No nos moverán

No sé muy bien por qué a una película como Won't Back Down no ha encontrado aún distribución en España, cuando cuenta una historia desgraciadamente de plena actualidad en nuestro país, y podría servir de apoyo e inspiración a tantas personas.
La verdad, que haya quien tilde a la película de manipuladora y tramposa demuestra como mínimo dos cosas: uno, que no ha leído que está inspirada en hechos reales... y dos, que vive en el mundo de Oz, porque la crisis de la educación pública es una realidad por encima de las izquierdas, las derechas y cualquier otra opción política.
Porque éso es Won't Back Down. Un retrato de la lucha de dos madres que creen que puede existir una mejor escuela para sus hijos y luchan por ello. Sin política. Sin mencionar en ningún momento a gobiernos ni a nadie en concreto. Simple y llanamente una defensa de la educación que todos los niños merecen. Esa es la principal virtud de la película de Daniel Barnz.
Ésa, y que el filme es de lo más entretenido, agradable de ver y de esos que dejan un gran sabor de boca al final. Lo cierto es que tampoco hay nada de extraordinario en él, ni se diferencia mucho de un telefilme de sobremesa, y la realización y la caracterización de personajes son bastante simplonas. De hecho, quizás la nota verdadera que merecería sería un 6, pero sube directamente al notable gracias al trabajo de su reparto. Holly Hunter cumple sin grandes aspavientos, y Oscar Isaac resulta encantador, pero son las dos protagonistas las que elevan la película a niveles que le habrían estado vedados de no ser por ellas. Viola Davis es una fuente de emoción y de elegancia, quizás una de las actrices más capaces y con una mirada más sincera que hemos descubierto en los últimos años. Tal como demostró en Criadas y Señoras, es única para dar vida a mujeres de buen corazón y cierta timidez. Maggie Gyllenhaal, debilidad personal de quien esto firma, borda otra actuación impecable, llena de fuerza, carisma, energía y sobre todo esa naturalidad que siempre derrocha. Haga lo que haga, sea una pastelera loca, una abogada con super-héroe al lado, una madre soltera, una secretaria masoquista o una promiscua estudiante de Arte, el espectador siempre se cree los personajes de Gyllenhaal y no los relaciona con otros roles de la actriz, porque a cada uno les da algo especial y único, con esos ojos tan expresivos que tiene y esa presencia que llena la pantalla.
En definitiva, una buena película que no es para tirar cohetes pero que tiene sus cosas importantes que decir.

Lo mejor: Gyllenhaal y Davis.
Lo peor: Tampoco es nada del otro jueves, y pasaría muy desapercibida si no fuera por las actrices y por lo entretenida que es.

Lo primero que hay que decir en este caso es: agarren las tres críticas que figuran en esta página, hagan un bollo y tírenlas a la basura, si es posible con quienes las escribieron incluidos. Pensar que esos tipos cobran por lo que escribieron es un insulto a la inteligencia humana. Son gente con unas anteojeras mucho más grandes que su cabeza, y están totalmente incapacitados para ver, para mirar, para analizar, para pensar siquiera. Manipuladora? Completamente falsa? Predeciles cliches de Hollywood? Cada escena, cada palabra, cada diálogo de esta película muestra bien a las claras lo enferma que está nuestra sociedad, y por sobre todo, qué dificil es hacer algo para modificarla. Para aquel que piensa, que sabe analizar situaciones, cada situación de esta historia tiene tantas aristas... que da para pensar largo, largooo tiempo. He visto muchas películas sobre educación, es uno de los temas fundamentales de nuestro tiempo, FUNDAMENTALES, y no creo que alguna vez, otra supere a esta. He calificado muchas películas aquí, muchas, y este debe ser el segundo, tercer puntaje 10 que pongo, aún a películas brillantes.

Sí, a veces la película es algo melodramática.
Sí, a veces se tiene la sensación que ya hemos visto esta película.
Sí, a veces parece que los estadounidenses parecen muy cándidos.
Sí, pero la película me ha gustado. No baja su ritmo en ningún momento y las interpretaciones de sus actrices principales son convincentes. Tienen algunas secuencias memorables que hacen que tus sentimientos se pongan a la par de tu piel.
Podría decir muchas cosas sobre la película, pero si estás leyendo esta crítica para saber si vale la pena ver esta película, permítanme mi opinión: si les gusta las películas sobre imposibles, de la fuerza y la convicción de los seres humanos, de que no hay casi nada imposible... Entonces, esta es una película que deben ver: no se arrepentirán.

El guion y la trama están bien llevadas. No es una película es un hecho real, algo que a veces es difícil de dirigir. La música lleva el ritmo de la película. Las escenas donde corresponden.
Es de esas historias de vida, que nos generan empatía y que nos convencen con su causa. Además tiene base en hechos reales.

Dado que obtiene una puntuación, acorde a lo que se merece, diré que por una vez aunque encorsetada en esa franja horaria telefilmesca la película no conlleva esa especie de designación "Es mala porque es un telefilm".
Dicho ésto, no me ha parecido una gran película. Y no me lo ha parecido, porque a mi entender es muy reivindicativa, y lleva ese "honor" de principio a fin, y en cierto modo se agradece que unas personas luchen por lo que quieren, el futuro de sus hijos, pero el problema de fondo es que, aún aborreciendo esas críticas de que la película es falsa y manipuladora, afirmación errónea desde mi punto de vista, carece de atractivo en cuanto se empieza a reivindicar los derechos y no se me habla de ellos. No se ahonda. Reivindicamos una escuela mejor, un futuro de enseñanza, pero el cómo no se explica. Me hubiera facilitado las cosas si se hubiera dicho por ejemplo, pues propongo que las aulas sean más amplias (afirmación totalmente superficial, pero es por poner un ejemplo), pero la película parece que es todo el tiempo lo mismo reivindicar los derechos de unas madres, el futuro de la educación de los hijos, pero no se dice que pretende reformar o erradicar. Hay un momento en que al parecer la película nos cuenta que a los niños con problemas se les pasaba de curso sin más, y se expresa que no debe ser así, que los niños deben cultivar sus conocimientos. Ahí si se moja un poco. Pero la sensación es que parece que se trata de una reividicación sin más, que no viaja a ningún lado y la película parece que nos quiere dejar una lección de fondo. Algo que se agradece en cierto modo, porque a veces es necesario que nos recuerden que debemos luchar por un mundo más justo, pero en pantalla resulta un pelín coñazo, que se trate este tema sin más.
Por lo demás me han gustado muchos las actuaciones, las cúales no de sobresaliente sobrepasan el rango propio de estos productos, alcanzando un nivel bastante bueno.
El ritmo dinámico está conseguido. Lo cierto es que la película no está mal pero he dudado si darle un 4 por lo que he comentado. No puede ser querer expresar unos ideales y luchar por ésto, sin ahondar en cómo llegar a ellos. Además por otro lado, considero que se tiene la percepción tras verla de "lucharé por mis ideales" sale una sensación, en cierto modo positiva, de querer cambiar el mundo y agradecer la labor de las protagonistas. Más allá de eso la pelí un pelín vacía de contenido.