Dementia

Todos los directores deberían dirigir al menos una película muda como forma de aprendizaje de lo que significa el lenguaje cinematográfico en su acepción más pura, ya que éste no precisa de la palabra para ser entendido, está muy por encima, y es capaz de ahondar en el alma sin hacer el menor ruido. Pues bien, “Dementia” responde a esta máxima y la ejemplifica hasta convertirse en el súmmum del séptimo arte, la imagen por la imagen, en la que se desenvuelve de manera natural la historia, un cuadro del “Louvre” en el que basta detenerse un instante para abstraerse de la realidad e introducirse en el mundo del autor que lo pintó. E incomprensiblemente el genial John Parker sólo firmó esta obra, no cabe en cabeza humana. Orson Welles debió flipar después de verla, y no digamos Rod Serling.

Lo mejor: Que me parece estar viendo a Natalie Merchant; ah, y ese final impactante.

Lo peor: No haber estado allí.

Para cualquiera que desconozca el significado del cine.

Parker entiende el terror como el reverso enfermizo de lo real. Retuerce la cotidianidad y la convierte en delirio. Toda causa y todo efecto del horror se manufactura en la propia mente humana; no es necesario salir de sus límites para crear desasosiego y turbación. Siguiendo esta línea, no es difícil emparentar 'Dementia' con obras como como 'Vampyr', 'Caligari' o la posterior 'El más allá', todas ellas películas con la morfología (no) narrativa de una pesadilla mal digerida. No obstante, Parker inocula en su obra el germen del Cine negro y lo que resulta es una película con un pie en Jacques Tourneur y otro en David Lynch.

El periplo noctámbulo de la heroína de 'Dementia' es fácil de descifrar, accesible. Se puede reconstruir el trauma: padre alcohólico, muerte de la madre, infancia marginal, dudoso "affaire" con un ricachón procaz y de modales discutibles y persecución por asesinato del mismo. Parker decide contar esta recurrente historia criminal dentro de los márgenes de un sueño.

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Parker no elimina la narración. Simplemente la moldea, la oscurece. La película, en mi opinión, hubiese ganado enteros con algo más de misterio, algo menos de luz: la pesadilla, el sueño, nunca se sucede ordenadamente, en linealidad temporal. Nunca es un sendero hacia delante.

Hay imágenes potentes, y una atmósfera enrarecida, pero falta algo de la estilización de Dreyer, del salto a la piscina de Lynch... 'Dementia' es soñadora, es extrema, es intensa; de hecho, es muy superior a la mayoría de Cine de terror que he visto recientemente, pero no encuentro en ella ese caos que rige a las mentes que se han desvanecido ante los inextricables recovecos del sueño.

Gracias.

Hay películas que, aunque acaben, se enciendan las luces de la sala de proyección y vuelvas a la realidad, te han dejado una marca indeleble, porque de una manera u otra, son filmes que sirven como de espejo donde no nos gusta mirarnos. DEMENTIA, al igual que la mayoría de películas de Lynch ( me imagino que no he sido yo el único que viendo esta maravillosa película, le ha venido a la mente la idea de que el creador de Terciopelo azul, se sintió influenciado por ella), nos propone eso precisamente: descender a los abismos que muchos de nosotros escondemos bajo nuestra aparentemente fachada normal. De alguna manera, es un viaje sin retorno, un viaje a lo mas oscuro de la mente humana, de una manera expresionista, underground y experimental. Tengo que decir que la acabo de ver y no la conocía de nada ni al director que de hecho me gustaría tener más información de él, en fin es una rara avis, como lo son otras maravillas como El fotógrafo del pánico o Carnival Souls ( tambien conocida como El carnaval de las almas de Herk Harvey).
Recomendable para la gente amante del cine que busquen cosas a contracorriente de lo que estamos acostumbrados a ver habitualmente. Abstenerse los amantes del cine de terror que solo busquen sustos, sangre y monstruos. Aquí el único monstruo somos nosotros: el ser humano. Recomendable de todas todas.

Extrañísimo film independiente, con sonido pero sin diálogos (aunque voz en off) . Mezcla de noir y horror expresionista con mucha alegoría psicoanalítica (quizá demasiado obvia a veces) destacando sobre todo un sensacional comienzo, con la cámara de la negrura y las estrellas pasa a introducirse por la ventana del hotel hacia la cama de la dormida y sus pesadillas, y su posterior preparación para salir a las calles; y las visiones con gente de rostro en negro, sin facciones reconocibles. Pese a una voz en off que sobra y algún pasaje menos interesante (la algo alargada fiesta jazz hacia el final), interesante pieza de culto y bajo presupuesto, recomendable para degustadores de rarezas

Vaya que clásico Dementia, sin duda debe ser uno de los mediometrajes mejor realizados y una de las mejores en el género terror para mi esta en el top ten de ese género.

Los 56 minutos de película a pesar de ser muda te dan una narración perfecta, una historia bien contada, ejemplo de cine por como esta filmada, plano secuencia perfecto, dándote una pesadilla tal y como nos ocurre, con toques surrealistas y de horror puro. El mediometraje esta narrada en una pesadilla angustiosa en una cotidiana noche de una mujer de bajos instintos y sin escrúpulos, a pesar de su corta duración pasan un sinnúmero de cosas cerrando con un final perfecto, es sin duda un clásico de culto que todo amante o estudiante de cine debe verla como requisito primordial.