Pescador

"Pescador" (2012) es la última película de Sebastián Cordero. En los aspectos positivos destaca la asombrosa dirección de fotografía, que captura el paisaje costero, la luz perpendicular, única. Es de resaltar como siempre el manejo de cámara, y en general todos los aspectos técnicos, impecables. La banda sonora está mucho más cuidada y diversa, en relación a su anterior película “Rabia” (2009).

En los aspectos negativos, Cordero vuelve a un guión particularmente inconexo, que parte en esencia de una situación no justificada, los personajes no se desarrollan y uno no logra empatía con ninguno, las actuaciones cumplen así, sin más. La actriz colombiana se muestra particularmente antipática, a propósito de que sigue el estigma de la mujer colombiana en el cine fuera de ese país: o traidora, o mujerzuela, que vende o consume drogas. ¿Será que habrá algo distinto, alguna vez?

A medida que avanza la historia uno pierde el interés que tenía. En fin creo que es un paso adelante en el cine ecuatoriano y que de nuevo la campaña publicitaria sobredimensiona lo que en realidad es este "Pescador", confirmando nuevamente, -en mi modesta opinión-, que "Ratas, ratones y rateros" (1999) es la cumbre del cine de Cordero, que trata de repetirse sin lograrlo.

Sebastián Cordero tendrá el honor de haber intentado despegar el cine 100% ecuatoriano con magistral Ratas, ratones, rateros. Ahora bien, nos fijamos en la evolución de su cine: Crónicas (2004) nos retrataba la relación entre los principios morales y las aspiraciones; Rabia (2008) nos habla del dolor, la soledad, los celos y el autocontrol. Ahora en Pescador nos ofrece un paso más en su evolución; nos habla de la necesidad de superación a cualquier costa. No ahoga al personaje en conflictos morales (los tiene, pero no profundiza en ellos), es más nos muestra a dos personajes que se dejan llevar por la corriente de sus decisiones.
Estéticamente el cine de Cordero es muy reconocible, cámaras al hombro, planos con poca profundidad de campo; en los que el director de fotografía tiene que sacar todo su talento. En Pescador nos enseñan una playa sombría y fría (contradicción); una Guayaquil solitaria y un Quito con mucho movimiento; quiza centrándose en la psicología del personaje y en su desarrollo.
El guión no es tan sólido como en sus anteriores trabajos, pero creo que ha mejorado un punto respecto a Rabia; porque no se centra en el interior de los sentimientos; sino, pasa por encima de ellos para que la moralidad no interifiera en sus acciones.
En definitiva una gran película (y van unas cuantas) de este director ecuatoriano que un día hizo soñar al Ecuador con que hacer cine era posible.

Pescador muestra la historia de Blanquito y Lorna, dos personajes que se unen con el fin de vender la droga que Blanquito encontró en la costa, su deseo es salir de El Matal y buscar a su padre en Guayaquil que es un gobernador. Lorna en cambio busca volver a su país natal Colombia para reencontrarse con su hija.

Así es como ambos personajes, bastante diferentes entre sí emprenden su viaje con el fin de vender la droga al mejor postor. Lorna es bastante vivaz, Blanquito por el contrario peca de inocente visitando por primera vez la ciudad.

La película es bastante correcta en la presentación de los personajes y su desarrollo en general, en términos generales es un film entretenido y divertido con cierta pizca de drama que no termina de convencer, buena película.

Es muy grato encontrar directores que continuan planteandose nuevos desafios narrativos, que continuan discretamente una busqueda, la filigrana de un lenguaje compuesto de luces, sombras y emociones. "Los expertos en cine" que critican de foma personal, obvian los valores y los logros artisticos de una obra como lo es Pescador, una grata sorpresa para aquellos que buscamos escapar de este agotamiento de planos mutilados, del ataque de los videoclips en la piel de un largometraje, de esa gesticulacion barata de los actores comerciales, y que retozamos en el imaginario de actores como Crespo (Blanquito) o Maria Cecilia, en una interpretacion sincera y franca. Pescador es emocionante, su ritmo es fantastico, el ojo detras de la camara ha devorado miles de pies de cine mundial, es un apasionado que transmite y nos regala ese momento, que entre las sombras del cine se hace unico, franco y hermoso. Buena esa!