Mozart in the Jungle (Serie de TV)

Mucho camino atrás escuché Supertramp mientras un piano volaba, al doctor Fleischman empezaba a gustarle Alaska. Esta noche al acabar el episodio 7 he sentido lo mismo. El guión y el ambiente creado son soberbios, y me cuesta nada olvidar que poco me gustó la idea de que el mejicano fuera la cabeza más visible.
Que bueno que pese a todo, hoy se sigan haciendo estas cosas, y que uno aún pueda permitirse el lujo de saborearlas.

Sigo pensando que a estas alturas hay planos que no se deben permitir, como el de los dedos de un actor que no tiene idea de tocar un instrumento, fingiendo seguir melodías del calibre de grandes compositores; a poco que alguien tenga formación musical se dará cuenta de que van por líneas distintas-
Por otro lado la comedia en los distintos planos, bien sean en actores principales o secundarios se hace realmente amena y atractiva, mostrando en gran parte la realidad en la que los músicos profesionales viven, y por supuesto muy ayudada del carácter excéntrico del Maestro.

La serie me ha gustado. Tiene varios elementos que, personalmente, me gustan para las series. La talentosa underdog, el genio excéntrico que es el amo, música clásica... a priori, tiene los elementos que me interesan.

Como dicen por ahí en otra crítica, es una irrealidad. A un director así le echarían en minutos. Ahí está la gracia, es una ficción. Y dicen que "oh, los músicos follan y se drogan". A mí me parece genial, pues no es una aproximación que veamos muy a menudo, la forma de vivir de estas personas.

Rodrigo me parece un personaje muy bien contruído. No sólo es un excéntrico, sino que es un genio. Domina perfectamente la música, entiende de instrumentos, es sólo que es excéntrico. Eso no le impide pararse en Manhattan y escuchar los sonidos para componer música o detenerse a escuchar a una música callejera para admirarla.

Los capítulos se me hacen súper cortos. Pese a tener 20 minutos (algunos 30) me duran un suspiro, menos que otras sit-coms. Eso significa que es muy entretenido.

Sin embargo... tengo algunos problemas con el guión. Tras ver cosas como Fargo o Weeds, cuyos guiones me encantan, noto que es lo mejor. Las tramas avanzan: TODAS. Todas las tramas avanzan a la vez, están enredadas, una no avanza sin que la otra avance con ella porque están cosidas entre sí. Y al final, en el último capítulo, todas se resuelven. Sin embargo, aquí noto que son destellos, quizás por eso se me hace tan corto cada capítulo. Pienso qué acabo de ver y la respuesta es sólo una cosa. Una audición, una gala, un ensayo... veo que cada capítulo es un destello, muy brillante, pero uno. Siento que muchas tramas podrían haberse desarrollado muchísimo mejor si las hubieran dedicado unos minutos en ese capítulo donde lo único que pasó fue un ensayo. Por ejemplo, la trama de la chica dando clases con la veterana apenas la tocaron en unos tres capítulos. Al final, cuando se resuelve, no noto que se haya desarrollado.

Y lo que me da la impresión es que sueltan cosas, destellos individuales, sin que se deleiten en eso. El capítulo "Mozart con Bacon", ¿de dónde sale? El personaje que empieza no se sabe quién es. Nunca se le mencionó y no vuelve a salir. O por ejemplo, la enfermedad de Cyntia la sacan casi a mitad de temporada y no la tratan. Quizás es el problema, muy centrado en Rodrigo y sus excentricidades y la vida de la prota, pero el resto de personajes (Thomas, Cyntia, la oboista veterana, Ana) los noto muy poco aprovechados.

Aún así, si te dejas llevar, es una serie muy entretenida en la que es muy fácil entrar pese a los pocos conocimientos que se tengan de música clásica.

Terminada en tiempo record la segunda temporada de Mozart In The Jungle, la serie sobre la Orquesta Sinfónica de Nueva York, donde se mezcla la realidad de los músicos trabajadores profesionales con el humor, la magia de la música y el arte de la mano de su director Rodrigo, que esta temporada tendrá que lidiar con la presión de haberse convertido en "El Maestro". Aunque está a la altura de la primera temporada, ha perdido esa sorpresa inicial, pero ha ganado en el cariño a los personajes. Algún capítulo ha flojeado más que otros, por ejemplo en el de cameos, que al no ser yo conocedor de todos los rostros que salían, perdía parte de su gracia. Siempre se ve con una sonrisa continua y una cercanía especial que la hace muy entrañable y con unos personajes a los que tenemos un cariño especial.

Esta serie de Amazon, que en España se puede ver en Movistar, tuvo una primera temporada magnífica, por ser divertida, fresca, original y bien interpretada, pero las temporadas siguientes no le llegan a la suela del zapato, por eso le doy un notable bajo.
Adolece del defecto de otras muchas series americanas, las estiran sin ton ni son y en este caso, metiendo tramas cada vez más esperpénticas. Ya está en la Cuarta temporada y es verdaderamente delirante.