Acabo de ver esta maravillosa película, como si de un bonito cuento de Navidad se tratará, una casa bien acomodada en la Suecia del 1900 en ambiente impoluto al mas mínimo detalle, sus ventanas reflejan la nieve posada en los cristales, árboles de Navidad en todas las estancias, mesas llenas de manjares exquisitos, candelabros de plata y como no, ese color rojo vivo que siempre le ha gustado destacar a Bergman, quien iba a imaginar que detrás de ese idílico ambiente se podría esconder una terrorifica historia.

Si mas no, yo lo llamaría inquietante hasta el punto que no he dejado pestañear, a medida que avanza el metraje todo da un giro de 180 grados, y todo el ambiente se va enrareciendo cada vez mas, hasta límites insospechados, aquí ya vemos ese punto transgresor del Sueco, me atrevería a decir que roza el terror, el morbo, la ambigüedad, algo que le gusta mucho mostrar a Bergman, la inquietud, el miedo, pánico e incluso también dosis de comedia, sin duda una mezcla explosiva, junto con la profunda mirada inolvidable del pequeño Alexander

Nacer negro en un estado como Mississippi en los años 60, era lo más parecido a un suicidio en primer grado, víctimas inocentes que incluso antes de nacer ya eran carne de cañon, ¿Porque? Por su color de piel, un color que tuvo que vivir con el miedo, el temor, el terror, sus corazones rugian a gritos y sus miradas hablaban demasiado, pero sus bocas siempre estuvieron cerradas, censuradas mas bien diría yo, la estupidez humana, o quizá deberíamos decir inhumana, malditos cobardes que cubrían sus rostros, esa era la valentía, tan culpables eran los que consentian como los que actuaban, y después de una gran lucha por la justicia, otra vez la P...A justicia impugna penas de cárcel irrisorias e incluso impunes, quien dijo justicia cuando se habla de política y viviendo en un lugar promovido por el racismo.
Resaltaria sobretodo una interpretación magistral de Daffoe y Gere, los dos se meten de lleno en unos personajes con una carga emocional importante.

Me encanta cuando los directores arriesgan, y en este caso Rose Class lo ha hecho en su ópera prima, lo que aún le da más valentía.

Me gusta como conjuga los planos generales estáticos con primeros planos muy impactantes e inquietantes.

El dominio de la luz tenue y calida es exquisita, esta muy bien buscada, juntos con algún contraluz y contrapicados de nuestra protagonista para darle más importancia.

A nivel história, me ha gustado mucho, siempre se agradece ver algo diferente, una trama que te atrapa de principio a fin jugando un poco con la dualidad de Maud y haciendo que el espectador dude un poco de los momentos reales a los imaginarios.

La interpretación de la actriz, me parece de una credibilidad excelente.

Me ha gustado mucho, muy recomendable.

Excelente tragicomedia, es un reflejo del día a día de las personas que no viven su vida, si no, la de los demás, el personaje de Rosa se hace pequeñito, sin voz y voto, casi invisible, absorbida por su trabajo, familia y entorno, y es que es un hecho existente que existen personas que les encanta organizarte la vida, anulando toda tu existencia.
Itziar Bollain lo ha reflejado a la perfección y ha sabido como liberar este tipo de situaciones tan comunes de una manera tan simbólica como descabellada.
Tengo que destacar la interpretación magistral de Candela Peña, creíble cien por cien, de sus mejores interpretaciones.
También me ha sorprendido lo mucho que ha cuidado Bollain el nivel técnico, dándole unos toques de color muy vistoso a todo con mucha armonía y festivos.
Sin duda es una película muy necesaria de las que te hace pensar

Bueno ya la he visto, es una película de cocción lenta y eso la hace muy personal, toda ella esta tratada con mucho mimo, Viggo la ha hecho totalmente suya, no sólo la dirección, si no su gran afición por la fotografía le suma poderosamente, tiene imágenes muy comunicativas, con diálogo no verbal, la fotografía está excelentemente tratada, y por último como nivel técnico la música también compuesta por Viggo, acertadisima con cada uno de las imágenes.
La historia que plantea no es nada fácil, es dura, complicada y real, tanto por parte del padre como del hijo, son luchas internas de las que apenas hay solución.
Su narrativa a dos tiempos es un gran recurso para ir dando más información a medida que pasa el metraje, el personaje de Willis a media que más le conoces, más le odias, en muy pocos instantes de lucidez por su parte, llegas a impatizar, y es que su carácter endemoniado con el mundo es totalmente desquiciante hasta para un hijo.
Toda la película en sí, me parece un gran trabajo, sobretodo considerando que es su opera prima, ha reflejado perfectamente lo que pretendía.
Como dato curioso, me he quedado muerta cuando he visto a Cronenberg haciendo de doctor, me ha hecho muchísima gracia, se que ellos dos se quieren mucho.
La interpretación de Lance Henriksen, es pragmática, hipnótica y totalmente caótica, se come la pantalla literalmente, le da la chispa a la historia.
Le pongo un notable alto.