22 minutos

Pasable film de acción de ritmo rápido. Por sus cualidades subjetivas, interesante para ver lo que producen países que están fuera del mainstream cinematográfico.

Lo más destacable es la forma -muy rusa- de abordar la historia, con una venganza final imposible de ver en el cine americano.

Tan solo recomendado para cinéfilos interesados en cine extranjero o aquellos aficionados al cine de acción en general.

"22 minutos" aborda el problema de los piratas somalíes como ya se viera en "Capitán Phillips" de Paul Greengrass un año antes, sin ser un estandarte de la irracionalidad de los piratas como se viera en la película americana. Con un entramado decente y que mantiene la expectación en todo momento, Vasily Serikov nos muestra la historia de un barco cargado de gas que es secuestrado a la vez que su tripulación resiste atrinchera en la sala de máquinas. Un grupo de marines serán los encargados de encabezar la liberación a la vez que la burocracia pelea en las mesas la cuestión de pagar o no el rescate.

Película sencilla pero que posee toques de auténtica superproducción que demuestra que los rusos también pueden llegar a ser potencia en esto del cine. Sin mensaje propagandístico de ningún tipo, nos ofrece una trama ligera de acción a la vez que nos demuestra que fuera de las fronteras de EEUU también se pueden hacer películas dignas.

Terminando de ver “22 Минуты” (22 Minutes – 2014) de Vasily Serikov con Sergey Aprelskiy, Vladimir Blagoy, Vladislav Demin, Aleksandr Galibin, Gaël Kamilindi, Petr Korolev, entre otros. Película de acción rusa, basada en el caso real, del secuestro del navío Московский университет (MV Universidad de Moscú), durante los días 5 y 6 de mayo de 2010; cuya tripulación tuvo que atrincherarse en la bodega de carga, tras ser asaltados por piratas somalíes en aguas del Golfo de Adén; la acción se centra en uno de los rehenes y un equipo de La Armada, que prepara una operación de rescate descartando las armas de fuego debido a la carga que transporta el barco afectado; siendo finalmente liberado por el destructor Marshal Shaposhnikov de Las Fuerzas Navales de Rusia. El director nos muestra una historia sencilla con elementos de auténtica superproducción, y demuestra la calidad de la industria cinematográfica rusa; aunque sin poseer un mensaje propagandístico, sí es un filme político, como cualquiera que afronte una situación similar, pero aquí no hay pretensiones de ser una propaganda del poder, como lo haría un filme de producción estadounidense; y ofrece una trama ligera de acción, con mucho ritmo, que muy curiosamente mantiene la retórica bastante similar a Hollywood, por ejemplo, el matiz “el bien contra el mal”, con tripulación que da la pelea, sin rendirse; militares expertos, malos malísimos, pero que son derrotados, y un héroe que salva el día. Muy en el fondo, la historia sigue la línea del mismo escenario, tiempo y acción que otros filmes de temática similar como “Kapringen” (A Hijacking – 2012) y “Captain Phillips” (2013) Esta vez, la acción toma lugar en 4 escenarios: Los piratas, los marinos del carguero, los marinos de combate, y el grupo de burócratas; todos ellos unidos por el personaje principal, un marino ruso que atraviesa un problema amoroso; donde destaca el héroe y el jefe de los malos, con actuaciones decentes; mientras técnicamente la dirección crea el suspenso, con altas dosis de acción, y buen uso de las panorámicas, hermosas vistas al mar y los barcos, y el moderado empleo del CGI. Pero lo más destacable es la forma muy rusa de abordar la historia, con una venganza final imposible de ver en el cine de Hollywood; pero se cae rotundamente con la trama romántica. Sobre la historia real, no incluye al rehén/héroe naturalmente, pues todos se lograron atrincherar a tiempo, no sin antes lanzar al mar una baliza que dio la voz de alarma. Al no tener un rehén, los piratas somalíes intentaron forzar la puerta, pero sus intentos fueron repelidos por la tripulación. Tras un breve tiroteo, los piratas restantes fueron detenidos, y la tripulación, 23 en total, fueron liberados en buenas condiciones físicas, en una acción de rescate que duró 22 minutos. En cuanto a los detenidos, una vez desarmados, y las embarcaciones en las que llegaron fueron destruidas; se les dejó marchar en un bote inflable, con víveres pero sin equipo de navegación, a 300 millas náuticas/560km de Somalia. De acuerdo con El Ministerio de Defensa, los piratas pudieron haber perecido en alta mar. Pero ahí no acaban los “actos de piratería”, pues el 28 de febrero de 2014, el productor de la película, Alexei Sidorov, se quejó ante El Ministro de Cultura de La Federación Rusa, Vladimir Medina, y El Director Ejecutivo del Fondo de Cine, Antón Malyshev, por un recorte editorial, bastante sustancial en la película, que pasó de 120 minutos a 79 minutos de metraje; que según él, la compañía “Central Partnership” ha retorcido el argumento, cortó todas las escenas dramáticas, y las relaciones de los personajes, violando escenas, eventos y la lógica temporal. Debido a esto, exigió eliminar su nombre de los créditos, y declarado oficialmente, no tener nada que ver con “22 Минуты” (22 Minutes – 2014)
RECOMENDADA
NO tendrá la nota en el blog Lecturas Cinematográficas.
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/

Película rusa inspirada en un hecho real y que hace propaganda del régimen del gobierno Putin.
Sin embargo, por muy soviética que sea, bebe del estilo americano y ofrece un desarrollo de la historia roma, fiada a la acción de los últimos minutos y rezando para que todo salga bien con sus actores/militares. Sí, porque más que salidos de una escuela de interpretación parecen que emergen del ejército ruso. Y puede que lo sean. Al menos en las facetas de acción se desenvuelven bien y saben portar el aire marcial. Por lo demás, cero patatero.
El guión es simple y algunas frases son de risa, queriendo parecerse a los estadounidenses en decir estupideces alejándose de la sobriedad rusa en muchos aspectos. La subtrama (si se le puede llamar así) entre el soldado y la novia que deja en tierra es innecesaria y metida con calzador, además de ser poco verosímil. El acercamiento a los secuestradores es típico de estas películas y siempre hay uno bueno entre tanto malo, con lo que conlleva a la creación de una especie de síndrome de Estocolmo por parte del rehén protagonista y el colegueo no tarda en surgir entre ellos. A estos vaivenes en la escritura del guión se le une un montaje mediocre, resaltado claramente en el momento en que el protagonista está a punto de huir (saliendo de la nada los malos). Pero claro, si se escapa casi al principio, nos cargamos la trama "principal" del filme.
Resumiendo, es una película de acción demasiado simple que bebe de las películas de acción estadounidenses de los ´80 que producían Golan-Globus y el grupo Cannon. Sólo faltaba ver en esos papeles a Chuck Norris, Van Damme, Seagal o Dudikoff. Lo bueno, la acción final y que sólo dura 83 minutos.

22 minutos es una película rusa que basa su historia en el mismo escenario, tiempo y acción que la película dinamarquesa Kapringen (A Hijacking)" (Secuestro) y la yankie Capitán Phillips de Paul Greengrass.
El film maneja el guión a partir de un mix entre la acción y la trama de los personajes que se van dibujando de a poco, a partir de esta elaboración tenemos cuatro grupos actantes: los piratas, los marinos del carguero, los marinos de combate y el grupo "de los burócratas" unidos por el personaje principal, un marino ruso que atraviesa un problema amoroso. Planteada la trama de esa manera el film ofrece un marco interesante de espectación en donde no sólo la acción es lo que cuenta.
SI bien la película dista mucho de la calidad que ha sabido mantener el cine ruso desde Eisenstein hasta Alexandr Sokurov de la que el director Vasily Serikov parece haber aprendido poco aún así ofrece un espectáculo aceptable y más o menos entretenido.
La película por ser muy similar a las dos mencionadas también ofrece terciar en las comparativas con las películas que la precedieron que si bien -reitero- basan en la misma historia, ambiente y drama tienen un tratamiento de la acción totalmente distintos. Veremos entonces que en la rusa el modelo actancial es más rico y los personajes no están divididos en los totalmente buenos y los totalmente malos como lo hace Capitán Capitán Phillips en donde los somalíes son perfilados como unos salvajes mientras que los yankies se presentan como totalmente heroicos e infalibles. La rusa no tiene pretensiones de ser una propaganda del poder como lo es la película yankie.
Recomendación: Para quien le guste las películas de acción esta película les será entretenida.
SI buscan mucho más seguramente hallarán en esta película bastante poco.