El arte de la guerra 2: La traición

Una de las señales de que la carrera de un actor va en picado es que te cambian tu voz de doblaje de toda la vida por la de Karl Winslow (el rollizo policía amigo de Steve Urkel en “Cosas de Casa”). Otra posible señal, más evidente si cabe, es aparecer en joyitas como esta.

Por si alguien no lo recuerda, “El arte de la guerra” era una película con cierto presupuesto, protagonistas conocidos y algunas que otras pretensiones pero que en el fondo resultaba ser una castaña. “El arte de la guerra 2” es un truño (nivel de truño: tecno-truño) desde el principio que sólo podría estar protagonizado por un hortera (como Wesley Snipes), un tío venido a menos que ya no puede escoger papeles (como W.Snipes) o un tío con problemas con Hacienda que acepta cualquier cosa para hacer caja (como W.Snipes). Sí, en el fondo, se mire por donde se mire, es una película hecha a la medida de W.Snipes.

Hay menos peleas de lo normal, pero más amañadas que de costumbre (Wesley anda flojete de forma). Se nota que han querido evitar la típica película de mamporros para hacer una cosa más refinada que termine de aclarar posibles lagunas de la primera parte. De este modo, detalles de la infancia de Wesley tan absolutamente cruciales como que su instructor de artes marciales era un travesti o que se crió en una especie de Ciudad de los muchachos del tío Alberto, afloran en esta secuela. Vamos, que ya podemos dormir tranquilos.

Mucho ordenador, muchas tecnoarmas, muchas imágenes por satélite, mucho hacker de ciencia ficción, flashes, luces, cámaras para un lado y para otro, diálogos de rebajas… en resumidas cuentas, una desquiciante cutrez. Si será cutre que en una escena (al principio, la de “la danza”) Wesley tiene un notable y sospechoso abultamiento en la entrepierna (que coño, una erección) y no se han molestado en volver a rodar la escena o en eliminarla con técnicas digitales…

Duelen los ojos ver como el todavia aprovechable Snipes acaba con su carrera con tonterías como esta absurda secuela. Hace apenas cuatro años Wesley tenía un prestigio, títulos de éxito y todo para seguir en el candelero. Sin embargo no sé si por su agente en malas decisiones como esta está tirando su carrera por la borda. La cinta está a la altura de bodrios de Seagal o Van Damme, pero todavía peor dirigidos y con menos originalidad. Intentan continuar la historia que no sabemos el guión de qué va y solo asistimos a golpes y pelea tras pelea sin ningún sentido hasta un final con Busey penoso. Lástima por el pobre Wesley de esta no levanta cabeza.

El agente de Neil Shaw (Wisley Snipes), sale de su retiro y se encuentra en medio de un complot para asesinar a varios senadores estadounidenses relacionados con el comité que tiene que ver con la otorgación de contratos de compra de armamento para el ejército.

El film "The Art of War II: Betrayal" mejora la intriga de alto espionaje, es mas real que su predecesor “The Art of War” (2000). Lo mas destacado es como se ha desarrollado ampliamente las artes marciales, ya que implemento el arte marcial brasileño “Jiu Jutsu”.

Es un arte marcial muy usado en el “Ultimate Fight Champions” en donde precisamente vale todo, se mezclan diferentes artes marciales y el "Jiu Jutsu" es especial para esto al igual que el arte marcial ruso. Wisley Snipes estuvo excelente, lo mas destacable de la película son las escenas de pelea en donde siempre luce notable.

Wesley Snipes es un actor estadounidense, desde pequeño quiso ser actor. En el año 1986 comenzó su carrera cinematográfica con la película “Wildcats” (1986) con Goldie Hawn. Spike Lee fue quien lo lanzó al estrellato, al incluirlo en varias películas suyas. Spike Lee se fijó en él en un vídeo clip de Michael Jackson, “Bad”, dirigido por Martín Scorsese en el que salía Wesley.

En los años 90 se consagró como estrella del cine de acción con varias películas. Es experto en artes marciales. Fue el protagonista de la trilogía “Blade” (1998), “Blade II” (2002) y “Blade: Trinity” (2004).

En abril pasado un juez estadounidense lo sentenció a 36 meses de prisión, la pena máxima por evasión de impuestos. Se le acusó de haber ocultado cerca de 41 millones de dólares en ingresos a través de cuentas de banco en otros países, de los cuales unos 15 millones correspondían al fisco en pago de impuestos. Durante el proceso, el actor indicó que la falta de pago obedece a principios ideológicos.

En juez le concedió permiso (actualmente en libertad condicional), para viajar al Reino Unido y Tailandia, donde trabaja en dos películas. El permiso para viajar otorgado por el Tribunal indica que Snipes deberá cumplir con las condiciones actuales de su libertad condicional, que requiere su supervisión por las autoridades en California.

No está tan mal como la criticáis. Dura hora y media, vale, es increíble y tiene fallos de argumento que luego comentaré en spoiler, pero aun así la veo bien como una película de acción en especial no recomendada para mayores de 18 y entretenida si cabe.

Y no se salva de la quema. Mira que me mola este actor (sé que no es de los mejores pero me "cae bien" el tío) pero tiene una gran colección de películas flojas o de segunda, mucha acción y poca "chicha". Si la anterior se salvaba por los pelos esta ya no. Esta cinta es más floja que la anterior parte en todos los aspectos.