Hay películas que aparentan ser un bodrio, aunque después de verlas puedes quedar sorprendido. En cambio, hay películas como ésta que aparentan ser algo entretenido o con un mensaje al espectador y que sin embargo, se convierten en la mayor bazofia que un servidor ha visto en mucho tiempo.

Soy defensor de las películas malas. Entendibles por bajo presupuesto, mala dirección, pésimo guión o cualquier otra circunstancia ajena o no al productor/director. Aquí no se cumple ninguna de las anteriores premisas, pues cuenta con un buen elenco de actores, banda sonora y una historia a priori, entretenida.

A veces la línea que separa una peli muy mala de una obra maestra es muy delgada. Pues bien, en este caso, sucede todo lo contrario, la película es lentísima, el humor brilla por su ausencia, las escenas de muerte son realmente bochornosas y la historia da unos giros que producen mucha vergüenza ajena, de verdad, muchísima.

En resumen, una película mala mala mala en todos los sentidos. Y mira que me fastidia pues los actores son de mi agrado y la historia parecía ser divertida u original. El gran fallo, reside en la cabeza loca del director que intenta transmitir mensajes a mi parecer sin sentido y con esto ha pensado que sería original. Pues bien Jim, te has pasado de listo, menuda bazofia.

Si me dicen que solo puedo elegir entre ser zombie o volver a ver esta película., dudo que ser un muerto viviente sea una tortura peor que ver esta cosa.

Nota: 2/10

Me ha gustado bastante esta cinta del director de "Another earth". Me parece una película entretenida y qué parte de una idea muy original a mi parecer.

La historia se centra en Ian Gray un estudiante de biología molecular, especializado en el estudio y evolución del ojo humano. Se focaliza principalmente, en la disputa que hay en el interior de este personaje. Es decir, en cómo confrontan las ideas de ciencia y religión.

Los actores están soberbios y transmiten muy bien en todo momento. Casi puedes oir lo que piensas con solo mirarles a la cara.

En definitiva, gran película. Sin embargo, podría haber estado mucho mejor, lo explico en el spoiler.

No puedo negar que no me haya gustado, las carcajadas por semejante mojón están aseguradas.
Vi esto con un amigo por "pasar el rato", sabíamos que iba a ser un dolor de cabeza constante y ridícula hasta la extenuación.

La pusimos porque sabíamos a lo que veníamos. Risas y poco más. El título del film ya lo dice todo. Si tienes estómago suficiente, ésta cosa (porque me niego a calificarla como película) será un buen pasatiempo.

Clint Eastwood nos brinda una película sobre el hombre que consiguió lo imposible. Retrata la figura del héroe, pero más la del humano y cómo teniendo todos los factores en contra, consiguió amerizar un avión con 155 tripulantes a bordo sin que ninguna de estas perdiese la vida. Como muchos expertos en la materia han corroborado, se trata del amerizaje más exitoso de la historia de la aeronáutica.

Dejando de lado la proeza del comandante, toda la tripulación, servicios de emergencia, etc. La película está bastante bien, es entretenida. Es obvio, que no podemos creernos todo lo que pasó al "pie de la letra", sin embargo la proeza se ha quedado grabada en la retina de todo el mundo desde aquel increíble día.

Tom Hanks cumple con las expectativas y el elenco de actores en general cumple, la película es lo que es, no se le puede pedir más, es por ello, que es más que correcta.

Para terminar, como dijo Sully en el film, el trabajo es de todo el equipo y es por eso que es una película recomendable para aquellas personas que no creen en lo imposible (o creían como yo). Gracias Sully y gracias Clint, os debo una.

Era reacio a ver esta película desde hace tiempo, no se si por la antigüedad de la misma o porque el argumento no me atraía demasiado. Sin embargo, ayer me decidí a verla. Lamento profundamente no haberla visto antes y por eso me pido perdón a mi mismo.

La duración de la cinta es de casi 2 horas, son 114 minutos en los que no puedes levantar la mirada de la pantalla, su historia, su dinamismo, su impecable guion y sus estratosféricas actuaciones, sobre todo la de Charles Laughton, hace de este largometraje una visión obligada para todo aquel amante del cine. Sir Wilfrid no sólo es un hábil abogado comprometido al máximo con su defendido; es también un actor soberbio que cuida hasta el mínimo detalle la puesta en escena, el tono de voz, los gestos y el ritmo del juicio. Es una película que se mantiene tan fresca como el primer día, se puede ver 60, 120 o 200 años después y seguirá cautivando a todo el mundo.

He disfrutado muchísimo viendo este drama judicial, con tintes cómicos (muy sutiles) y con una historia bien elaborada y con un final que no dejará indiferente a nadie. En definitiva, una película que se mantiene impasible al paso del tiempo y que hace más que justicia a la novela de Christie