asesinato de la madre del infante. Por el camino se creará un vínculo de confianza y amor entre ambos. Las bromas del niño con la piedra, así como el final son réplicas del filme original.

El filme resultante es entretenido por su sencillez y poca ambición. Las escenas de acción están bien resultas, aunque les falta la espectacularidad a la que ahora estamos acostumbrados. Dichas escenas son abundantes, con el empleo de las katanas, miembros amputados, matones estúpidos, explosiones y disparos, y un Rutger Hauer que nos obsequia con una colección de sus gestos y muecas inimitables y tan propios.

Filme ameno, sencillo, directo, sin margen al aburrimiento, que toma el concepto del guerrero samurái y lo adapta al del justiciero enmascarado tan propio de la sociedad estadounidense.

Está basada en la misma historia que "Zatoichi", pero adaptada a la américa de los 90. Película que se adelantó a su tiempo. De hecho, sólo con un poco más de introspección del personaje y unas escenas de lucha más cuidadas sería una película venerada hoy en día. Quizá no supo aprovechar sus cartas, pero es una película de lo más entretenida. Hauer está bastante bien en su papel de ciego samurai y se agradece su vis cómica. Acción, comedia y un final donde, si no me equivoco, quiso hacer un pequeño homenaje a "El chico" de Chaplin (aunque no tan evidente y sonrojante como el "Campeón" de Zaffirelli). La muerte del malo (el inolvidable cazarrecompensas de "Arizona Baby") tiene un final muy a lo Darth Maul. Con todas estas referencias es difícil no disfrutar con "Furia Ciega".

"Furia ciega" es un filme que sin duda sorprende de manera grata. Si quisiera definirlo de una manera sencilla y rápida, diría que es una cinta de acción con buenas pinceladas de humor, donde su mayor virtud reside en que se deja ver en todo momento, resultando de lo más entretenido. Su guión es sencillito pero no por eso detestable, Rutger Hauer es herido durante la guerra de Vietnam y queda ciego. Cuando se recupera, es instruido en el arte de la espada por un experimentado maestro, logrando que a pesar de su discapacidad visual, adquiera un sorprendente manejo de la espada. Al volver a América, descubre que un antiguo compañero del ejército ha sido secuestrado por una banda de delincuentes y acude en su ayuda para rescatarlo. Lo primero que quiero señalar es que hay que tener una cierta tolerancia con la credibilidad del filme, ya que es evidente, que se antoja poco creíble que una persona ciega maneje de manera milimétrica una katana de esa forma. En su favor quiero decir que la mayoría de las veces lo hace en situaciones donde sus contrincantes no se lo esperan y los coge desprevenidos, o en lugares de escasa visibilidad o estancias oscuras, donde tendría una cierta ventaja a su favor. Como digo, en ese sentido, las peleas no son algo totalmente surrealista propio de cintas como "Azumi", únicamente peca de excesivo en el enfrentamiento cara a cara con el otro samurai experto, aquí sí que pierde bastante credibilidad, pero si se es tolerante con este factor, disfrutarás bastante del filme. Por todo lo demás, la película aunque no sea gran cosa es entretenidísima, al ser cortita (no llega a 90 minutos), se te pasa el metraje volando y te deja muy buen sabor de boca. A mí personalmente, el personaje del samurai ciego que vagabundea por el país deshaciendo entuertos, me recordó un poco a David Carrandine en la serie "Kung fu".