Piedra, papel y tijera

Un trabajo muy atípico dentro del cine argentino, que en general nuca hace thrillers psicológicos con toques de terror, ya que en general esas ramas se dividen entre policiales con "contenido social" o "experimentales", y el terror suele irse por el lado de lo sobrenatural o el slasher.
Acá hay una atmósfera muy bien construida, claustrofobia, asfixiante, donde los tres personajes intercambian el rol de victimas y victimarios todo el tiempo.
El suspenso está muy logrado, cosa rarísima en las películas nacionales de las últimas décadas, sobre todo las de poco presupuesto como esta, además es mucho más genuino que el de las comerciales que mal imitan al cine de Hollywood.
El elenco es muy solido, la película tiene algo teatral que no lo niega en ningún momento, al contrario, lo asume y le saca el mayor provecho que puede.
La fotografía es muy buena, logra darle el tono opaco, decadente, lúgubre en el que viven los personajes.
El elenco es muy solido, todos están perfectos en sus personajes, cada uno le aporta el tono justo.
Lo malo quizás sea que en varios momentos está al borde de derrapar y en la última parte lo hace, se descalabra un poco y se va hacia los golpes de efecto innecesarios, lo que hace que pierda la sutileza construida a lo largo de una hora, si bien no es que lo hacen de la nada y que da pistas de hacia donde quiere ir, yo creo que hubieran podido llegar al mismo lugar sin necesidad de ciertos momentos que degradan o hacen menos la narrativa.