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Playmobil: La película

Animación. Aventuras. Comedia Cuando su hermano menor Charlie (Gabriel Bateman) desaparece inesperadamente y se introduce en el mágico mundo animado de "Playmobil", Marla (Anya Taylor-Joy) se embarca en una aventura para traerlo de vuelta a casa. A medida que descubre los secretos que aguardan en su nuevo mundo, Marla conoce a una serie de heróicos nuevos amigos, como el conductor de camiones Del (Jim Gaffigan), el carismático agente secreto Rex Dasher (Daniel ... [+]
Catálogo de ventas
Vaya chasco. Hace varios años que los fans de los muñecos de Playmobil (los clicks, vaya) esperábamos el contraataque frente a las dos entregas ya estrenadas de "La LEGO película". Sí, ya habíamos visto "La isla del tesoro" en 2009 con los muñecos como protagonistas, pero faltaba la gran película que merecían. Y va a seguir faltando, porque, para este resultado, ya podíamos haber esperado unos cuantos años más.

Supone todo un sufrimiento asistir a este súmmum de mercantilismo que se parece más a un catálogo de ventas que a una película. Todo un alarde crematístico, desde luego, porque uno asume muy pronto que el único objetivo del guion, escrito nada menos que a seis manos, es el de acumular la mayor cantidad posible de muñecos a lo largo del metraje, es decir, la de mostrar un inventario.



Resulta que nos encontramos, en imagen real, con Charlie, un niño de 10 años, y con Marla, su hermana adolescente (Anna Taylor-Joy, bastante pasada de rosca), ambos fans de los muñecos, en una habitación adornada por un ciclón de colores que haría parecer el colmo de la austeridad a Ágatha Ruiz de la Prada. Incluso cantan una cancioncilla. Tras ser sacudidos por un acontecimiento trágico, Charlie se refugia, ante las reconvenciones de su hermana, en la magia "playmobilística", lo que acaba con ambos en mundo de los juguetes, momento en que la película abandona la imagen real.

La primera peripecia que vivirá Marla en "Playmobilandia" será una batalla entre vikingos filmada por una cámara desnortada y protagonizada por los muñecos más elásticos que puedan imaginarse. Como la característica principal de los clicks es su impenitente rigidez, ya nos damos cuenta de hacia qué niveles de falta de respeto va a caminar la cosa…

Marla descubre que su hermano está prisionero en un reino que parece sacado de los fotogramas de "Gladiator", que gobierna el emperador Máximo, malvado hasta decir basta, así que a rescatarlo que se va, acompañada por un camionero (con la voz de Jim Gaffigan en la versión original, que se desata un poco y aporta algo de comicidad a la función) y con una suerte de agente secreto doblado con notable acierto por Daniel Radcliffe. Y estos son los dos únicos detalles positivos que, rebuscando un poco, pueden proclamarse de la mentecata función. Porque podríamos seguir desgranando la trama, alocada y sin rumbo por obra de un guion que parece escrito por párvulos, pero ello solo implicaría dar coba a un producto (nunca tuvo más acierto el término) que camina entre la sosería y la indignidad.



Rodada con escuadra y cartabón, asusta lo burocrático de su puesta en escena, limitada al retrato pormenorizado de los juguetes, conmociona el ritmo cojitranco que acompaña a todas las aventuras y perturba hasta la irritación una banda sonora omnipresente, que no deja fotograma sin música. Todo ello encaminado a una presunta apelación al poder de la fantasía que resulta más dura de tragar que los mensajes de un libro de autoayuda.

Lo peor que se puede decir es que "Playmobil: la película" es que ni siquiera es divertida, el peor pecado que puede asumir un filme que tiene a unos juguetes infantiles como protagonistas. Y ni siquiera puede funcionar la empatía de los fans ante sus muñecos preferidos ante tamaño desatino. Porque es de recibo terminar el comentario de este disparate haciendo referencia a lo que ya no es sino una abierta herejía, colmo de la desfachatez, que atenta contra una de las características sagradas de los clicks. Señores fabricantes de "Playmobil: la película": ¡¡No, las piernas de los clicks no se pueden doblar!!
Escrita por Miguel Ángel Palomo (FilmAffinity)
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