Raíces (Miniserie de TV)

Gran serie sobre el esclavismo en Estados Unidos, con el tiempo se ha c onvertido en un icono de la pequeña pantalla, en su momento uno de los grandes acontecimientos, centrada en varias generaciones de una familia de afroamericanos, desde que a Kunta Kinte lo atrapan en Gambia, lo llevan en un barco tumba, lo venden, reniega de su nombre de esclavo, le latigan por ello, se intenta escapar, lo torturan para que no lo vuelva a intentar, encuentra pareja, tiene hijos, y así todas las etapas de varios descendientes hasta que les conceden la libertad. La historia es un magnífico alegato a favor de la libertad, que conmueve, te enternecerá, hará que sufras con ellos, es un espléndido retrato de los horrores de creerse superiores por el color de piel. Le falla un final demasiado forzado, no le va a la estructura, es demasiado dulce para un porvenir que con el fin de la esclavitud no acabaron ni mucho menos sus problemas, es un borrón en una enorme serie, repleta de buenas actuaciones. Recomendable a los que gusten de series que dejan calado y te emocionaran. Fuerza y honor!!!

La vi cuando tenía entre 10 y 13 años aproximadamente, recuerdo que en E.E.U.U la gente despoblaba las calles, todo el comercio cerraba, había letreros que decían "cerrado por raices" acá en Chile pasaba algo parecido, causó conmoción a nivel mundial porque por primera vez se contaba la historia de la esclavitud viste desde los ojos de quienes la vivieron. El argumento está excelentemente bien documentado, tienen que verla, es muy emotiva. Ahora la está trasmitiendo un canal por cable que se llama TCM, creo que todos los días a las 15°° hrs.

Nace como un homenaje a los afroamericanos cuando se cumplieron 200 años de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, batió todos los records de audiencia y de venta de libros, esta muy bien realizada, con muy buenas actuaciones.
Si bien hay algunas diferencias con el libro, lo importante es que es una historia real de una familia, que a través de 9 generaciones ha mantenido la historia familiar por medio de la tradición oral que se trasmite de generación en generación, de hecho estando en Gambia el autor puede escuchar de boca de una persona que trasmite la tradición oral el momento que Kunta Kinte sale a buscar madera para hacer un tambor y es capturado como esclavo, después de más de 200 años y a miles de kilómetros de distancia.
La historia comienza a mitades del siglo XVIII, 1750 aproximadamente en una aldea llamada Juffure, ubicada en Gambia. Nace el primer hijo de Binta y Omoro, y es llamado Kunta.
Un día fue enviado a realizar vigilancia en una torre de la aldea. De regreso a casa fue raptado por un toubob (humano de raza blanca o europea) y cazado como esclavo.
Los blancos contaban con las colaboración de otra tribus de raza negra.
A diferencia de la miniserie toda esta parte ocupa una extensión grande del libro, desde un par de siglos antes cuando ellos llegan desde el norte. Durante toda la historia relatada en África el autor menciona las costumbres y forma de vida de los mandikas y demás tribus, incluyendo palabras en su idioma.
Kunta es llevando en un barco con muchos mas negros raptados hacia Norteamérica. El viaje es inhumano, las condiciones sanitarias son inaceptables, morían la mitad de quienes iniciaban el viaje.
A los efectos de tratar de percibir mínimamente lo que sentía un esclavo, Alex Haley realizó el viaje desde África en un carguero, y durante las noches dormía en la bodega, sin embargo el viaje fue de 10 días y no de 3 meses
Al llegar a Annapolis en el estado de Maryland la plaza negrera, Kunta fue comprado por el amo John para trabajar en plantaciones de algodón y maíz en el estado de Virginia. Intentó fallidamente escapar varias veces hasta que a la cuarta fue atrapado muy lejos por otro amo quien le corta parte del pie derecho. Este nuevo amo, llamado Waller, hermano del dueño de Kunta, lo compra y pone a trabajar como jardinero y posteriormente al ganar su confianza, de cochero. Después de muchos años se casa con Bell, la cocinera, y tienen una hija llamada Kizzy.
Y la historia continua con la vida George “el gallero”, su esposa, su hijo Tom “el herrero”.
Con la finalización de la Guerra de Secesión termina esta miniserie.
El libro es extenso, pero podría haber sido mucho más.
Si la consiguen en DVD véanla.

Una de las mejores adaptaciones para la televisión de un best sellers, el de Alex Haley que nos cuenta la historia de su familia tras doce años de investigación, desde que a un antepasado suyo le capturaron los negreros en el bosque de Gambia cuando iba en busca de un tronco para hacerle un tam-tam a su hermano pequeño.

Kunta Kinte, el guerrero mandinga que buscó la libertad con todas sus fuerzas y que fue vendido como esclavo en Annapolis, EEUU; y que nunca cejó en su empeño persiguiendo la libertad contra sus captores blancos, que los utilizaban como moneda de cambio y que los explotaban hasta la muerte, adquirían la propiedad de sus hijos y los vendían sin pudor alguno separando a las familias.

Desde 1.750 hasta el final de la guerra de Secesión americana, donde se abolió la esclavitud, la serie nos describe las vicisitudes de los descendientes del viejo africano hasta su asentamiento definitivo en Tennessee, donde el "Gallo" George logró adquirir unos terrenos para prosperar, sus pocas alegrías y sus muchas penas y fatigas, la crueldad y también la bondad tanto de los negros como de los blancos en una de las manchas que nos salpican a la humanidad, donde la igualdad, a pesar de los años transcurridos, aunque es un derecho fundamental, todavía queda lejos, y más en el autodenominado país de la libertad, donde la misma brilla por su ausencia.

Fue un gran hito de la televisión, que yo ví de adolescente, y que hasta ahora no había conseguido volver a ver. Acaparó infinidad de premios, no ha envejecido a pesar del tiempo transcurrido, y tiene una secuela y un remake, cuya existencia desconocía y que lógicamente voy a ver para seguir la trayectoria de los descendientes de Kunta Kinte, el viejo africano que perseguía la libertad a pesar de que le cortaron medio pié para impedírselo.

Matrícula de honor, 10.

Una de las mejores series que se ha realizado. El dramatismo real, el sufrimiento y la ambientación de la época; están conseguidos. Una serie inolvidable, que cuando era más joven me impactó profundamente. No he podido olvidar el personaje principal, Kunta Kinte. No te la puedes perder.