Después de 2 años la saga vuelve para terminar de una vez por todas. Parece mentira, pero así es, y por mucho que nos duela no nos queda otra que asumir que la franquicia más popular y aclamada de la historia del séptimo arte ha llegado a su fin. 3 trilogías, 3 generaciones. 9 películas sin contar las de Rogue One y Han Solo porque son pelis aparte. En los días atrás he ojeado algunas críticas que no resultaron muy esperanzadoras. Es muy difícil hacer algo que agrade a todo el mundo, por no decir imposible. La anterior entrega recibió palos a diestro y siniestro cuando a mí me pareció bastante buena. Sin llegar al nivel de los episodios 3 y 5, pero no vi nada en ella que me hiciera despreciarla u odiarla. Cuando vi Los últimos Jedi a finales de 2017 no tenía conocimiento acerca de la trilogía original ni de El despertar de la fuerza porque solo había visto hasta ese momento los 3 primeros episodios. A día de hoy sí puedo hablar de todas y cada una de las películas de la saga al completo. De manera que para nada he desperdiciado mi tiempo como podéis comprobar. En cuanto a esta novena cinta, tenemos un broche. No se puede decir que dicho broche sea de oro, pero sí de plata de la mejor calidad que podáis encontrar. Y es que pese a que no estamos hablando del mejor metraje de Star Wars, sí podemos estar seguros de que se trata de la mejor de la última trilogía. En absoluto es perfecta, pues le falta una serie de elementos que quieras o no se echan de menos. Si en el penúltimo film apenas había duelos a espada láser, en este, dicho problema no mejora mucho. Otra cosa que considero que no la han hecho bien es el final, ya que no se sabe que es lo que hace Rey. Esto y lo anteriormente mencionado son las únicas pegas que le pongo. Que no es lo único, pero sí lo más gordo a la hora de valorar la película. La aventura espacial prosigue un año después de lo que ocurrió en el episodio 8. Los personajes son los mismos que en los 2 films anteriores más un par de conocidos que nos suenan de las otras 2 trilogías. Los escenarios que vemos en los diferentes planetas que estos visitan son como siempre fantásticos y apabullantes. La batalla decisiva es apoteósica y contiene el espíritu que guardan los 3 films originales. La banda sonora forma ya parte de nuestra memoria, así como de la enorme historia del cine. Unos sonidos que en la vida se olvidarán. Yo me he emocionado bastante al verla esta tarde hace 2 horas. Tal vez el hecho de que no sea un fanático de la saga me ha permitido verla con ojos más objetivos e imparciales. Y no estoy insinuando que Star Wars no me guste, pero admito que hay otras sagas que sitúo por encima. En cualquier caso, siempre que veo pelis de estilo espacial disfruto como un niño pequeño. Me va esta clase de películas. Bueno, ya está todo dicho. Star Wars: El ascenso de Skywalker remata muy bien la saga a mi parecer. Me hubiera gustado mucho haberla podido ver en 3D, pero por el horario decidí verla en modo normal, es decir en digital. A ver cómo le va a esta peli en taquilla, aunque creo que en ese aspecto será un éxito. En el apartado crítico ya tengo más dudas. De los palos no se va a librar porque ninguna película por muy buena que sea es 100% exitosa.

Siendo sincero fui a verla sin saber de qué trataba porque no leí la sinopsis ni vi el tráiler. Por la portada y por la presencia de Gerard Butler me imaginé que está sería una película de suspense, pero conforme la cinta iba transcurriendo me fui dando cuenta de que el género de esta producción es el drama. Y no un drama convencional, sino el más psicológico que nos podemos encontrar. La complicada e insostenible situación que acompaña a los 3 personajes principales va aumentando con el paso de la historia. La tensión se volverá un elemento primordial y muy bien manejado llegados al tramo definitivo.
El nivel de interpretación por parte de los protagonistas nos hace sentir sus tragedias a nivel personal. Muy bien todos con un poder de sentimientos incontrolable y humano.
Las imágenes que reflejan la inquietud y el desasosiego ayudan a ensombrecer un ambiente ya de por sí nefasto y angustiante. Estas imágenes son fruto de una inmejorable fotografía que acompaña a otra clave muy bien conseguida que es la del escenario. La isla es el lugar indicado para recrear toda la atmósfera que percibimos con cada escena de este metraje.
La trama, pese a carecer de originalidad demuestra con soltura que maneja muy adecuadamente todo aquello que proyecta. Y aunque lance de manera tan directa un mensaje al espectador, lo hace de una manera brutal para hacernos aún más conscientes de lo que estamos viendo.
Una película recomendada para cualquiera. No es ninguna novedad por su argumento, pero en cambio hace más que distraer por la temática tan real que propone.

Me quede sin verla en la pantalla grande y hace unos días la vi sin esperarme demasiado por las críticas negativas que leí. Y lo que sentí después de verla fue que me quedé sin disfrutar de 2 buenas horas de cine en las últimas navidades.
La idea es de las más originales que he visto últimamente. Un mundo postapocalíptico en el que enormes ciudades como Londres cazan a otras más pequeñas por todo el mundo. La imaginación es un elemento muy importante en una película de fantasía como esta. La trama con todo lo que nos muestra a lo largo de la historia es interesante y lleva un ritmo entretenido que expone debidamente las subtramas que se hallan dentro de la cinta.
Los efectos hacen muy gratamente su labor. Le dan ese toque de realismo a las escenas que requieren más trabajo técnico que práctico. Por no decir el fantástico viaje que nos regalan estas maravillas visuales al transportarnos a la propia película. Los escenarios son acordes a la temática con esos desiertos, bases aéreas, ciudades rodantes. Los viajes en el cielo en aviones y en tierra en máquinas nos introducen en los ya mencionados lugares. Todo aquello en general que proyecta la pantalla está muy muy bien recreado.
Otro punto a favor que encuentro es el de los personajes. Me gustó especialmente el dúo protagonista con esa amistad semirelación que se palpa en el ambiente. Se percibe atracción por parte de ambos de manera inminente e innegable. Hugo Weaving ejerce muy eficazmente su papel de villano principal. Se le nota esa ambición que lo hace desear más de lo que es necesario.
Como reseña al título de mi crítica espero que este sea el principio de una saga porque hay mucho y buen material que explotar en posibles secuelas. Lamento mucho no haber podido verla en el cine porque estas son las películas que deben verse sí o sí en la gran pantalla para así disfrutar de la producción y valorar el esfuerzo que ha conllevado toda su realización.

Cuanto daño hacen las altas expectativas. Cuando vi el tráiler de Sisu hace un par de meses, pensé que sería la hostia, pero estaba muy equivocado. Y que no se me malinterprete, ya que no he dicho en ningún momento que sea un bodrio. Lo que intento decir es que me esperaba algo que estuviera a la altura de la saga de John Wick. Sí, es posible que esto sea pedir demasiado, no lo niego. En cualquier caso, son cosas mías que poco o nada tienen que ver con el filme del que estamos hablando justo ahora. La historia de dicho filme transcurre en la Finlandia de 1944. Poco tiempo antes de que la Segunda Guerra Mundial termine, un callado y solitario buscador de oro se topa con un grupo de nazis que quiere arrebatarle a toda costa sus valiosos hallazgos. Lo que los alemanes ignoran es que este buscador en realidad es un soldado retirado curtido en 1000 batallas que es capaz de absolutamente todo con tal de ventilarse al necio que ose molestarle. Claramente, estamos ante una copia descarada de Rambo, solo que en este caso es finlandés. Por lo demás, es prácticamente lo mismo. Y no me quejo, pues la película cumple a la hora de entretener, y lo hace mediante una gran cantidad de muertes, sangre y violencia. Algunos asesinatos son bestiales no, lo siguiente y hay escenas un tanto desagradables. Eso sí, era lo esperado, al menos por mí, claro está. En cuanto a la ambientación, esta parece sacada de un western. La fotografía está muy lograda y nos ofrece unas imágenes cuyos escenarios merecen un aplauso. ¿Cuál es el problema?, pues que pese a resultar una apetitosa combinación de géneros, le falta épica, un malo que dé la talla y más acción.

No soy ningún adicto a los videojuegos. Mi afición es el cine y si veo una película que cumple o supera mis expectativas, como en este caso, lo digo. De crío jugaba bastante con la primera PlayStation y de los muchos juegos que tenía (... y sigo teniendo) había uno de Street Fighter que no era de mis favoritos. De hecho, siempre me gustó más el Tekken. Sin embargo, el diseño de los luchadores de Street Fighter me parecía una pasada. Y es que todos los personajes me encantaban, algunos más que otros obviamente, pero jugué con todos ellos.
Entrando ya en materia, tengo esta película desde hace mucho tiempo. Mi padre decidió regalármela por mi santo y cuando la vi, me gustó. Varios años más tarde conocí en mi clase a un seguidor de Street Fighter y este quiso comprarme dicha película por 20€ y lo rechacé sin pesármelo.
Después de mucho, mucho tiempo la sigo teniendo y siempre que me apetece la veo para pasar la tarde o la mañana.
La cinta de animación es una maravilla. Cada personaje, cada movimiento de combate, cada duelo, la música te hace vibrar. Los luchadores se ven muy bien a lo largo de toda la película. Una pena que no haya más pelis de esta saga de videojuegos. Estamos ante un film animado de artes marciales que hace más que entretener.
Esto sí que es una adaptación digna de un juego...