Película de ciencia ficción en la que nos recrea una sociedad en la que los militares seleccionan niños con una gran capacidad estratégica para los videojuegos, para así poder dirigir a ejércitos y conseguir ganar una guerra que tiene el planeta con los extraterrestres.
La historia puede tener algo de interés en ciertos puntos, pero es verdad que no consigue cuajar, haciendo que al final uno sea testigo durante dos horas de un mero entrenamiento en el espacio, donde los niños juegan a videojuegos y a batallas, para así poder ser buenos guerreros en la guerra.
La película no cuenta con apenas acción, y se centra en un derroche de efectos especiales que son bastante buenos, pero que si no está apoyados en una buena historia de base sólida; al final no consiguen sostener una trama que se desinfla por momentos. Un aspecto técnico donde han puesto todo el punto fuerte; pero que no es suficiente para conseguir mantener la atención.
La historia resulta interesante al principio cuando se ofrece todo el planteamiento. Pero escena a escena uno va comprobando que la trama no avanza y que resulta en cierto modo bastante decepcionante. Ello es debido a que todo se centra en un entrenamiento de un chico que va subiendo escalafones a pasos agigantados. Pero dicho ascenso no parece real ya que no se profundiza en el esfuerzo que realiza para adquirirlos. Así que uno tiene la sensación de que falta información para comprender al personaje.
Con respecto a las actuaciones, decir que no resultan tampoco para nada espectaculares. La película se acoge a dos míticas estrellas del cine como son Harrison Ford y Ben Kingsley; los cuales realizan un trabajo pasable pero para nada brillante. También se une al proyecto una actriz televisiva que está teniendo mucho éxito que es Viola Davis para dar otro empujón a la historia; pero su actuación es casi tan fugaz como la de Abigail Breslin. Ambas son grandes actrices, pero aquí no tienen tiempo para demostrar su talento.
Aunque el gran peso del film lo tiene el joven actor Asa Butterfield. El niño que a todo el mundo encantó en "La invención de Hugo" o "El niño con el pijama de rayas", aquí realiza un trabajo que no sé si me gusta o no. Tiene momentos brillantes que consiguen conectar con el espectador; pero lo luego hay otros en los que no transmite nada y parece que acaba de leerse el guión. Tal vez sea que el personaje es así de frío, pero la verdad es que su actuación me crea ciertas dudas en decidir si me gusta o no.
En fin, "El juego de Ender" nos muestra una aventura futurista en la que los niños son entrenados para poder salvar al planeta de un futuro nefasto. La capacidad que tienen para realizar batallas en los videojuegos es potenciada para llevarla a la vida real. Una historia que resulta interesante en la teoría: pero que en este caso en la práctica no consigue del todo convencer.