No me voy a extender. La película es preciosa, con un gran mensaje. Y no está nada mal técnicamente.

Eso sí, si se la ponéis a niños o adultos sin una pizca de imaginación ni fantasía, algo especialmente triste en niños, se aburrirán.

Porque es curioso que los mismos que critican esta película, como si fuera la última peli de Ridley Scott o James Cameron, deberían verla para recuperar algo de imaginación y fantasía. Sus hijos les agradecerán si dejan de ser unos tristes.

Buena serie. Relativamente corta, ya que consta sólo de 10 episodios de 30 y pico minutos cada uno.

Comienza fuerte, pero tiene un poco de bajón al medio ya que le dan demasiadas vueltas a la misma bronca durante 3 ó 4 episodios y se hace un poco pesado.

La historia narra el ascenso de violencia verbal y física entre dos personas, que da inicio cuando tienen un encontronazo con el coche en un párking de una gran superficie. Estas dos personas son Amy y Danny, dos almas profundamente dañadas y que, a nivel personal, sólo saben tomar malas decisiones. En el caso de Amy su dolor está muy enmascarado, ya que supuestamente es una feliz madre de familia y una empresaria de éxito.

Y es que los eventos que se van desarrollando te hacen pensar en cuando van a parar de (auto) destrozarse las vidas gratuitamente estos dos personajes, intentando hacer daño al otro, y a su vez arrastrando a la miseria a todos los que tienen a su lado.

Los dos últimos episodios son la traca final. El penúltimo episodio es muy interesante en cuanto acción y gore, y el último es la ida de olla final de estos dos perdedores de la vida.

Estoy seguro que hasta el momento final te preguntarás: ¿De verdad no pueden hacer otra cosa?

Y es que hay gente que, como es criada en el dolor y el sufrimiento, aprende que el dolor y el sufrimiento es lo que deben sentir y hacer sentir. Hasta el final.

El título de mi crítica bien podría servir para definir el argumento de "Tú también lo harías", pero lo voy a usar para definir como está creado el guión.

Porque esta serie, que se ve rápido, tiene un comienzo y un final trepidantes y bien trabajados. Eso sí, por enmedio tienes cientos de increíbles e imposibles giros de guión. Están bien resueltos y bien pensados, tienen lógica, pero son totalmente infantiles e irreales.

La serie me ha dejado un sabor agridulce. Empieza con ritmo y el guión es trepidante, pero al tercer episodio pierdes el interés con tanto fuego de artificio. El último, o dos últimos, capítulos te vuelven a dejar un buen sabor de boca, pero no justifican la mediocridad de los 4 ó 5 episodios del medio.

A destacar algunos diálogos entre inspectores, o inspectores y comisaria y el primer y último capítulo. Poco más.

No sé como describir como me siento después de ver esto del tirón en 4 horas. Supongo que sería una mezcla de lo que alguien sentiría si hubiera visto Daylight (pánico en el túnel) y luego Los Serrano en una sola noche.

La diferencia es que en La noche más larga al final la trama no se reduce a que todo era el sueño de Resines, pero casi casi, y Stallone aquí es un tío que más bien parece el primo de Yosi (el cantante de Los Suaves).

El guión es nefasto, malísimo. Se acaba la serie y hay tantas cosas que sabemos, información que nos dan gratuitamente y que no sirve de nada para la trama, que da hasta grimilla pensar en por que hemos retenido esa información hasta el final.

En general es una serie que tendrían que haber hecho en 6 temporadas, para todo lo que querían explicar. Pero viendo la calidad de los 6 episodios, si hacen 60 la hubiera visto Rita la cantaora.

Los personajes son muy malos, no están bien definidos. Algunos parecen buenos y en otro rato son todo lo contrario, no hay consistencia. ¡Ojo! Esto no es que el guión dé giros maestros, es que nadie se ha parado a pensar que no tiene ningún sentido lo que están haciendo los personajes.

Y por último hay una cosa que me ha dado mucho coraje: el tratamiento que se da de los enfermos psiquiátricos. De ahí el título de mi crítica. Esta serie es un ejemplo perfecto de lo que hay que enseñar a la población si quieren que se estigmatice a los enfermos mentales. Un poco de por favor. Si hacéis una serie mala, porque es mala de cojones, al menos no hagáis que ayude a discriminar a un grupo de población. Gracias.

Me enteré de esta serie a través de una recomendación de miniseries de una web, sin saber demasiado de ella. La serie consta de 6 episodios de ~30 minutos cada uno. Se ven muy fácilmente y, excepto quizás el primer episodio, los demás pasan muy rápido y son muy amenos.

No voy a mentir, no es una obra maestra, pero sí es muy fresca y toca algunos temas muy interesantes: la pérdida, el duelo, la crianza después de enviudar joven, el miedo a abrirse a alguien nuevo después de una pérdida, el crecimiento personal... Todo ello aderezado con un punto paranormal.

La banda sonora es interesante, aunque la verdad podría haber sido un poco más variada (prácticamente sólo se escucha a Melody Gardot y Queens of the Stone Age).

Mención especial para la fotografía y los paisajes de Nueva Gales del Sur en el episodio final de la serie.

Como resumen diría que me recuerda bastante a la película sueca de 2008 "Déjame entrar".

Más en spoilers.