Killing Bono

Original cinta (por lo que leo basada en hechos reales) que narra la vida paralela de una banda de rock que creció junto a U2 en el mismo colegio de Dublin. Mientras los segundos se convirtieron en una de las bandas más importantes de la historia, los primeros tuvieron que sufrir para poder tocar en garitos de mala muerte (la mayoría de veces por culpa de malas decisiones).

La cinta es muy entretenida, y cuenta con la baza de los dos protagonistas, tanto Ben Barnes, como Robert Sheehan, que demuestra que hay vida más allá de Nathan en 'Misfits'. También está muy lograda la caracterización del Bono de aquella época. Quizá en lo que más falla la cinta es en dotar de verosimilitud a los acontecimientos, pero si te la tomas como una fábula mejor.

En definitiva, una cinta muy agradable para fans, y para no fans de la banda irlandesa, que esperemos que algún día llegue a estrenarse por estos lares, aunque sea de forma limitada, o en DVD.

Lo mejor: Robert Sheehan.
Lo peor: Algunos secundarios como la vecina de los chicos son meros clichés que no aportan nada a la historia.

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Rocambolesca historia en torno a las vicisitudes por las que tienen que pasar unos compañeros de instituto de los integrantes de la banda U-2.
No sólo eran compañeros de estudios sino que compartían sueños y hasta formaron sus bandas en los mismos tiempos con posibilidades de trasvase de músicos incluidos.
La narración se hace en tono de comedia, o tragicomedia, habría que añadir porque el músico metido a novelista ofrece un personaje muy de Lazarillo para poder bucear en las tormentosas aguas del famoseo de los grupos de rock de los setenta.
Los resultados son un tanto desiguales debido al exceso de metraje, con un buen inicio y un gigantesco flash back, se cuentan los inicios de ambas bandas y se pone en paralelo los éxitos de unos con los fracasos de los otros.
El inicio es ágil, divertido y con ritmo. Sin embargo, pronto cae en una serie de escenas superfluas que no conducen más que al aburrimiento y al lucimiento de la pareja de actores principales. La narración regresa por sus fueros y, en los últimos minutos, recobra la tensión y el buen hacer de la primera parte.
De interés por lo de historia reciente que tiene recurre al chiste recurrente de la mala decisión del casi gafe. Si en un principio funciona, acaba pareciendo un tanto cansino porque el guion, por momentos, parece no avanzar.
De reparto interesante, con secundarios de lujo, habría que recordar esta película por ser lo último de Pete Postlethwaite.

Killing Bono: I Was a Bono's Doppelganger es un libro autobiográfico escrito por Neil McCormick, base de la adaptación cinematográfica realizada en 2011 por el británico Nick Hamm (The Hole, El Enviado). De título definitivo Killing Bono, esta comedia ambientada en el mundo de la música cuenta con un reparto encabezado por Ben Barnes (el príncipe Caspian de Las Crónicas de Narnia), Robert Sheehan (Misfits TV), Krysten Ritter, Martin McCann, Stanley Townsend y Pete Postlethwaite (En el Nombre del Padre).

Dublín, finales de los setenta. Los hermanos McCormick (Barnes & Sheehan) pretenden hacerse un hueco en la escena musical de la época. Tienen unos amigos a la par que rivales, una banda procedente del mismo instituto llamada The Hype -y que poco después se dio a conocer con el nombre de U2-. Los años pasan y mientras U2 llenan estadios, los hermanos McCormick buscan salir a flote pidiendo dinero prestado a un gangster (Townsend) para marcharse de la rural Dublín, a la más cosmopolita Londres en busca de un contrato discográfico. El título de Killing Bono viene de la presión que se autoimpuso el mayor de los hermanos para superar a la banda de Bono -más después de que no dejara a su hermano Ivan unirse a U2 como segundo guitarrista-.

No sé cuanto tiene de real Killing Bono, desde luego si los hechos que relata la película son fidedignos la vida de Bono estuvo seriamente en peligro. El caso es que es plasmado en pantalla como una divertida comedia musical con multitud de guiños a la industria musical de los ochenta, y en especial a la carrera de los irlandeses U2 -desde su época en el instituto hasta la publicación de The Joshua Tree-. Es la película de Nick Hamm un retrato certero sobre el mundo del rock, clichés incluidos de sexo, drogas y situaciones excéntricas cuando salen de gira -sin caer nunca en el disparate-, y en el que hay cabida para escenas más dramáticas, amoríos y una subtrama salida del cine de gángsters.

Interesantes trabajos interpretativos y química entre Ben Barnes y Robert Sheehan, buena recreación de Martin McCann como Bono y correctos secundarios, entre ellos el brillante y hace poco fallecido Pete Postlethwaite (1946-2011).

No está a la altura de la mejor comedia sobre el rock -ese lugar es para This is Spinal Tap- pero es apreciable dentro de un subgénero en el que no abundan los buenos títulos ¿Inconvenientes? No estar interesado en el mundillo y que tal vez, le sobra un pelín de duración.

Genial película basada en las experiencias vividas por el grupo Sook up que nació y creció a la sombra de U2. Lo mejor de todo es la banda sonora con canciones originales de la época. Y no olvidar lo sorprendente que es ver una película basada en al Dublin de los 80's y no mencionar el conflicto del I.R.A., bravo por el director.