Sacco y Vanzetti

Magnífica película en honor de Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti, dos inmigrantes italianos anarquistas detenidos y acusados por doble asesinato y finalmente ejecutados en Boston en la década de 1920. Se trata de una feroz crítica al sistema judicial estadounidense y al profundo sentimiento anticomunista imperante en aquella época, principal causa de aquél juicio y la posterior sentencia a la pena capital.

Numerosos intelectuales de la época se manifestaron abiertamente contra el proceso, entre ellos Bertrand Russell, George Bernard Shaw, Upton Sinclair y H.G.Wells. Al saberse la noticia de la ejecución, el 23 de agosto de 1927 en la prisión de Dedham (Massachussetts), se sucedieron las revueltas populares, en especial en Londres, París y Alemania. Hay que mencionar también que un gobernador del citado estado pidió disculpas en 1977 por el injusto trato que recibieron los acusados.

La ambientación es excelente, así como la crudeza que consigue transmitir Giuliano Montaldo, abordando la trama de manera tan directa que engancha y emociona de forma incontestable al espectador. Los actores bordan su interpretación, en especial Gian María Volonté (Vanzetti) a la hora de hacer su último alegato.

Mención aparte merece la música, a cargo del maestro Ennio Morricone, en especial el imperecedero tema "Here's for you" interpretado por Joan Baez.

Auténtica obra maestra.

Film realizado por Giuliano Montaldo (Génova, 1930) (“Los intocables”, 1987). El guión, del propio Montaldo, Fabrizio Onofri y Ottavio Jemma, desarrolla un argumento de Fabrizio Onofri, Giuliano Montaldo y Mino Roli, basado en hechos reales. Se rueda en Cinecittà Studios (Roma). Nominado a la Palma de oro (Cannes), obtiene un premio en Cannes (mejor actor, Cucciolla) y tres Nastro d'Argento (actor, actriz y banda sonora). Producido por Arrigo Colombo y Giorgio Papi, se estrena el 16-III-1971 (Italia). Es una producción italo-francesa.

La acción principal tiene lugar en Boston (Massachussets, EEUU), entre mayo de 1920 y agosto de 1927. Dos trabajadores manuales, zapatero y pescadero, oriundos de Italia, llamados Nicola "Nick" Sacco (Cucciolla) y Bartolomeo "Bart" Vanzetti (Volontè), son acusados de robo a mano armada y del asesinato de dos personas. En la detención de los sospechosos y en el proceso judicial que se sigue contra ellos se cometen algunas irregularidades. Bart es espontáneo, sincero y extrovertido. Nick es retraído e introvertido.

El film suma drama e historia. Narra hechos reales que tuvieron gran repercusión pública y mediática, en los que intervienen factores sociales y políticos ajenos al caso y diversos errores. El relato, de formato documentalista, es crudo, descarnado y trágico. La descripción de caracteres se presenta bien desarrollada y adecuadamente matizada. La dramatización de los hechos se construye a partir de un amplio análisis documental de base. Se presta especial atención a las incidencias del juicio, las trabas puestas a la defensa, las interferencias sobre el proceso, los sentimientos profundos que embargan a los dos protagonistas, la debilidad de la estrategia unidireccional de la defensa, etc. La obra pone al alcance del espectador un relato que conmueve e inquieta. Es elocuente y muy emotiva la intervención final de Bart ante el Juez y el Jurado.

En su momento pocos creyeron en la culpabilidad de los dos acusados y una gran mayoría estaba convencida de que, siendo inocentes, se les condenaba por su ideología anarquista. Por primera vez se produjeron concentraciones y manifestaciones públicas en solicitud de la revisión del juicio y la suspensión de la ejecución de la sentencia. El 23-VIII-1977, con motivo del 50 aniversario de su muerte, de modo simbólico fueron exonerados de culpa por el Gobernador de Massachussets.

El film denuncia la fuerza y la virulencia de los prejuicios sociales y la xenofobia contra los inmigrantes, las violentas posiciones anticomunistas y antianarquistas vigentes en EEUU, las consecuencias terribles de los errores judiciales, las carencias del sistema legal americano y las deficiencias de los procedimientos de investigación judicial del momento, la instrumentalización del sistema judicial al servicio de intereses políticos partidistas, la pena de muerte, etc.

(Sigue en el “spoiler” sin desvelar partes del argumento)

Estupenda reconstrucción de uno de los episodios históricos más emblemáticos de los años veinte estadounidenses, "Sacco y Vanzetti" va más allá de los sucesos concretos protagonizados por los personajes reales, plasmando las convulsiones sociales y políticas de la época.

El propio Montaldo advirtió en su momento que la película era un nuevo acercamiento al tema de la intolerancia, y en efecto, un atento visionado del filme permite percibir hasta qué punto se retrata una sociedad crispada, invadida de miedos y prejuicios. Y es que todo el primer tercio de siglo XX fue de una especial conflictividad social, étnica y política en los EE UU, un país plagado de trabajadores inmigrantes, muchos de ellos con ideas y proyectos revolucionarios, circunstancia que los hizo altamente sospechosos a ojos del "establishment", que se apresuró a disciplinarlos. Así, los movimientos obreros, las asociaciones de trabajadores inmigrantes y otros colectivos populares sufrieron, a lo largo de las tres primeras décadas del siglo, un espectacular acoso, magníficamente plasmado en la película, especialmente en la secuencia inicial (de un acertado blanco y negro de corte documental) que reproduce uno de los múltiples asaltos policiales a estas barriadas y centros de reunión.

El filme puede dividirse en dos partes; la primera, que abarca la mitad del metraje, nos introduce en los conflictos de la época, y nos muestra la detención y juicio de los protagonistas. La segunda, que abarca siete años, ilustra las protestas populares en contra del veredicto, reconstruye la investigación de la defensa, revela la fatal determinación que anima las decisiones de políticos, jueces y fiscales, y concluye la historia, de nuevo en un blanco y negro estremecedor. La película, pese a lo que opine algún crítico, no cae en el maniqueísmo fácil; expone hechos desde un punto de vista claro, de compromiso y denuncia, pero lo hace con rigor y honestidad, mereciendo por ello un especial reconocimiento dentro del género de cine político. Cuenta con una estupenda fotografía, tanto en color como en blanco y negro (véase el sombrío comienzo, que encuentra su consecuencia y cierre en el tétrico final), un guión bien desarrollado, con algunos momentos francamente emocionantes (la última intervención de Vanzetti ante el tribunal, la carta de despedida de Sacco), y unas interpretaciones de altura, destacando la pareja protagonista, unos brillantes Volonté y Cucciolla, que encarnan magníficamente a unos hombres que deben dejar de serlo para convertirse en símbolos.

Una película muy interesante y bien realizada, que goza además de la siempre acertada música de Morricone, aquí enriquecida por la hermosa voz de Joan Baez, logrando emocionar al espectador.

Gran película que he tenido la ocasión de visionar hace poco atraido por la famosa canción compuesta por la gran solista norteamericana Joan Baez, en un claro manifiesto contra la injusticia que se cometió contra dos inmigrantes de origen italianos como Ferninando Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti ambos de ideología anarquista que fuerón injustamente acusados de un crimen que no cometierón el la década de los años 20, una época díficil donde si querias gararte la vida, tenías que emigrar forzosamente a otros países sin saber lo que te ibas a encontrar allí, y menos aún, lo que te pudiera pasar te carguen con el muerto del crimen, y encima que te procesen y posteriormente te condenen a muerte por ello por sus ideales políticos.

Siendo un bebe escuche la canción "Here´s to you Nicola and Bart" y me influenció tanto por su gran calidad y su extraorinaria belleza musical que desde principio desconocia la verdadera y dramática historia que había tras ella, y que en pocas palabras sigue siendo incluso en la actualidad una clara denuncia contra el sistema judicial norteamericano y la aplicación de la pena de muerte que por desgracia se sigue dando en algunos estados de norteamerica en la actualidad.

Sin duda es la canción que consagró a su autora y al su compositor el italiano Ennio Morricone y que ya forma parte de la historia del Siglo XX, para una película que apenas desde mi punto de vista desconocía hasta hoy y que ha sido para mi todo un hallazgo histórico.

El gran legado para toda la humanidad que supone una bella canción como la presente, en homenaje a dos victimas inocentes del represor sistema político norteamericano, que solo entiende por "democracia" el aplicar la Ley del Talión contra los presos ya sean culpables arrepentidos o inocentes de conciencia, o en este caso inmigrantes pobres sin nada que perder salvo sus vidas a manos de sus verdugos.

Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti eran inmigrantes italianos que habían venido a América desde adolescentes en pos de un futuro mejor. Sacco tenía el oficio de zapatero certificado y Vanzetti vendía pescado en una feria pública. Si bien era de ideología radical, por repartir volantes advirtiendo sobre una razzia que el ministro de justicia Palmer y portar armas que nunca habían usado fueron apresados pocos días después en que uno de los pricipales líderes del partido socialista "Andrea Salcedo" fue arrojado desde el piso 14 del depto de policía de Nueva York, luego de una redrada en sus lugares de reuniones.