Museo Hermitage. El poder del arte

Museo Hermitage. El poder del arte es una propuesta que Michele Mally ofrece a todos los amantes del arte, la historia y la fotografía, en un viaje a través del tiempo. El actor italiano Toni Servillo es el guía que nos acompañará, en todo momento, por las imponentes salas del museo y las emblemáticas calles de la ciudad rusa de San Petesburgo.

Este es un documental cuyo guion gira alrededor del segundo museo más grande que existe en el mundo, el Museo Hermitage. Con más de tres millones de obras y solamente un tres por ciento de ellas expuesto, el Hermitage se consolida como un puente cultural que sirve de unión entre distintos países.

Este museo de Catalina la Grande se fue consolidando con las colecciones privadas que adquirieron los zares y emperadores de Rusia a lo largo de los años. Esos cuadros, en su día, significaban el ascenso del Imperio Ruso.

Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, pues el Hermitage, además de poseer reliquias artísticas de gran valor, ha sido escenario de situaciones altamente violentas y horrorosas. Entre esas paredes se han vivido guerras, saqueos y revoluciones. Pero, pese a todo, la cultura rusa ha perdurado y así se percibe en el film.

A nivel más técnico, Museo Hermitage. El poder del arte se caracteriza por un buen ritmo y una documentación extremamente rigurosa. Además, destaca sobre todo por una escenografía y música envolventes que hace que el espectador goce audiovisualmente y quede asombrado por tanta belleza que tiene el lugar: desde las imponentes salas del museo hasta los más maravillosos atardeceres sobre la ciudad de San Petesburgo. Todo acompañado por la recitación de poemas y novelas y, ocasionalmente, los rasgueos de piezas musicales clásicas.

A través de la pantalla, Michele Mally nos brinda una demostración de que viajar nunca antes había sido tan fácil, y nos da las razones suficientes para ir a visitar cada rincón del museo en persona.

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Sinceramente esperaba encontrarme con un documental sobre el gran museo de San Petersburgo mas evolucionado en cuanto a su desarrollo y puesta en escena, pero me he encontrado con un documental de corte muy clásico, academicista y con una molesta voz en off que todavía acentúa más el doblaje. Aconsejo verla en versión original con subtítulos, al menos eso fue lo que me hubiese gustado a mí.


Por lo demás la lección de historia , literatura y música rusa, aún agradeciéndose, dejan muy poco espacio para el museo y las impresionantes obras alojadas en el, así como resulta demasiado liviana para entrar con mayor profundidad en la figura de Dovstoieski, Nikolai Gogol, Nabukov, Rimski-Korsakov, Chaikovsky, entre otros, e igualmente queda parca para conocer el imperio de los zares, la revolución bolchevique o la segunda guerra mundial, donde la San Petersburgo-Leningrado, de la antigua Unión Soviética, fue una batalla decisiva para la derrota de Hitler y el nazismo.

Con todo, la lección sobre el Hermitage y todas las Rusias siempre es bienvenida y en el plano artístico impresiona con el color y la magnificencia del Hermitage y la imperial San Petersburgo.