Un colt por cuatro cirios

Tortilla o Gazpacho Western muy por debajo del promedio ordinario, con muchos condimentos, tal como: acción, fuego cruzado, peleas, traiciones, ahorcamiento y giros argumentales, pero bastante mal hecho. Un grupo liderada por Oswald (Cris Huerta) asalta un cargamento de oro. Esa noche, cuando los matones lo celebran, Farley (Antonio Molino Rojo) roba el dinero. Después de eso, el logró escapar, siendo perseguido por los secuaces de Oswald. Mientras tanto, Rogers (Mariano Vidal Molina) es acusado de cómplice del robo. Más tarde, a la mañana siguiente, Farley es encontrado muerto cerca de su casa donde vive su esposa Beltha (Maria Martin) y su hija mestiza Geminis (Olga Omar). Entonces, un Sheriff llamado Frank Garringo (Robert Woods) y su ayudante González (Gaspar 'Indio' González) investigan este y otros asesinatos que se suceden todo a lo largo.

Este movido western de tortilla contiene tiroteos, ruidosa acción, algunos breves toques de humor con ironía y persecuciones a caballo. Producción española rodada en Cataluña, llena de zooms, caras conocidas del género, agresiones, personajes exagerados, tiroteos, muchos disparos y peleas. Las escenas iniciales, un robo a la diligencia, en realidad están pasablemente hechas pero se nota la falta de presupuesto. Hay ángulos de cámara y la edición que son aceptables. Hay un tiroteo en un bar que también está bien ejecutado. Aunque hay algunas puestas en escena estáticas que son comunes en los eurowesterns posteriores, presumiblemente para reducir costos, esta cinta tiene algo más de dinamismo que muchas de sus contemporáneas, aunque la acción está chapuceramente hecha. Sin embargo, ello está lejos de ser buena, es el tipo de película que puedes ver irónicamente, burlarte de su locura y pasar un buen rato riéndote de lo estrafalario que resulta. Es un western tardío perteneciente a la última fase del género, en los que la mayoría son amateurs (aunque todavía hubo algunas producciones de alta calidad, como las posteriores Keoma, Mannaja ó Four of the Apocalypse), pero aquí los resultados son simplemente caóticos. Hay elementos de giallo, misterio, western gótico o espagueti puro y duro, mezclados en una historia que no se puede decidir si quiere ser un brutalmente vicioso western hispano/italiano ó una comedia de western. Vale la pena ver una demostración del enfrentamiento entre Robert Woods como el sheriff y Cris Huerta como el codicioso dueño de la taberna y sus secuaces con unas miradas que lo dicen todo, incluido un emocionante final lleno de desjuntada acción. Actuaciones mediocres para todo el casting. "Cuatro velas para Garringo" o "Un colt por cuatro cirios" está protagonizada por el habitual Robert Woods. Robert protagonizó varios Tortilla/Ravioli Western como "Cinco mil dólares en un as", "Siete pistolas para los MacGregors", ¨Cuatro dólares para la venganza", ¨Black Jack¨, ¨El Puro¨, "Gatling Gun", entre otros. El reparto de apoyo es francamente aceptable, gracias a la aparición de importantes secundarios de Spaghetti/Tortilla o Paella Western, estos son los siguientes: Mariano Vidal Molina, Antonio Molino Rojo, Gaspar Indio González, César Ojinaga, María Martín y el cómico alivio es del prolífico secundario Luis Cigues como un empresario de pompas fúnebres siempre ansioso de muertes a fin de reunir un dinerillo.

Siendo fotografiado dignamente por Antonio L. Ballesteros. Filmada principalmente en escenarios pobres e inadecuados, desde las locaciones de Fraga, (Huesca), similar a Almería, y un pueblo del oeste ubicado en ¨Splugues De Llobregat¨ construido por Balcazar Productions y en el parque nacional de Montseny (Barcelona). Partitura musical atmosférica pero anticlimática de Enrique Escobar, el ordinario compositor de Iquino. La película fue pésimamente dirigida por el prolífico cineasta Ignacio F Iquino, bajo el seudónimo de Steve McCoy. Iquino está considerado uno de los peores realizadores de la historia del cine español. Escribió, dirigió y produjo numerosas películas a través de su productora: ¨I.F.I.¨ que financió numerosos Westerns. La mayoría de los créditos de Ignacio F. Iquino fueron como escritor, aunque dirigió una serie de westerns bastante mediocres durante el boom de los años 60 y principios 70. Su mejor esfuerzo como tal fue la muy entretenida ¨Dios en el cielo. . .Arizona en la Tierra¨ con Peter Lee Lawrence. Participó en la redacción de la interesante ¨El Puro¨ también interpretada por Robert Woods. El también produjo ó dirigió : ¨Oeste Nevada Joe¨, ¨Ninguno De Los Tres Llamaba Trinidad¨, ¨La Diligencia De Condenados¨, ¨ Fabulosos De Trinidad¨, ¨20 Pasos a Muerte¨, ¨Dólar a Fuego¨, ¨Abre Tu Fosa Llega Sabata¨ y ¨5 Pistolas De Texas¨. La mayoría de ellas protagonizadas por Richard Harrison, Jorge Martin o George Martin, Luis Davila, Daniel Martin o Robert Woods. Iquino fue un artesano español, escritor y director; trabajando desde los años 40 en todo tipo de géneros y películas de serie B hasta finales de los 80. Sin embargo, también dirigió películas aceptables, tales como ¨Historia De Una Escalera¨ basada en la novela de Antonio Buero Vallejo, ¨El Judas¨, ¨Ángeles Al Volante¨, ¨Tambor Del Bruch¨ y ¨Brigada Criminal¨ esta en su mejor momento. Calificación: 3.5/10, una película debajo de la media, con algunos momentos brevemente entretenidos, aunque es a veces vergonzosa. Si te gustan los chorizos, la paella, la tortilla, la butifarra o los spaghetti westerns, este es ligeramente visible por las finales escenas de acción.

Otra cinta de robos, asesinatos, puñetazos ... y cuernos en esta ocasión. Con el imprescindible sheriff tratando de poner un poco de orden.
Guion embarullado que se sigue con dificultad entre tantas traiciones, cobardías y ambiciones de unos y de otros. Tanto que al final hay que echar mano a la Caballería del Ejército (a la que para nada se había citado antes) para zanjar la cuestión. Lo dicho, con tanto cirio el espectador se queda al final a dos velas.
Dirección rutinaria y sobreactuación en las interpretaciones. Abundantes peleas a mamporros pésimamente ejecutadas, lo mismo que los tiroteos. Patética la lucha entre las dos mujeres, "Si no fueras una mujer te daría una tunda de azotes". La parte cómica corre a cargo de un enterrador de hablar gangoso, Jim (Ciges), que es de lo poco que se salva en el elenco.
Ambientación típica de los 70, o sea, sobreabundancia de patillas, bigotes y melenas.
Por allí aparece la clínica del Dr. Lorens con su instrumental y sus vitrinas, que trata una herida superficial de bala.
Película floja, western rutinario y muy embarullado.