Terra Willy: Planeta desconocido

Absolutamente gozosa, esta aventura espacial y personal llena de imaginación y amor por naturaleza y los seres que la habitan. El músculo del cine francés y su industria es notable y en el apartado de la animación apuesta por destilar calidad artesanal ante las poderosas fábricas USA (no es menosprecio) a las que cada vez les cuesta más no repetirse. Tampoco es que el equipo de guionistas entre los que se encuentra el director curtido en la animación televisiva no acudan a clichés establecidos pero los manejan con sensibilidad y un punto de vista educativo tanto para chavales como para sus padres. El respeto por lo diferente, la amistad, el camino de aprendizaje a base de probar y equivocarse que siempre debe ser individual, la ausencia de violencia, su tono animalista, no depender exclusivamente de la tecnología son valores que merecen compartirse en familia al tiempo que te ríes y te emocionas en un planeta al que nada tendría que envidiar el nuestro si no fuera por nuestra especie.

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Terra Willy se ambienta en un futuro en el que los exploradores viajarán por el espacio, inspeccionando el cosmos y documentando sus descubrimientos. Éric Tosti contrapone dos realidades: por un lado, el porvenir supuestamente hipertecnológico de la especie humana; y por el otro, la aparición de nuevos mundos totalmente naturales.

Podría ser que sus referentes fueran películas como Regreso al futuro, Avatar o Star Wars. Pese a que el patinete volador no es todavía una realidad, parece que los creadores de este film no se rinden y por eso sí que existe en el presente de Willy. Descubrir Terra Willy es como explorar Pandora, el planeta de Avatar, con especies nuevas y sorprendentes, que Tosti nos muestra con mucho detalle. Quizá no son tan impresionantes, aunque son más divertidas. Y Buck, fiel compañero y protector de Willy, puede recordarnos a robots como C-3PO o Wall-e, un poco miedicas pero siempre dispuestos a ayudar.

El protagonista consigue contagiarnos sus emociones: su excitación por conocer el universo y sus ganas de jugar y disfrutar de la infancia. Esta producción llamará la atención de los niños por los colores, la música y las aventuras, que transmiten alegría y despiertan la imaginación. Sin embargo, también puede resultar divertida para los adultos que disfruten con la animación 3D. La figura paterna que desempeña Buck y su voluntad de sobreprotección dan pie a situaciones muy graciosas; así como los animales del planeta desconocido, cuyas características se presentan muy simpáticas.

Terra Willy resulta una cinta entretenida que, además, aporta valores educativos. Promueve que los niños se separen un poco de las pantallas y observen qué sucede a su alrededor; que quieran ser aventureros, que jueguen aprendiendo cómo es el mundo en el que viven. De forma implícita habla del respeto tanto a los animales como al medio ambiente. Willy ayuda a aquellos que están en peligro y procura su bienestar. No se menciona pero, quizá en este panorama, los humanos viajan por el espacio porque estamos destruyendo la Tierra. También se fomentan valores como la amistad, el respeto y la cooperación, sin los cuales, el protagonista no sería capaz de sobrevivir y cumplir su misión.

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*Un dulce western de animación

Terra Willy Planeta Desconocido demuestra que dentro del cine de animación caben otros géneros cinematográficos. Algunas veces los cineastas se apoyan en el cine de aventuras, otras en la ciencia-ficción y casi siempre en la comedia. Sin embargo, lo más llamativo de esta producción francesa es como integra los elementos del western en la trama.

La épica, los paisajes desérticos con los que se encuentra Willy al llegar al nuevo planeta y su recorrido hasta el dorado son elementos identificables. Disfrutarán niños y mayores.

Los lazos de amistad con los habitantes «marcianos» al calor de las hogueras nocturnas, y la propia narrativa del héroe solitario completan la fábula. Todo ello, nos lleva a identificar los valores del western pero adaptados a la narrativa infantil.

*Referencias cinematográficas

En Terra Willy Planeta Desconocido encontramos tres referencias al cine de actualidad. En la presentación de la película Eric Tosti sitúa la acción en una nave espacial como la de Passengers para hablarnos de soledad y de ciencia.

Después, y ya en el desarrollo de la historia, fija su mirada en El viaje de Arlo de Pixar. En esta parte los mensajes giran en torno a la amistad en medio de ambientes hostiles.

En la resolución, observaremos como todo fluye en torno a la posibilidad de vida extraterrestre y en los contactos que se pudieran establecer entre distintas especies. Esto ya ocurría en Luis y los alienígenas pero con una narrativa inversa.

*CGI con aromas vintage

De diseño sencillo, pero efectivo, el filme francés guarda un cierto aire retro-ochentero en los títulos de crédito e infografías utilizadas. En parte, la cinta es como un viaje en el tiempo a esos locales recreativos de los años 80. Los niños de aquella época descubríamos los primeros videojuegos en esas enormes máquinas del insert coint y del game over.

En la parte central de la película la productora aprovecha al máximo la tecnología CGI. Se crean inmensos monstruos de piedra en los paisajes desérticos o criaturas de diez patas cuando Willy descubre la inmensidad de un bosque multicolor.

Terra Willy Planeta Desconocido es una creación de Tac Productions. La productora y estudio CGI (imagen generada por ordenador) está especializada en largometrajes y programas de TV. Fue fundada por David Alaux, Eric Tosti y Jean-François Tosti en 2000 y emplea a 120 artistas.

*Los personajes

El mejor amigo de Willy en el nuevo planeta es Flash. Este «bicho» es una criatura extraterrestre que tiene entre sus peculiaridades la de convertirse en crisálida aproximadamente una vez al mes para evolucionar. Cuando se encuentra con Willy parece una larva enorme con ocho patas pequeñas y tiene un carácter muy cariñoso. Es una especie de perro locuelo que inmediatamente adopta al crío como su dueño.

Flash no habla, pero sus gruñidos y gestos son tan expresivos que le permiten hacerse entender fácilmente. A lo largo de los meses Flash se va haciendo más grande y se convierte en la mejor protección para Willy en una amistad intergaláctica.

El otro personaje importante es el robot Buck que está adiestrado para cuidar del niño en el caso de que por accidente pierda a sus padres. El robot es como un guardaespaldas con reacciones pragmáticas, deshumanizadas y que se toma todo al pie de la letra. Poco a poco, se deja influenciar por Willy y Flash. Ello le hace ser cada vez un poco más humano. Lleno de artilugios y dispositivos que le capacitan incluso para convertirse en una moto es por así decirlo el personaje más «masculino» de la filmación.

Por último, está la representación del dolor, del amor y de la preocupación que lógicamente pasan por los padres de Willy. El cineasta, con ellos, nos habla de la pérdida y del significado de la paternidad. Es la parte más emocional del filme.

*Conclusión

Terra Willy Planeta Desconocido es una apuesta meritoria de la animación europea que intenta competir a duras a penas con el imperio Disney-Pixar. La cinta está dirigida al target de edad comprendido entre los tres y los diez años, aunque la estética retro puede ayudar a que los adultos entren con fuerza en la trama. En definitiva, un buen filme para ver con los más pequeños de la casa con un eficiente diseño de producción.

Escrito por Miguel Pina

Cuántas horas habremos echado con las imitaciones chinas, niños. ¿A que sí? Pues ahora va ha suceder justo al revés, son ellos quienes podrán hablar de las 'imitaciones europeas'. Y es que "Terra Willy (Planeta desconocido)", producción francesa de animación dirigida por Éric Tosti, es la versión gala del archiconocido Pokemon —sí, ya se que es japonés— disfrazado para la ocasión de fábula sobre el desarrollo —particularmente me ha ganado más el del robot que el del crío— y sobre el respeto a la naturaleza. Pero vamos, que me ha sorprendido gratamente este Pokemon europeo.
El gran debe de "Terra Willy (Planeta desconocido)" es una notable falta de sentido del espectáculo. Y más siendo una kaiju movie tan bonita visualmente. Mira que no seré yo quien lance alabanzas al caos visual habitual de la animación mainstream yankee, ya que es algo de lo que en más de una ocasión me he quejado. Pero aquí lo he echado un poco de menos. Sí, soy peor que la gata Flora. Ya lo se.
Por lo demás, bastante satisfecho con "Terra Willy (Planeta desconocido)". Un film, por cierto, con inconfundibles ecos a lo "Wall-E" (Andrew Stanton, 2008).