Me he encontrado con este cartel en las salas de cine y me ha llamado la atención Lo he entrado a ver porque las otras opciones no eran muy apetecibles (una de Fast and Furious, una española con una portada que es patética...) y me he encontrado con un documental español precioso.

Me ha encantado. Y no porque sea un documental intenso, ni que profundice en un tema mucho, ni si quiera que tenga unas imágenes preciosas (que las tiene) sino porque es lo que es y no pretende ser más que eso: un viaje de una chica y un chico que caminan por grandes rutas de senderismo por el mundo (entre ellas el Camino de Santiago) y que van entrevistando a gente que hacen lo mismo que ellos. Es tan bonito de ver y de escuchar (porque la música es increíble) que te da ganas de salir del cine y ponerte a caminar, y sobre todo de vivir el presente.

Creo que no debe ser casualidad que este documental se haya lanzado en julio de 2021. Después de año y medio confinados esto es aire fresco!

Es una obra que tiene un montón de premios por festivales y que, según la sinopsis, visita las mejores rutas a pie del mundo mientras toca temas más profundos. Y es cierto, al final es como una visión poliédrica y escueta de muchos temas como el vivir el presente, las fronteras, la vida de los indígenas peruanos...

Para los que hayan hecho un camino como el de Santiago será fácil entender ese concepto de hacer una amistad intensa con alguien y al día siguiente perderlo de vista. El documental hace lo mismo: sus protagonistas, dos cineastas, van caminando por las rutas y peregrinaciones espectaculares y encontrándose con gente y contando las razones por las que están en ese lugar y en ese preciso momento. Al mismo tiempo, los protagonistas cuentan también lo que les va sucediendo con voz en off, aunque se agradece que no quieran acaparar mucho el protagonismo.

Me ha gustado mucho: los paisajes, la música, la gente. Es perfecto para una tarde de domingo después de una semana de estrés. Es un soplo de aire fresco.

Lo mejor: que te da ganas de vivir (y el perro).
Lo peor: te quedas con ganas de conocer más en profundidad algunas historias.

Esta película es más o menos como un capítulo de Pantomima Full de 80 minutos, con algunos momentos de documental y otros de anuncio de Consejería de Turismo. Con esto no quiero decir que las gentes que salen no sean auténticas, parecen todos buenas personas (la gente fuera de su ambiente normal suele ser más generosa, ¿quizás porque depende más de la generosidad de los demás?). Lo que quiero decir es que se repiten muchos tópicos. Por suerte entre tanta persona encontrándose a sí misma también aparecen algunos que ya se han encontrado y a ellos sí es sugestivo oírlos, especialmente gentes de cada lugar en particular. Otra cosa que he echado de menos una visión más personal de los cineastas.

Por otro lado, los paisajes son preciosos y por la situación que hemos vivido (si alguien lee esto muy en el futuro, estamos en 2021 y la gente tiene muchas ganas de viajar) será bien recibido tanto por el público como por todos los interesados en reactivar el desplazamiento humano de larga distancia.