Cuando vamos al cine, primeramente queremos entretenernos, ¿no? En un segundo propósito, tratamos de olvidar por un par de horas el ajetreo que hay en nuestras vidas, y disfrutar una buena dosis de cinematografía. Cada quien tiene sus propósitos y sus estándares cuando ve una película, pero si hay algo que en la mayoría es común, es el hecho de que hay películas que no solo te entretienen, te divierten, te distraen. Hay películas que te emocionan, se meten en ti, te inspiran. Se vuelven algo más que simples imágenes en movimiento. Y esa es la combinación mágica: películas que te entretienen, tienen buenos efectos, pero también se quedan grabadas en tu mente. Blockbusters con alma, por así decirlo. En un género tan complicado como la ciencia ficción, es difícil hacer algo así. Para lograr esto, es necesario contar con una buena historia, con un buen guión que te solidez. Tener un director inteligente, que sepa sacarle jugo a un guión bueno, regular, como quieran catalogarlo. Super 8 reúne con éxito estas bases para hacer una buena película.

Primero que todo, en Super 8 hay algo fundamental. Unos buenos personajes. Muchas veces se destacan las actuaciones en una película, pero si algo es más importante, es que sea un buen personaje. Estos son entrañables, simpáticos, humanos, normales al fin y a cabo. De ahí que se les tenga más cariño. Si, estan llenos de clichés, pero a esta altura en el cine, ¿que película no los tiene? Lo único que falta con buenas actuaciones, las cuales tiene.

A la película se le nota que no es una producción de 200 mdd, pero su brillantez raya en como utiliza los quizás 100 que costó. Todo bien cuidado, todo funcionando para bien de la historia, y no al revés, como se hace muy a menudo. Y aquí entra el punto fuerte de Super 8: Tomar una historia simple, pero buena, y meterle un conflicto (lo que "hay" en el tren) sobrenatural -por así decirlo- que demuestre como los problemas pequeños se resuelven cuando tienes que enfrentar y superar obstáculos mayores. Y bajo esta premisa, Super 8 se maneja como una película inteligente, dulce, simpática, emocionante, conmovedora, entretenida, llegadora... Lo necesario para satisfacer a una gran diversidad de público, y tocar la fibra sensible de muchos. Gracias J.J. Abrams por recordarnos que las grandes películas comerciales no son puros efectos, ruido, peleas, persecuciones y muertes sin razón, si no que lo esencial siempre será lo mismo: la profundidad de los personajes. Un Super 8 para esta notable película.

"Viajar en el tiempo aún no ha sido inventado. Pero dentro de 30 años lo estará" Looper es una película de ciencia ficción, que cuenta como las organizaciones criminales en el futuro, cuando necesitan que alguien "desaparezca" lo mandan al pasado, donde hay asesinos llamados loopers, que se encargan del trabajo sucio. Joe, interpretado por el siempre fantástico y roba escenas Joseph Gordon-Levitt, es uno de ellos. Vive la gran vida, pero todo se complica cuando su nueva víctima es nada más y nada menos que él mismo.

Con una premisa así, e igualmente una introducción a un universo nuevo, bien creado y muy interesante, Looper ya empieza a tener su encanto. Su montaje y situaciones dentro de este mundo de pronto sorprenden, pero una vez que entiendes y adoptas la idea y el concepto, la experiencia se hace cada vez más disfrutable.
Luego, tenemos unos personajes bien delineados, cuyas acciones son coherentes con esa personalidad, y sus dilemas morales (los cuales también nosotros compartimos) y cambios en su forma de actuar y/o pensar son naturales. Y no puedo imaginarme ver a los personajes de Levitt, Willis (aunque sean el mismo) y Blunt por alguien más. Este trío protagonista está brillante. También es justo y necesario destacar el gran trabajo de Rian Johnson tanto en la dirección como en el estupendo guión, que es el que da soporte a esta película.

Lo que me fascinó de Looper es su modo de tratar la complicada temática de los viajes en el tiempo. Bien pensada, y el filme cuenta con el suficiente contenido para que se armen esos encantadores debates acerca de su mundo, de lo que ha pasado. Y es que el mundo creado por Johnson está muy bien hecho, los detalles, el entorno, todo se ha hecho muy bien y funciona en la cinta, que es lo más importante.
El personaje central, el de Joe del presente es por mucho el más interesante. Su fría personalidad, su importancia por lo material, su determinación, pero también su fragilidad y sentimientos, impotencia, y preocupación son plasmados con éxito en la cinta. El que la historia se pueda ver desde la perspectiva de sus tres protagonistas es un gran cierto, ya que esto permite una mayor conexión con cada uno y el poder visualizar la historia desde distintos ángulos, opiniones, y sentir más las situaciones que van ocurriendo al pasar de los minutos.

Looper es una excelente película de ciencia ficción, una joya. Desde sus magníficas interpretaciones y personajes, sus escenas de acción bien elaboradas, intensas y emocionantes, el tremendo y brillante guión, su contenido moral y dramatismo, su casi nula previsibilidad, hasta la ideal conclusión, que no hace más que cerrar con broche de oro una gran película. Junto a Children Of Men, Inception, Source Code y District 9 entre otras, está dentro de lo mejor del Sci-Fi de los últimos 10 años. Sumérgete en el universo creado por el genio Rian Johnson y disfruta de este absorbente y apasionante thriller. No te arrepentirás.