Dragonfly (La sombra de la libélula)

Los profesionales de la crítica, aquellos que comparten con todos nosotros su visión de una obra profesionalmente, catalogan "Dragonfly" como antirecomendable.
Es una muestra más, que una crítica de cine sólo sirve para saber la opinión de quien la escribe, sin tener que tomarla uno mismo como referencia para decidir ver, o no, una película.

Dragonfly es altamente recomendable. Kevin Costner está tremendo. La película lo tiene todo; es emotiva, tensa, intrigante... es preciosa. Lo digo yo, y las decenas de personas que salían emocionadas de la sala.

Una película buena, entretenida, inquietante y sobre todo conmovedora. Mantiene el suspense hasta el final y sinceramente emociona. Tiene un buen reparto y Kevin Costner borda el suyo como protagonista. Discrepo de los que dudan de la banda sonora la cual, en mi opinión, acompaña bastante bien. Muy recomendable de ver.

Soy tan generoso con las críticas, que a este trabajo de Tom Shadyac le he entregado un siete. Quizá porque una parte de la historia resulta creíble. El desenlace y el desarrollo encaminados hacia un cine comercial de paladares agradecidos. Kenvin Costner correcto. No da para más.

Emocionante, notable, espiritual, abierta al más allá ontológico y a la fe del más acá como algo trascendente, algo más grande que nosotros a lo que estamos conectados.

Película que aborda el tema de la comunicación entre las personas que han muerto pero algo crucial obstaculiza que su alma pueda emigrar completamente al más allá de la muerte y entonces, mientras quedan estancados entre el inmediato "post mortem" y la transmigración total, se hacen notar o ponen en comunicación de alguna forma con personas que siguen viviendo aquí aunque en un estado de coma o semivivos entre la vida y la muerte, a quienes usan como intermediarios para que una vez despiertos o así mismo comuniquen algún tipo de mensaje importante a seres humanos en plenitud de esta parte de la vida.

Es una historia bonita, de desarrollo cautivador, amoroso y misterioso hasta el final, lo cual atrapa la atención de cualquiera, sobre todo de personas con fe en que no todo acaba con la muerte.

Al fin y al cabo como dice un aforismo anónimo: "La ausencia de evidencia no es evidencia de ausencia"

Bonita historia de amor más allá de la muerte con, quiérase o no, un final sorprendente. Algo sobre la fe y el amor a la profesión que debería rescatarse. Entretenida y esperanzadora. A mí me gustó, aunque no sea una gran película, y quizá sí una TV movie, pero dulce y llena de espiritualidad. Le hubiera hecho falta una mejor banda sonora, un mejor guión, y quizá un director europeo, pero la idea es buena.