Crónica de un engaño

Basada en una historia corta de Bernhard Schlink, el tipo que también escribió la novela adaptada en “El lector 2008”, estamos ante una historia pretendidamente trascendente y desgarradora, interpretada por un correcto Liam Neeson en el papel de un tipo que se entera de que su esposa (Laura Linney) le ha sido infiel con un atildado, cosmopolita y playboy español (Antonio Banderas, que hace el papel de una especie de Ripley de pacotilla) y a partir de entonces tras buscarle y encontrarle (con música y atmosfera de presunto thriller) y como consecuencia del estirado guion (es una de esas historias cortas que chirrían como largometraje) inicia una serie de erráticos comportamientos que en ningún momento acaparan el interés del espectador (diría que ni cuando apuntaba a manido thriller al uso) por mucho giro de guion en el último tramo de metraje, ni por más que intente venderlo como retrato psicológico “avant-garde”, para justificar lo tramposo de su aroma a thriller.
Lo de los bellos paisajes y ciudades, lo dejo para otro al que esta insulsa memez le haya tocado la fibra.

Adaptación cinematográfica del relato de Bernhard Schlink, en el que un marido (Liam Neeson) sospecha que su esposa (Laura Linney) le pone los cuernos con otro hombre (Antonio Banderas). La película consiste en la investigación y espionaje por parte del personaje de Neeson hacia el amante en cuestión una vez confirmadas sus sopechas.

La verdad es que "The Other Man" se queda en lo que pudo haber sido y no fue, porque el relato daba para mucho jugo sin duda. Sin embargo la cinta se excede en secuencias de relleno totalmente prescindibles, en momentos demasiado estirados y escenas cargadas de silencios. No digo con esto que se haga larga ya que apenas dura hora y media, pero eso no quita para que haya escenas que no aporten nada (estoy de acuerdo con otra de las críticas, hubiera funcionado mejor como cortometraje). Luego tenemos a unos personajes que se hacen demasiado típicos y previsibles y sus actos no deparan ninguna sorpresa.

Al final no logra la intriga que busca ya que todo se hace demasiado convencional y previsible. Si ya ha visto "Infiel" (que tampoco era el acabose, pero no estaba mal), esto le parecerá una versión más malucha y mucho más descafeinada.

Es una lástima porque los actores no están mal. Destaca el protagonista, Liam Neeson, como esposo lleno de furia contenida por culpa de su cornamenta (la verdad es que este actor siempre está correcto en todos sus trabajos). La verdad es que Neeson y ese pequeño giro al final la salvan de la quema. Pero "The Other Man" es de estas película que quedan bastante en el olvido y no sin razón, no tardaremos en verla en la sobremesa de alguna cadena de esas que nos "premian" con las mejores películas que pueden comprar.

Lo peor: Personajes demasiado previsibles. Lo típica que resulta la historia. Algunas escenas que no aportan nada.
Lo mejor: Liam Neeson. Sus minutos finales y su sorpresita del final...

Vi esta película atraído en un principio por su director, que me fascinó con Diario de un Escándalo. Bueno, Cate Blanchett también tuvo mucho que ver en ello. La verdad es que es un film de los que pasan sin pena ni gloria. Tiene sus cositas buenas y varias malas, empezando por un inconsistente guión que va desde una lograda complejidad en ciertos momentos a una simpleza molesta, como el primer encuentro entre Neeson y Banderas.

Dichos encuentros deberían estar cargados de tensión, pero que va, están muy desaprovechados y no hay profundidad en la relación entre estos dos pavos que a fin de cuentas, se han estado pillando a la misma mujer. No sé que pintaban las partidas de ajedrez, quizás como metáfora supongo, pero en mi opinión hay cosas que se debían mostrar con diálogos y actitudes y no con un jaque al rey.

Liam Neeson es un buen actor, de esos en los que puedes confíar, pero su actuación aquí solo me impacta cuando no comparte escena con Banderas, y no porque éste se lo coma, si no porque el propio Neeson sufre la bajada de tensión comentada antes.

Y antes de que los españolitos empecemos a poner a caldo a Banderas saldré en su defensa. Aquí interpreta un galán de pacotilla y lo hace bien, correcto. Si lo ves en V.O. verás que su acento es pésimo, pero no sé hasta que punto lo es realmente porque no hay que olvidar que interpreta a un español afincado en Milán. Francamente, no me parece tan mal actor como dicen. El tema está en que no ha sabido llevar bien su carrera en Hollywood y se ha vendido varias veces por seguir al pie del cañón en papeles que no permiten el lucimiento. He leído que interpretará a Dalí así que ahí podremos ver si me equivoco o no.

Volviendo a la película, tiene reflexiones interesantes y otra vuelta de tuerca a la infidelidad matrimonial. Más efectista que otra cosa y con una sorpresa al final que descoloca pero no como debería. Digna de ver si no hay nada mejor que hacer.

… de un Engaño con mayúsculas. Dos horas de película que se reducen a que la mujer de un señor ha desaparecido y él descubre que tenía un amante, por lo que, mientras todo el mundo le anima a que pase página él se empeña en conocerle a fondo y gastarse una pequeña fortuna en chulearle un poco. A medio camino entre la psicología y el thriller, “Crónica de un engaño” intenta abarcar más de lo que le permiten las limitadas posibilidades de una historia tan simple y rebuscada (por contradictorio que pueda parecer) como acabo de resumir. Lo peor que le puede pasar a una película que pretende pasar por un drama serio es que la gente se descojone en la sala del cine… y yo he sido testigo y protagonista de las carcajadas finales de una sala de cine casi vacía que demuestra que la gente no es tonta y sabe cuándo una película está vacía por mucho artificio narrativo, miradas compungidas, intensos silencios y pseudoduelos pseudointerpretativos que intenten adornarla.

Un delgado hilo de cordura sostiene en vilo una chuminada como ésta e impide que caiga en el truño sin paliativos: el delgado hilo formado por la solvencia interpretativa de los siempre profesionales Laura Linley y Liam Neeson, capaces de parecer convencidos de una trama retorcida hasta la hilaridad. El resto ponen todo lo que llevan dentro para meter esta película de cabeza en la mediocridad: los productores por permitir el estreno de este sinsentido; los guionistas por escribir dos horas de relleno en torno a un desenlace que podríamos catalogar como mucho, con benevolencia, de ‘curioso’; el director por rodarlo de la manera más aburrida y convencional posible; los responsables de casting por escoger a unos actores que no pegan ni con cola en los papeles exigidos y los propios actores por ser menos convincentes que los tertulianos de “Sálvame”… en fin, creo que queda claro.

Tampoco ha sido acertada la presencia de Antonio Banderas ni como seductor, ni como italiano, ni como farsante. Siento decirlo, pero mi apreciado Antonio sólo resulta convincente cuando puede gesticular, dar voces y, especialmente, si puede hacerlo con acento andaluz… hacer de ex-amante sin blanca con pretensiones de nobleza italiano queda involuntariamente lejos de sus posibilidades.

Las sensaciones cambian dependiendo de la atención que se le preste: si se ve por pasar el rato resulta aburrida… si se le presta un poco de atención aparecen las carencias y se termina lamentando el tiempo perdido… y si se analiza en profundidad es donde aparecen las carencias camufladas con ampulosidad que provocan las carcajadas de las que hablaba al principio, porque hay momentos al final que se nota descaradamente que están puestos para alargar el metraje y Antonio y Liam hablan y hablan sin decir nada coherente.

Avisados estáis, no os dejéis engañar.

Pues es verdad lo que dicen, no es una gran película, pero creo que es una exageración puntuarla como mala, por varias razones:

1. Te mantiene el interés por saber el papel del amante y qué le ha pasado a la mujer, que es mucho más de lo que consiguen películas de más renombre.

2. Banderas lo hace bien. No espectacularmente bien, pero sí bien, que es más que correcto. He visto la versión original y no es cierto que su acento inglés sea nefasto; al menos, es el que se esperaría de un medio español en Milán, que es el personaje que interpreta.

3. Laura Linney está creíble en su papel de mujer fiel/infiel. Porque no es fiel, pero tampoco puede decirse que engañe al marido sin más, e interpreta su personaje sin alardes, de una forma muy efectiva. Me gustan los personajes que no son arquetípicos y el de esta esposa tiene matices suficientes.