Haz click aquí para copiar la URL

Borg McEnroe. La película

Drama Narra la historia de la rivalidad entre dos leyendas del tenis: el sueco Björn Borg (Sverrir Gudnason) y el norteamericano John McEnroe (Shia LaBeouf), un enfrentamiento legendario de la historia del deporte que tuvo su culminación en la final de Wimbledon de 1980, que enfrentó a ambos. (FILMAFFINITY)
1 2 3 4 5 6 9 >>
Críticas 43
Críticas ordenadas por utilidad
14 de mayo de 2018
48 de 57 usuarios han encontrado esta crítica útil
Aparentemente ambos, de cara al exterior, parecen ser totalmente opuestos, tanto en su forma de jugar como en su manera de comportarse en las pistas.

Sin embargo, a través de flashbacks veremos como los dos tienen más en común de lo que cabría esperar a primera vista. Lo que verdaderamente diferencia a ambos, es la manera en la que fueron formados como jugadores de tenis.

Borg en su época de juveniles fue muy conocido no solo por ser un gran jugador con una buena zurda, sino también por su problemático y fuerte carácter en la pistas, debido a su desbordante genio. Tuvo muchísimos problemas de niño debido a sus continuos arrebatos, motivo por el cual estuvo a punto de ser excluido del tenis.

En realidad, no es un jugador relajado y tranquilo, sino una bomba siempre a punto de estallar. Björn Borg de adolescente fue extremadamente impulsivo e incontrolable, sus emociones en el campo de juego se volvían alocadas y le causaban tantos problemas como a John McEnroe.

Sin embargo, su legendario entrenador Lennart Bergelin (Stellan Skarsgård) consiguió enseñarle a contener la tensión, la ira y la furia, a interiorizar sus emociones. De esta manera convierte a Borg en el tenista que conocemos: equilibrado, estoico, además de obsesivo, maniático e inaccesible. Los buenos consejos de su mentor hicieron que Borg pudiera canalizar toda esa ira hacia sus manos, dirigida con fuerza y precisión a cada golpeo de raqueta.

Por otro lado, también podemos ver cómo la federación sueca quiere beneficiarse de su talento y como ejerce la presión sobre él desde muy pequeño. Hay que recordar que Björn Borg tiene tan solo 24 años en la final de Wimbledon de 1980, y que jugó su primer partido como profesional a la edad de 15 años.

En cuanto a McEnroe, a simple vista puede parecer un memo, sin embargo, a través de flashbacks observamos que no lo tuvo nada fácil cuando era niño, porque sus padres tenían creadas unas aspiraciones demasiado altas para él, que le hicieron sentirse constantemente obligado a luchar por cumplir esas expectativas de sus progenitores. De alguna manera había encontrado una manera diferente de expresar sus frustraciones.

Borg, proveniente de una modesta familia sueca, tuvo que aprender a luchar desde el principio contra la idea de que el tenis no era un deporte para todas las clases sociales y, McEnroe sufría en un hogar donde sus padres siempre le cuestionaban.

En los arrebatos de ira es donde Borg McEnroe ve una de las muchas conexiones entre ambos deportistas. Sin embargo, mientras que Borg aprendió a usar su ira como fuente de energía para su tenis, McEnroe, por su parte, tiene que gritar de rabia en la cancha para fortalecerse. Por lo tanto, Borg entiende el comportamiento de McEnroe, y la película sugiere en cierta forma, que esta comprensión también justificó la amistad posterior de estos jugadores.

A pesar de que Borg McEnroe es el primer largometraje de ficción dirigido por Janus Metz ( anteriormente dirigió el documental “Armadillo” y se encargó de algunos episodios de la segunda temporada de “True Detective”), se le ve con mucha soltura y consigue un buen equilibrio entre los flashbacks y los emocionantes momentos deportivos. La dirección de Janus Metz es firme, competente y muy creativa.

La otra agradable sorpresa, es Sverrir Gudnason en el papel de Borg, casi desconocido en el mundillo del cine. Este actor de 39 años es conocido principalmente por su trabajo en el teatro y por su papel en la serie de “Wallander”. Pero con Borg, demuestra que es capaz de ponerse al frente de una gran película con un personaje complejo. Realiza una magnífica interpretación para meterse en la piel del icónico tenista sueco con una actuación matizada y en capas.

Shia LaBoeuf, también realiza una espléndida labor interpretativa en el papel del errático McEnroe, y consigue transmitir de forma natural, sin llegar nunca a la caricatura, esa enorme energía del tenista americano y sus alocados arrebatos. Además de saber representar con suma eficacia la vulnerabilidad e inestabilidad mental de su personaje.

La elección de los actores es impecable e imposible de mejorar. Sverrir Gudnason tiene un parecido asombroso con Borg y Shia LaBeouf está inmenso como ‘enfant terrible’ McEnroe. A pesar de que los dos actores son bastante más mayores que sus respectivos personajes, su magnífica actuación hace que no lo tomes a consideración. Es difícil saber cual de los dos está mejor. Gudnason está parcialmente limitado porque su personaje le obliga a realizar una actuación contenida y poner poca emoción. Sin embargo, logra transmitir maravillosamente como su Borg es un resorte demasiado apretado, a punto de explotar en cualquier momento.

La final de Wimbledon de 1980 en última instancia constituye el clímax de la película. El encuentro de casi cuatro horas, es resumido sutil e ingeniosamente por Janus Metz en una serie de puntos cruciales y decisivos, consiguiendo que cada segundo sea intenso, emotivo y fascinante, a pesar de que el ganador de la final ya es conocido por el espectador.

El objetivo de ambos jugadores es silenciar los miedos y las angustias existentes en el interior de sus cabezas y pagar el precio que exige el estatus de leyenda. Se trata de una guerra psicológica enardecedora, una lucha contra sus propios demonios.

El partido está bellamente retratado con ingeniosos y creativos ángulos de cámara. El director de fotografía Niels Thastum y Janus Metz logran capturar el drama y el suspense del juego con imágenes impactantes y precisas. Una y otra vez, la cámara está muy cerca de los jugadores y de cada uno de sus movimientos. Además, Metz hace un uso notable de las imágenes de archivo.

https://cinemagavia.es/borg-mcenroe-pelicula-critica/
Eduargil
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4 de octubre de 2017
22 de 26 usuarios han encontrado esta crítica útil
En 1980 el mundo del tenis había sido revolucionado por Björn Borg, quien a sus 24 años de edad había ganado el torneo de Wimbledon en cuatro ocasiones, manteniendo un altísimo nivel que lo posicionó como el número uno en el ranking mundial por varios años. Siempre inexpresivo, el sueco se mantenía estoico punto por punto, lo cual le valió el mote de “el hombre de hielo”. No obstante, su lugar en la cumbre del deporte blanco se veía amenazado por un nuevo talento cuyo estilo de juego e incontrolable temperamento lo habían llevado a ganar un gran número de títulos profesionales. Se trataba de John McEnroe, un estadounidense apenas tres años menor. Inevitablemente, el encuentro entre ambos titanes se dio en la final del torneo de Wimbledon en una batalla que años más tarde sería conocida como “el partido del siglo”.

El danés Janus Metz debuta como director en la pantalla grande con una película en la cual más que centrarse en la rivalidad de los personajes, se enfoca en presentar una especie de biopic de ambos. Haciendo mayor énfasis en la vida de Borg, diversos flashbacks mostrarán sendos caminos hacia el éxito, abarcando relaciones familiares, arduos entrenamientos y sucesos relevantes con los cuales se intentará explicar el origen de las manías del sueco y la impulsividad del estadounidense. Lo anterior mientras se desarrolla el mítico torneo de Wimbledon, en el cual deberán de superar a sus rivales para verse las caras en la gran final. Considerando lo anterior, las historias se muestran de forma desbalanceada, por lo que si bien uno podrá conocer los motivos que llevaron a Borg a convertirse en un auténtico témpano de hielo, solo se podrá adivinar como fue que McEnroe desarrolló su temperamento tan volátil.

Considerando lo anterior, la realidad es que la cinta no aporta nada nuevo en lo que se refiere a películas del género deportivo, puesto que no expone de forma distinta la naturaleza del juego ni la psicología de sus participantes (aunque pareciera que ese fue el intento del director). Sin embargo, el filme tiene el acierto de haber aprovechado el marco que le brinda el tener a uno de los partidos más emblemáticos del tenis como referencia principal, entregando una última parte muy emocionante al haber reproducido magníficamente el enfrentamiento entre ambos personajes.

La actuación más destacada de la cinta es sin duda la de Shia LaBeouf, quien retoma el buen camino y continúa con la línea trazada desde el año pasado con American Honey, volviendo a elegir correctamente interpretar un papel más que mandado a hacer para él. De esta forma, realiza una excelente caracterización de J.P. McEnroe, personaje con el cual sin duda tiene bastante en común por lo que a temperamento se refiere y que por lo tanto fue capaz de emular casi a la perfección. Su contraparte, el sueco Sverrir Gudnason, también resulta ser bastante convincente al encarnar el temple de acero característico de Björn Borg. Completa el reparto Stellan Skarsgård (Avengers, Good Will Hunting) quien como es costumbre cumple y realiza un buen trabajo, esta vez como Lennart Bergelin, el estricto entrenador de Borg.

Aunque imperfecta, se trata de una cinta obligada para aquellos apasionados del tenis, quienes sin duda quedarán fascinados al ver una excelente dramatización de uno de los juegos más emblemáticos de dicha disciplina, pudiendo observar en el camino a otros viejos conocidos como Jimmy Connors y Peter Fleming. No obstante, aún quienes desconocen los acontecimientos que lo inspiran quedarán satisfechos al ver un filme bien realizado y con buenas actuaciones que será capaz de engancharlos con una de las rivalidades más grandes en la historia del deporte. Si este último fuera el caso, la sugerencia es no indagar más acerca del resultado del partido y dejar que la misma película los sorprenda.

Calificación: TÚ DECIDES.
Más reseñas en https://wraparty.wordpress.com
Twitter @wraparty
Facebook @wraparty.movies
wraparty
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8 de octubre de 2017
13 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Francamente entretenido film que puede ser tanto biográfico como meramente deportivo, o mejor quizás un drama psicológico con elementos de intriga. O al menos así, con tensión dramática está narrada.
Sucede que Janus Metz, al que no conocía de antemano, logra una película muy amena que narra bien en tiempo real, bien en ricos flash-backs, momentos de la vida y obras de dos insignes deportistas bien diferentes entre sí... ¿o quizás no tanto...?
Algo irregular en cuanto a ritmo, momentos como los de la relación del Borg joven con su entrenador son muy estimables.
Bien interpretada, sobre todo por Stellan Skargârd como el entrenador de Björn Borg, y con buena banda sonora, el guión de Ronnie Sandahl logra que se siga con interés al otorgarles a ambos deportistas mérito tanto como hombres que logran con gran esfuerzo llegar a lo más alto, como deportistas con altibajos humanos que deben superar a veces en soledad y otros ayudados por quienes guían sus vidas y les quieren de verdad.
Una cinta de visión fácil que quizás guste más a los que tenemos cierta edad y recordamos bastante bien el mítico partido de tenis al que se hace referencia. Solo diré, para quien no sepa aún quién ganó de los dos, que recuerdo perfectamente que lo vi por televisión con mi cuadrilla y que todos queríamos que ganara uno en particular... y ganó el otro. Nos dio bastante rabia, la verdad, pero viendo la peli ahora no puedo más que recordarlo con cariño y muchísima admiración y otorgarles a los dos contendientes un aura de leyendas del tenis por lo que nos hicieron disfrutar durante años siendo para mi irrepetibles a pesar de los buenos tenistas que hay ahora.

https://filmsencajatonta.blogspot.com.es
Constancio
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7 de diciembre de 2017
11 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Todos, absolutamente todos en la vida, necesitamos un modelo al que seguir, a quien parecernos, a quien imitar, consciente o inconscientemente. Es una necesidad. Una vez lo hemos elegido nos damos cuenta que siempre, absolutamente siempre, existe un antagonista a nosotros que sin ser mejor o peor que nosotros, eligió otro modelo totalmente opuesto al nuestro. De eso trata esta historia: Caballero frente a Rebelde, Héroe frente a Villano, Bueno contra Malo, Dios contra el Demonio, Madrid o Barcelona, PP o PSOE... En 1980 colisionaron en el mundo del tenis las personalidades de estos dos jugadores. Cada uno con sus traumas, problemas, virtudes, defectos, manías...seres humanos, al fin y al cabo, iguales a nosotros. Totalmente opuestos el uno al otro a simple vista, pero no tan diferentes. Eso explica y retrata muy bien esta película. Tensión y proeza épicas.

No siendo demasiado de mi agrado, Shia LaBeouf realiza una interpretación soberbia del tenista John McEnroe.
HANNAH75
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7 de mayo de 2018
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Terminando de ver “Borg McEnroe” (2017) de Janus Metz Pedersen con Sverrir Gudnason, Shia LaBeouf, Stellan Skarsgard, Tuva Novotny, Marcus Mossberg, entre otros. Drama deportivo sueco, que gira en torno a las estrellas del tenis: Björn Borg & John McEnroe, mientras disputan El Campeonato de Wimbledon de 1980; pero centrándose más en la figura de Borg, muy probablemente por ser producción sueca; que en McEnroe. En el desarrollo conoceremos el trasfondo de sus personalidades absolutamente antagónicas, pero que comparten la misma pasión por el deporte. Técnicamente el filme no presenta nada del otro mundo, con las escenas más brillantes en los últimos 30 minutos del legendario partido, que me pareció excesivo; al tiempo que es demasiado evidente en montar las posiciones de favoritismo para Borg, un tenista muy contenido e inexpresivo; contra el desprecio hacia John, más extrovertido y salvaje. La puesta en escena, como los vestuarios, son muy adecuados y destacables; pero donde brilla es el reparto: Sverrir Gudnason, un actor poco conocido para mí, demostró comerse la pantalla en los primeros planos, y no solo por su belleza, sino por su silencio intrigante, que uno llega a pensar muchas veces, en qué estará pensando… mientras que Shia LaBeouf hace un gran papel, como el irrefrenable tenista de EEUU que no se guarda nada… entre ellos, no interesa el parecido físico sino más la parte de la psicología del personaje que está maravillosamente retratada, sin caer en los chistes bajos, dándoles profundidad, y manteniendo el interés del espectador. Por otro lado, Stellan Skarsgard nunca defrauda; y Tuva Novotny como el interés emocional y sentimental de Borg, sirve para lograr conocer al tenista fuera de la cancha. También es destacable los actores que hacen de Borg en edades de niño y adolescente: Leo Borg & Markus Mossberg. La película es interesante, porque es un acercamiento bastante respetuoso y reflexivo sobre la genialidad del deportista, la fama, la privacidad perdida, el amor, el compromiso, la pasión y el deporte entre “Ice-Borg vs Superbrat.
RECOMENDADA
PRONTO en Lecturas Cinematográficas.
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/
Alvaro Zamora Cubillo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 4 5 6 9 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow