Obra maestra del género de suspense, imposible de igualar siquiera por Hitchock, esta belleza dirigida por Warhol nos deleita con 20 minutos seguidos de un tío comiendo dirigidos con maestría hasta que aparece un gato, que interrumpe su comida. Luego el tío reflexiona sobre los problemas de su vida, como la zoofilia, la necrofagia, etc, etc y por fin acaba la puta película.


Desde luego, hacer películas no era lo que mejor se le daba al amigo Andy.

Desde luego, esto es lo menos parecido que veréis nunca a una película, y los tíos que actúan deben ser amateurs, así que todavía tienen la opción de cambiar de carrera, porque esto no es lo suyo.
Siguiendo con la película, destacar que sí, es una puta mierda, pero no por algo en concreto, sino por TODO. Los efectos especiales, la historia, los actores, el guión, el director, etc etc...


Resumiendo: No malgastéis tiempo viendo absurdececes como éstas, y si acaso ojeadlas por encima para saber a qué os enfrentais, como bien hice yo gracias a leer varias críticas con anterioridad.

Truñar, jiñar, cagar, visitar al señor Roca, plantar un pino, liberar a Willy, obrar, ensuciar, hacer de vientre, recibir un fax, crujir la porcelana, echar el kilo, soltar el lastre, sentarse en el trono, irse por las patas abajo, echar un cerote, defecar, ir al cagódromo, empolvarse el ojo ciego, mear sólido, soltar un zurullo, dejar caer la estalactita, irse por las trancas...



Todo lo anterior sólo son formas de decir la misma cosa. ¡Ah, no! ¡Se me olvidaba una! "Justin Bieber: Never Say Never".


No se me ocurren razones suficientes para ver esta basura, y teniendo en cuenta que la hermana de un amigo mío (fanática de este tío como la que más, que posee todos sus discos y todas las mierdecillas de merchandising que sacan sobre él) dijo que le pareció muy mala, no sé qué más puedo esperar.