Como practicante de Muay Thai desde hace bastantes años, he de decir que la serie me ha aportado poca cosa. Por suerte tampoco tenía grandes expectativas.

En general la serie es muy lenta y, pese a ser de sólo cuatro episodios, se hace muy larga y repetitiva. Trata el tema del mundillo de las apuestas y su corrupción, poco más. No es algo exclusivo del Muay Thai.

Lo que sí puede sorprender a algunos que no estén familiarizados es ver a niños pegándose como los mayores, sin ningún tipo de protección extra. Cosas de la cultura tailandesa, supongo. Para nosotros es un escándalo, para ellos algo normal.

Por resaltar algo positivo, he de resaltar que las escenas de entrenamientos y combates son muy realistas y se agradece. Lo típico en las pelis de artes marciales es desbarrar a más no poder.

Pues eso, que prometía bastante. No soy aficionado al mundillo de los cómics y superhéroes.

Al principio me llamó mucho la atención. Una historia de superhéroes déspotas y despiadados que la lían demasiado. El problema es que después de tres temporadas me da la impresión de que la están alargando tirando de los trucos de siempre.

Lo mejor: su obscenidad por momentos y su humor.

Lo peor: los fallos de guion. Eso típico de que un personaje se entera de tal cosa y no sabes cómo lo hizo y esas cosas. De eso tiene bastante.

Como no soy muy listo no soy capaz de verle el trasfondo a esta peli calificada como genialidad por mucha gente. Hay incluso quien la compara con el Superhombre de Nietzche. No he leído nada suyo, así que en eso no voy a entrar.

Resulta interesante comprobar como muchos de los que la adoran tienen interpretaciones distintas sobre la misma. Todas las cosas a la vez no pueden ser. Puede deberse a que hay gente a la que le mola dárselas de listos.

Había visto la peli hace ya unos cuantos años y volví a verla ayer.

La verdad es que todavía me gustó más que la primera vez. Casi no me acordaba de nada y he de decir que las casi dos horas que dura se hacen amenas.

La historia está muy bien pero lo mejor, a mi modo de ver, es lo auténtica que es. Será cosa del director, de los actores o yo qué sé, pero es muy auténtica.

Gran película.

Con esta serie me pasa lo mismo que con la del Unabomber de Netflix: no hace falta tanto metraje para enterarte de lo mismo. Con un documental de 50 minutos es suficiente.

Aún así, creo que no se hace pesada y que está lograda. Desde luego es una historia digna de contar. La hazaña es épica.

Me sorprenden mucho ciertas críticas de personas de las que presupongo que su ideología de derechas les nubla el sentido a la hora de calificarla. Igual no es una obra maestra, pero tampoco el más absoluto de los truños. Pero claro, si uno cree que la conquista española de América y otros lares se hizo a base de repartir besos, abrazos y flores, normal que la consideren propaganda antiespañola. Malditos ingleses, holandeses y demás calaña!!

Creer que los marineros de la época no eran unos puteros amantes de la fiesta también demuestra una idealización de ciertos personajes históricos, fruto de una visión ideologizada muy escorada a estribor.

Conozco a muchos marineros y trabajé con ellos.