Jump, Darling

A sus casi treinta años, Russell está pasando por un mal momento en su vida. No está seguro sobre su futuro o sus planes de ser actor, pero al final decide hacerse drag queen. Su alter ego, Fishy Falters, intenta ganarse la vida como drag queen primeriza. Tras romper con su pareja al no sentirse apoyado, Russell se va a vivir con su abuela a Ontario, Canadá. Al llegar, ella le recibe con los brazos abiertos y le hace saber que puede quedarse cuanto quiera: justo lo que él necesita. Russell se da cuenta de que la salud de su abuela empeora por momentos, pero ella le deja claro que no se irá a una residencia de ancianos. Por tanto, decide seguir cuidando de ella mientras persigue su sueño trabajando como drag queen en un bar de barrio. La película muestra la tierna relación entre ambos. Sin embargo, todo se tambalea cuando salen a la luz secretos familiares inesperados.